Se dice que son: 1) Los Fertilizantes Químicos y 2) la pérdida de la fertilidad natural de los suelos por el excesivo uso de estos insumos
Estimados colegas, productores y personas interesadas en el tema de los fertilizantes químicos. Veamos a donde nos lleva éste análisis.
Los mayores costos de fertilizacion química y la pérdida de la fertilidad natural de los suelos por el excesivo uso de estos insumos. El fertilizante representa el mayor monto de energía invertida.
Generalmente se menciona que en muchos suelos que han sido cultivados de manera intensiva con aplicaciones altas de fertilizantes quimicos, se disminuye la materia orgánica y la actividad biológica.
En primer lugar surge la pregunta: ¿Realmente el uso de fertilizantes químicos, aun siendo utilizados de manera intensiva provocan disminución de la materia orgánica y la actividad biológica del suelo? Y En segundo lugar, se habla de los altos costos de los fertilizantes y se vuelve de pronto un obstáculo para el proceso productivo.
INIFAP (2012) mencionó que – hay dos opciones para enfrentar la problemática relacionada con los altos costos de los fertilizantes: 1) lograr la optimización de las dosis de fertilizacion química y 2) la promoción de la utilización de abonos orgánicos y biofertilizantes en los cultivos agrícolas.
Al analizar lo anterior me surge otra pregunta: ¿Qué relación existe entre los altos costos de los fertilizantes y la degradación del suelo?
Porque el señalamiento a los fertilizantes químicos de que son dañinos a los suelos y medio ambiente no está muy claro. Lo que torna más complejo y a la vez CONFUSA dicha afirmación.
Desde mi experiencia y conocimiento, los fertilizantes químicos no son lo que por muchos años se ha señalado. E independientemente de que aseguro que los fertilizantes químicos y sus efectos sean más negativos que positivos; surge otra pregunta:
¿En dónde está la responsabilidad de quienes los usan?
Por una parte, los Productores y Distribuidores de dichos insumos, realizan campañas de divulgación y difusión de los productos que expenden; sin embargo, por más de 70 años aún no se observan los efectos y avances en este campo.
Entonces, ¿Seguimos considerando que a) los fertilizantes químicos no son amigables con el medio ambiente, o b) que debemos reducir el uso de los fertilizantes quimicos por su alto costo?
Investigadores de distintas instituciones de enseñanza e investigación, dedicados a la generación de conocimiento e información en ésta área, proponen seguir los siguientes pasos:
1. Optimización de las dosis de Fertilización Química,
2. Promoción de la utilización de Abonos Orgánicos, y
3. Promoción de la utilización de Biofertilizantes.
Por lo tanto, dejando de lado el que los fertilizantes químicos reducen la pérdida de utilidades al productor, las otras dos causas mencionadas igual provocan pérdida de utilidades al no ser aplicados.
El USO EXCESIVO de fertilizantes químicos, realmente no existe. El MAL USO sí.
Productores de alta escala, llamados de alta rentabilidad, que son un pequeño grupo, normalmente son más cuidadosos en el uso de fertilizantes químicos, debido a lo siguiente:
- Generalmente cuentan con más información sobre el tema,
- Cuentan con recursos para su adquisición.
- Las Cantidades aplicadas son importantes.
- La mayoría de la ocasiones, sus aplicaciones están basadas en datos de laboratorio.
- Cuentan con maquinaria de aplicación calibrada.
- Evalúan los residuales al final de cosecha y balancean el ciclo siguiente.
Quienes forman parte de éste grupo de productores, tienden a reducir al máximo el uso de fertilizantes químicos. Sin embargo, algunos errores que sí cometen, consisten en que no aplican los fertilizantes adecuados, generando entonces algunos efectos no deseables.
Por otra parte, otro grupo de productores, que son la mayoría, productores de subsistencia, difícilmente aplican fertilizantes en exceso. Y en muchos casos, no tienen la capacidad económica para aplicar ni la dosis mínima y tipo de fertilizante recomendados. Por lo tanto, se produce algo interesante: como que el productor aplica el fertilizante, y como que la planta produce de manera rentable.
De igual manera, mucho del fertilizante aplicado no es el adecuado, y por lo tanto no es aprovechado por los cultivos encontrando huellas del mismo cuando se inicia la preparación de la próxima siembra. Generalmente, se caracterizan por:
- No contar con la información necesaria sobre los productos
- Ser productores de bajos recursos,
- No aplicar en base a información de laboratorio,
- Por desconocer lo que es una dosis adecuada de fertilizante,
- Provocar ellos mismos deficiencias en los cultivos
Aplicar menos fertilizante por su alto precio, no resuelve la situación; Aplicar fertilizante sin base en un análisis, no logrará buen rendimiento; Aplicar más fertilizante del necesario, no asegura un buen rendimiento.
Entonces no hay uso excesivo de fertilizantes químicos, sino un mal manejo de los mismos.
Y la disminución en su uso se debe, sobre todo al constante aumento de su precio, y a la falta de conocimiento de alternativas que permitan lograr altos rendimientos con menos fertilizante químico.
Es ampliamente conocido que los abonos orgánicos y biofertilizantes, entre otros beneficios mejoran el estatus nutricional de los cultivos agrícolas y fertilidad de los suelos.
Por ejemplo:
Este cambio producido por la falta de disponibilidad de fertilizantes, y sobre todo por el constante aumento de precios, ha creado la necesidad de:
i. Reorientar el uso, manejo y aplicación de los fertilizantes químicos,
ii. Generar tecnologías propias para el Desarrollo y manejo de otros productos, e
iii. Implementar esquemas de capacitación que faciliten la adopción de estos productos
Es conocido que los fertilizantes químicos, si son utilizados adecuadamente, son garantía para lograr altos rendimientos; sin embargo, para bajar costos de producción, los mismos resultados se pueden lograr combinando menos fertilizante químico con abonos orgánicos y/o complementados con los productos conocidos como biofertilizantes.
Otro aspecto cada vez más importante es el de reducir la presencia y el impacto ambiental de los agroquímicos y contaminantes.
El uso de biofertilizantes y materiales orgánicos, deben ser considerados porque realmente se esté convencido de que son una buena alternativa para contrarrestar los precios de los fertilizantes químicos, y no porque necesariamente los fertilizantes químicos sean causantes de contaminación y/o degradación de la fertilidad de los suelos. Porque también los materiales orgánicos, por un mal manejo en muchas ocasiones, está comprobado que llegan a contaminar, más que los fertilizantes químicos. Por lo tanto, cualquier insumo agrícola, incluso los pesticidas, son productos necesarios para una agricultura rentable.
De igual manera, es ampliamente conocido por todos, que el practicar una agricultura rentable, al igual que otras actividades productivas, no se logra con el uso de un solo producto, o el cambio per sé. Los Biofertilizantes, los materiales orgánicos y sus derivados, deben, y en su momento, tienen que ser considerados necesarios dentro de cualquier plan de cultivo.