Figura 3.a Figura 3.b
Figura 3: Relación entre el rendimiento y el número (3.a) y peso de los granos (3.b) de diferentes variedades de trigo bajo tres tratamientos de fertilización foliar.
Los incrementos de rendimiento debidos a la fertilización foliar pueden ser atribuídos al agregado de macronutrientes, micronutrientes o a la estimulación del crecimiento producida por las fitohormonas y demás compuestos orgánicos adicionados. La bibliografía menciona aumentos de rendimientos por las tres vías mencionadas. Así, Loewy (2004), trabajando en el SO de Bs As, observó incrementos de rendimiento de entre 120 y 340 kg ha-1 y de proteína de entre 0,4 y 0,8 % por el agregado de 20 kg ha-1 de N foliar en antesis. Miguez (2004) por su parte, informó incrementos en el tenor de proteína de los granos por la aspersión vía foliar de fertilizantes con N en floración.
Por otra parte, el trigo es una especie relativamente poco exigente en elementos menores (Marschner, 1995), aunque se han reportado incrementos de rendimiento por la aplicación de cloruros (Cl-), presentes en el fertilizante foliar II. Fixen (1993) en EEUU, y en nuestro país diversos grupos de investigación (Melgar et al., 2000; Díaz Zorita y Duarte, 2002; Ferraris y Couretot, 2004; Ventimiglia et al; 2003) observaron incrementos de rendimiento y un mejor comportamiento sanitario en diferentes cultivares de trigo por la aplicación de cloruros en suelo a la siembra.
Finalmente, Ventimiglia et al., (2000) mencionan diferencias de rendimiento por fertilización foliar en trigo cuya magnitud no sería explicable por la dosis de macroelemtos aportados, y que estos autores atribuyen a un efecto promotor del crecimiento producido por los compuestos orgánicos presentes en el fertilizante. Del mismo modo, la dosis de macroelementos aportados en el presente ensayo (p.e. 0,82 kg N ha-1) es claramente insuficiente para producir aumentos en la productividad de entre 621 y 815 kg ha-1. Por este motivo, se podría hipotetizar que gran parte de estos incrementos del rendimiento serían atribuíbles a la micronutrición o a un efecto de estimulación del crecimiento. Futuros trabajos de nutrición por vía foliar deberán estudiar el efecto de estos factores por separado. También es muy importante el desarrollo de indicadores de diagnóstico que permitan identificar posibles carencias nutricionales, y así utilizar la práctica de la fertilización foliar complementaria en situaciones con alta probabilidad de respuesta.
Conclusiones:
En el ensayo se obtuvieron muy buenos niveles de rendimiento, a causa de una condición climática favorable determinada por bajas temperaturas medias y elevada radiación incidente. El agregado conjunto de dos fertilizantes foliares permitió incrementar los rendimientos en un grupo de ocho variedades de trigo, sin que la mencionada respuesta difiriera de manera significativa entre las variedades. A su vez, seis de estas variedades expresaron similar rendimiento, promedio de los tres tratamientos de fertilización foliar. El principal componente que explicó las diferencias en los rendimientos fue el número de granos. Dada la magnitud, los incrementos de rendimiento observados no se pueden explicar solamente por el aporte de N, P o S, siendo posible un efecto favorable de los micronutrientes y/o de los componentes orgánicos agregados.
Fotografía 1: Efecto de la fertilización foliar complementaria en el estado 1 nudo elongado (Zadoks 31) en comparación con el testigo sin fertilización. Variedad Back Guapo.
Fotografía 2: Imágen superior: Vista de Buck Guapo sin fertilización foliar.
Imágen inferior: Vista de Buck Guapo con fertilización foliar complementaria en el estado de hoja bandera expandida (Zadoks 39).
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Casi todo el desarrollo del trigo, es CRÍTICO. Si mirásemos este cultivo desde el punto de vista fisiológico y no como un cultivo con etapas fenológicas, algunas críticas y otras solo como en desarrollo vegetativo; podríamos entender, que mientras el culivo está "en desarrollo vegetativo" lo que realmente está haciendo es.... PARIENDO lo que semanas más tarde serán ESPIGAS CON FLORES, QUE LUEGO POLINIZAN Y QUE DESPUES LLENAN GRANOS. Lo que trato de decir es que desde el principio y, a la par con el amacollamiento, las plantas de trigo ya están iniciando también los procesos (no etapas)fisiológicos de FORMACIÓN DE ESTRUCTURAS FLORALES.... a nivel invisible... microscópico.... ¡CELULAR!... Ahí esta la clave del nacimiento de cada grano de trigo.
Atender todo ese proceso, con el apoyo de APLICACIONES FOLIARES FRECUENTES (tan frecuentes como cada semana o al menos cada 14 días), nos llevaría a obtener resultados muy superiores a los que se obtienen con la fertilizaciones tradicionales, que por lo regular suelen ser pocas, pobres e insuficientes.
El trigo no tiene una etapa crítica en particular para ser atendida por sobre las demás etapas; Lo que tiene es una vida completa de 24 horas al día VIVO y realizando todos sus procesos fisiológicos de manera permanente. Así, mientras tú duermes, el trigo METABOLIZA lo que le hayas proporcionado vía suelo o vía foliar..... TODO aquello que le apliques, será agradecido por el cultivo en la cosecha. Lo que le dejes de aplicar, igual te lo reflejará en tus bolsillos.
Hay detractores de la fertilización foliar. Mejor comprueba por ti mismo y échale números. De esa manera, tus propios resultados, serán ARGUMENTOS IRREBATIBLES. No te guíes por el que dirán, eso no te dará de comer.
Saludos. Muy atentamente;
Ing. Sergio Caraveo L.
Asesor especialista en
Manipulación de la fisiología de cultivos