Introducción
La soya es uno de los cultivos más antiguos de la humanidad y constituye en la actualidad la fuente de aceite y proteína vegetal de mayor importancia. El grano de soya contiene entre el 18 y el 21 % de grasa y del 38 al 40% de proteína.
En la región San Martin, el cultivo de soya es insignificante, predomina el cultivo de arroz en siembras de dos campaña por año, este sistema tradicional de siembra como monocultivo durante muchas décadas, repercute en la presencia de enfermedades y plagas, en el ecosistema suelo – planta y en la dinámica de los procesos productivos con reducción de los rendimientos, con mayor relevancia en suelos de textura arenosa por la tendencia a acidificarse por el uso de fertilizantes nitrogenados como la urea, erosión y otras prácticas inadecuadas.
Los productores arroceros, no aplican sistemas de rotación de cultivos con leguminosas como la soya, maní, frijoles, considerado estas prácticas como una alternativa en beneficios de la productividad y sostenibilidad de los suelos arroceros, además que permite romper el ciclo evolutivo de bacterias del arroz, de ácaros y hongos patógenos.
El uso de abonos naturales como la dolomita, como enmienda y abono complementario por su buen contenido de calcio, magnesio y silicio, sirve para corregir suelos arroceros bajos en contenido de estos elementos y suelos con problemas de acidez por mal manejo del uso de agua de riego, lixiviación de nutrientes y uso indiscriminado de fertilizantes de reacción acida, entre otras causas.
Estudios de investigación y promoción del cultivo de la soya con diferentes variedades realizados en la región San Martin, han demostrado su buena adaptación a diferentes tipos suelos ácidos y alcalinos y clima cálidos, con buena tolerancia a altas temperaturas y a la sequía, obteniendo rendimientos de 2 a 3 Tn/Ha, constituyendo una importante alternativa comercial e industrial de producción bajo el sistema de rotación de arroz bajo riego.
El presente trabajo de investigación preliminar, bajo la modalidad de parcela demostrativa se ha conducido en terrenos de la Facultad de Ciencias Agrarias de la UNSM – T, con la participación de estudiantes de agronomía, cuyo propósito fue profundizar conocimientos prácticos, en el uso de un abono natural conocido como “dolomita amazónica” procedente de Tingo María, para uso como enmienda calcárea para suelos de reacción acida, y también como complemento nutricional en suelos con contenido bajo en calcio y magnesio. La composición química de este abono es: CaO 29 a 33%,MgO 25% a 29% y Silicio (S) 4 a.5%,Sodio (Na) 0.1%, Azufre (S )0.1%, Boro (B)0.03% ,Zinc (Zn)0.03%.
Mètodologia empleada
La variedad de soya utilizada fue la variedad Jupiter, la condiciones físicas químicas del suelo en estudio fueron del suelo son: textura franco arenoso, pH 5.1, y bajo contenido de elementos N, P, K , Ca y Mg, análisis realizado en el laboratorio de suelos y aguas / FCA.
La aplicación de la dolomita junto con los demás fuentes de abono orgánico y fosforo, se realizó al voleo sobre el terreno y se incorporó con palana y rastrillo a una profundidad de 5 a 8 cms del suelo, esta labor se realizó 20 días antes de la siembra de la soya, que fue en el mes de abril del 2017, la siembra fue a tacarpo a distanciamiento de 0.50 x 0.30 m, empleando tres semillas por golpe a una profundidad de 3 a 5 cms, el cultivo fue bajo condiciones de secano. El área total de la parcela fue 500 m2, empleando 4 tratamientos.
Tratamiento 1: 1.0 Tn de dolomita amazónica por /ha
Tratamiento 2. 1.0 Tn de dolomita amazónica por /ha+ 2 Tn/Ha de compost con EM
Tratamiento 3: 1.0 Tn de dolomita amazónica por /ha + 150 kg/ha de roca fosbayobar
Tratamiento 4: Testigo/ Sin ningún fertilizante.
Evaluaciones realizadas:
Se evaluó el crecimiento y desarrollo fenológico, fisiológico y nutricional del cultivo en los diferentes tratamientos, observándose que la parcela testigo el crecimiento en altura fue menor que los demás tratamientos llegando a 0.80 cm y una maduración muy precoz, presentando las hojas un color verde pálido en un 30% como consecuencia de la baja calidad nutricional del suelo, en comparación con los demás tratamientos que recibieron abonamiento de dolomita y otras fuentes de abono, cuyo periodo vegetativo fue de 20 a 30 días más que el tratamiento testigo.
