Los países de la Unión Europea (UE) acordaron hoy aumentar la tolerancia de organismos genéticamente modificados (OGM) en las importaciones de materia prima para piensos, con el fin de facilitar el abastecimiento de los ganaderos europeos, según informaron fuentes comunitarias.
El Comité Permanente de la Cadena Alimentaria -formado por expertos de los 27 países comunitarios- apoyó que esos envíos puedan contener hasta un 0,1 por ciento de residuos "accidentales" de transgénicos, de variedades aún pendientes de aprobación o cuya autorización haya expirado en la UE, pero que sí se admiten en países terceros.
En la actualidad, la UE aplica el principio de "tolerancia cero" en las importaciones y el nuevo límite podría entrar en vigor a principios del verano, si en unos meses no hay oposición de las instituciones comunitarias.
Fuentes de la Comisión Europea (CE) explicaron que el objetivo es acabar con la "incertidumbre" de algunos operadores que venden en el mercado piensos con materias primas de países terceros, a la vez que se facilita el abastecimiento a los ganaderos europeos.
La UE importa grandes cantidades de maíz y harina de soja de Argentina, Brasil y Estados Unidos, donde se aceptan los OGM, y estos envíos son un "suplemento esencial" para la ganadería, según la misma fuente.
El índice del 0,1 por ciento es considerado el "cero técnico" por los centros de referencia de la UE; el Comité Permanente acordó también armonizar los métodos de detección y muestreo de los OGM.
El Parlamento Europeo y el Consejo de ministros de la UE (representantes de los gobiernos) deberán examinar la nueva regulación; si no hay rechazo en tres meses, el citado índice será aprobado por la Comisión Europea.
La organización ecologista Greenpeace criticó, en un comunicado, el incremento de la tolerancia de OGM en piensos, por considerar que "abre la puerta a la contaminación en la cadena alimentaria".
Greenpeace señaló que hasta ahora cualquier envío con residuos de transgénicos no autorizados era rechazado al llegar al mercado europeo, pero las nuevas reglas permitirán la contaminación con trazas de cultivos que no han sido sometidos a test de seguridad en Europa.
Según los ecologistas, los gobiernos europeos han sufrido presiones de EEUU y de las industrias de piensos para relajar las reglas.
"Europa pierde el control sobre su propia producción alimentaria para complacer a los exportadores americanos, el peligro es ahora que haya presiones a los países de la UE de los lobbies pro OGM para permitir la contaminación en alimentos para humanos", según Greenpeace.
Por el contrario, la Federación Europea de Fabricantes de Piensos (Fefac) alabó la "solución técnica" acordada por los países de la UE, porque "mejora la seguridad legal" para las empresas del sector, ya que iguala los análisis y los muestreos
Hicieron lugar al reclamo de Copa-Cogeca
El pasado 7 de febrero El Copa-Cogeca emitia un comunicado donde instaba a los Estados miembros a acordar nuevas normas aplicables en la UE a la baja presencia de organismos transgénicos en los piensos. De lo contrario, se dispararían los costes de los insumos de los ganaderos de la UE, lo cual les costaríacientos de millones de euros.
El Copa-Cogeca hace hincapié en que la UE depende en más de un 80% de las importaciones de proteínas vegetales, que no disponen de sustitutivos a corto plazo. Por esta razón siguen subiendo los precios de los piensos, agravando la crisis del sector ganadero de la UE, particularmente del porcino, ya que en este sector, los piensos representan del orden de un 50-65% de los costes de producción de la UE. Al utilizarse estas materias primas tanto en la cadena alimentaria como en la elaboración de piensos, lo mejor sería hallar una solución técnica tanto para los productos alimentarios como para los piensos.
En vista del manejo a granel que se realiza del grano en el comercio internacional, es imposible respetar la tolerancia cero de material no autorizado en los piensos, por lo que debe hallarse una solución técnica a corto plazo. De lo contrario, los ganaderos de la UE deberán desembolsar cientos de millones de euros. Para el periodo invernal 2009-2010, la universidad de Wageningen ha estimado el coste global en 1.000 millones de euros en 6 meses.
El Secretario general del Copa-Cogeca, Pekka Pesonen, dejaba claro días atrás que "En un momento en que los ganaderos de la UE están sumidos en una grave crisis económica, cierta oposición de la UE a que se halle un umbral práctico de los niveles de presencia de plantas OGM de importación, aún no autorizados en los piensos, dejará en la ruina tanto a ganaderos como a fabricantes de piensos. Por consiguiente, insto a los Estados miembros a adoptar medidas urgentes que impidan la deslocalización fuera de la UE de la industria de los piensos". A más largo plazo, el Copa-Cogeca desea desarrollar su propio suministro de proteínas y reintroducir el uso de las proteínas animales transformadas, para reducir su dependencia de las importaciones.
Sobre Copa-Cogeca
Cuando se firmó el Tratado de Roma el 25 de marzo de 1957 por el que se instituye la Comunidad Económica Europea, éste contenía ya las principales disposiciones marco en las que se basa la Política Agraria Común (PAC).
Reconociendo la importancia del sector agrícola, la Comisión europea expresó su deseo de mantener una colaboración estrecha con los representantes de las organizaciones agrarias desde el primer momento, invitándolos a asistir en 1958 a la Conferencia de Stresa como observadores.
Así es como el 6 de septiembre de 1958 se fundó la primera organización representativa de la agricultura europea, el COPA (Comité de Organizaciones Profesionales Agrícolas).
Poco tiempo después, el 24 de septiembre de 1959, las organizaciones cooperativas agrarias nacionales decidieron crear su organización representativa europea - la COGECA (Comité General del Cooperativismo Agrario en la Unión Europea) - que también reagrupa a las cooperativas pesqueras.
La Secretaría de la COGECA fusionó con la del COPA el 1ero de diciembre de 1962.
Cuando se fundó la COGECA, ésta estaba constituida por 6 miembros. Desde entonces, se ha ampliado seis veces y en la actualidad la integran 35 miembros efectivos y 4 miembros afiliados de la UE; la COGECA también tiene 36 organizaciones miembros colaboradoras.
En el contexto de las recientes ampliaciones de la Unión europea, el COPA y la COGECA han venido reforzando juntos su posición como organizaciones agrícolas representativas más fuertes de Europa. El COPA y la COGECA han acogido juntos a 38 organizaciones agrícolas y cooperativas nacionales de los nuevos Estados miembros.
Ambas organizaciones representan hoy a 76 organizaciones de los Estados miembros de la UE.