Además el tratamiento de mayor dosis de dolomita y el que recibió estiércol de gallinaza, demostraron mayor altura de plantas, mayor desarrollo de raíces, observándose también un ligero acame del tallo en un 5%, presentaban hojas más verdes y más tardía la maduración de la hojas y de las vainas, también se observó ligeramente mayor formación de nódulos en las raíces, en el tratamiento de dolomita con compost +EM, tarea realizada con la participación de estudiantes de agronomía y el especialista microbiólogo de la FCA.
Resultados
Cuadro N°1: Rendimientos de grano por/Ha.
Conclusiones y discusión preliminar de los resultados:
La cal dolomita amazónica procedente de Tingo María, por su composición química de carbonatos de calcio y magnesio y silicio, cumplieron una función importante en la nutrición de las plantas, por la disponibilidad de estos nutrientes, que permitió aumentar los rendimientos en grano de soya, de 25% a 46% en comparación con el testigo.( Cuadro 1).
Es preciso comentar, que la cal dolomita no actuó como enmienda, dado que el suelo no presentó contenido alto de aluminio (< de 1.5 meq/100gr), pH 5.1. la dolomita con materia orgánica influyó en el crecimiento de las raíces, permitiendo mayor desarrollo radicular, y mayor nodulación de bacterias nitrificantes, incidiendo en la fijación de nitrógeno conocido este proceso como Fijación Simbiotica de Nitrógeno (FBN), por consiguiente influyendo en los rendimientos de la soya.
También es importante señalar que la eficiencia del fertilizante natural, cal dolomita amazónica, en la soya, se debió también al tamaño de las partículas, influyendo en la velocidad de reacción, y mayor contacto con el área superficial de las partículas con el suelo.
No cabe duda que se presentó una interacción química en sistema coloidal con los componentes calcio - magnesio - silicio aportados por la dolomita y la materia orgánica local “Don Pollo” que aportó macronutrientes más microorganismos eficaces, lo mismo el fertilizante fosbayobar por su aporte de fosforo (18%) y el calcio (26%), estos fertilizantes naturales influenciaron en los rendimientos y la fisiología de la planta de soya, .
Se puede explicar también, que los rendimientos con aplicaciones de dolomita, el contenido de calcio, participó en la división celular de los tejidos de la soya, fortaleciendo la pared celular y en las raíces que cuando estas siguen creciendo su tejido está en continua división, y más se fortaleció con la materia orgánica. Trabajos con cal dolomita demostraron, que si se consigue acelerar el proceso de la división celular, obteniéndose una mayor cantidad de raíces, lo que va a incidir en una mayor de cantidad de citoquininas, mejor inducción floral, mejor polinización. El calcio al igual que estructura el suelo, es el estructurador de la planta y es importante tener una planta bien construida, donde los tratamientos con cal dolomita tuvieron una respuesta positiva en su estado nutricional y productivo, lo que faltaría entender porque el ciclo vegetativo se alargó en 15 días con la dosis 1Tn de dolomita mas compost , en comparación al testigo.
En el caso del Mg, se explica que originó mayor movilidad dentro de la planta, trasladándose de órganos maduros a órganos en crecimiento. Su principal función de este elemento es que forma parte de la molécula de la clorofila, cumpliendo para mayor eficiencia del proceso fisiológico, también el Mg sirve de puente ligando ribosomas durante la síntesis de proteínas y cataliza numerosas reacciones enzimáticas. En relación a la materia orgánica empleada como compost + EM, permitió mayor descomposición de la acción de los microorganismos produciendo CO2 que se transforma en bicarbonato (HCO3-). Esta acción aporta H+, que reduce el pH y HCO3- que se combina con los cationes básicos lavándolos del perfil, bajo está acción química permitió que el pH del campo de soya se incrementó de 5.1 a 5.6 con aplicaciones de dolomita en los diferentes tratamientos estudiados.
Foto 1: Soya Izquierda con dolomita + estiércol / Soya derecha solo dolomita
Foto 2: Soya lado derecho testigo. Lado izquierdo con dolomita
Foto 3: Soya en maduración precoz el testigo y con dolomita+tardia
Foto 4: Participación de estudiantes de la FCA en las evaluaciones
Foto 5: Soya con dolomita + compost mayor número de nódulos