Tiempo desde inoculación (h) | Inoculante | Inoculante + protector |
Nº B. japonicum semilla-1 (x1000) | ||
0,0 | 1280 b | 3590 a |
1,5 | 423 d | 2900 a |
3,0 | 492 d | 3130 a |
4,5 | 280d | 2590 a |
6,0 | 440d | 3270 a |
9,0 | 395d | 2190 a |
12,0 | 372d | 2050 a |
15,0 | 337d | 1470 b |
18,0 | 247d | 947 c |
24,0 | 143e | 927 c |
36,0 | 88f | 813 c |
48,0 | 67 f | 540 c |
Tiempo desde preparación de mezcla (h) | Inoculante | Inoculante + fungicida | Inoculante + fungicida + protector |
Nº B. japonicum semilla-1 (x1000) | |||
0 | 199,2 a1 | 185,8 a | 1686,7 b |
A2 | C | C | |
2 | 545,8 b | 100,0 a | 893,3 b |
B | B | B | |
5 | 445,8 b | 63,7 a | 906,7 c |
B | B | B | |
24 | 397,5 c | 9,3 a | 72,1 b |
B | A | A |
Inoculación | Tiempo desde inoculación (h) | Sin protector | Con protector |
Nº B. japonicum/semilla (x1000) | |||
Inoculante + agua | 1 | 320 a | 730 a |
24 | 160 a | 410 a | |
48 | 100 b | 420 a | |
72 | 61 b | 310 a | |
144 | 22c | 190a | |
Inoculante + Tiram 10% + Carbendazim 10% | 1 | 260 a | 550 a |
24 | 80 b | 240 a | |
48 | 90 b | 270 a | |
72 | 26 c | 140 a | |
144 | 9 d | 78 b | |
Inoculante + Fludioxonil 2,5% + Metalaxil-M 1% | 1 | 220 a | 530 a |
24 | 44 b | 420 a | |
48 | 13 d | 340 a | |
72 | 9 d | 220 a | |
144 | 2 e | 110 b | |
Inoculante + Tiram 20%+ Carboxin 20% | 1 | 100 b | 470 a |
24 | 20 d | 310 a | |
48 | 26 c | 200 a | |
72 | 9 d | 79 b | |
144 | 5 e | 56 b |
Que tipos de protectores existen para semillas sembradas al boleo como tradicionalmente se la llama. Por la poca información que encontré existen protectores de carbonatos para radiación UV y protectores que evitan que los fungicidas afecten a las bacterias que estamos utilizando, también leí que estos protectores al ser sales estarían deshidratando a las bacterias, que hay de cierto en todo esto?
Que se recomienda al momento de la aplicación del inoculante/protector/fungicida al momento de la siembra.
Espero su respuesta muchas gracias.
Estimado Sr. Marco, gracias por su participación con respecto a los adherentes, los protectores ensayados en su composición química ya tienen propiedades adherentes que fijan las bacterias a la superficie de la semilla y evitan su desprendimiento durante el tiempo entre el tratamiento y siembra. Las sustancias adherentes deben estar presentes en una dosis óptima tal que se cumpla la función de mantener las bacterias adheridas pero que a su vez no provoquen un problema de adhesión entre semillas almacenadas sobretodo en condiciones de bajo oreado. Por lo tanto estos aspectos se manejan con el/los tipo/s de sustancia/s adhesivas y su dosis dentro del protector bacteriano. Tenemos pruebas realizadas donde se demuestra la efectividad de adhesión con respecto a un testigo sin protector ante condiciones de movimientos de semilla tratada.
Fuera de Bradyrhizobium, hemos utilizado protectores para el género Rhizobium y Sinorhizobium en lo que respecta a bacterias para leguminosas. También hemos probado protectores para inoculantes a base de Pseudomonas (hay protector comercial), Gluconacetobacter, Bacillus, etc. Según el género bacteriano, el protector posee ligeras variaciones en su composición química. En todos los casos los efectos de mejora en la supervivencia de bacterias por semilla, fuera de lo que es Bradyrhizobium, han sido significativos y promovieron mayor viabilidad sobre semilla respecto a los testigos sin protector bacteriano. Es posible utilizar un protector para cada biofertilizante, la clave está en el correcto diseño del producto y el respaldo con diversas pruebas de eficacia. Saludos cordiales.
Walter, con respecto a su segunda pregunta, le comento que no es sencillo lograr supervivencia aceptable de las bacterias sobre semilla inoculada almacenada en temperatura ambiente. Hay que tener en cuenta que la bacteria sobre semilla está en un ambiente adverso y desde el punto de vista de la mejora de esta condición, es útil considerar tecnologías de protección.
En el mercado hay todo tipo de productos, hay que prestar especial atención porque la mayoría no responde según las especificaciones de su marbete, por ejemplo según nuestros controles, algunos dicen que se puede pre-inocular 7 d pero en esta fecha no se alcanza a recuperar un número aceptable de bacterias por semilla ni se produce respuesta de nodulación adecuada. El panorama se complica si hay agroquímicos que se utililizan junto a la inoculación. Es decir, un inoculante que permita pre-inocular debe estar cuidadosamente desarrollado en base a tecnologías de protección bacteriana y debidamente estudiado para asegurar su eficacia. Le diría que en Argentina hay 3 empresas que tienen productos de calidad y que se puede confiar al utilizarlos. Nosotros comercializamos inoculantes que permiten pre-inocular hasta 20 d, esto quiere decir que a los 20 d de tratada la semilla y conservada en temp. ambiente (23-25ºC) se recuperan al menos 100000 bacterias por semilla que es nuestro umbral de respuesta y/o se produce respuesta de nodulación. También estoy trabajando en la preinoculación de hasta 60 d y 120 d lo cual está en etapa de desarrollo, con resultados promisorios y en constante avance. En conclusión es posible usar una pre-inoculación en soja siempre que se utilice un producto especialmente diseñado para tal fin y que sea respaldado por ensayos y estudios que demuestren su eficacia.
Estimado Walter, con respecto a la técnica de inoculación en el surco, la misma la considero muy útil para el objetivo final que es el aprovechamiento del N del aire, y si se hace correctamente ofrece muy buenos resultados en cuanto a la respuesta del inoculante (siempre que las condiciones agronómicas sean las adecuadas por ejemplo que no haya exceso de N en el suelo, que el inoculante sea el apropiado y de buena calidad, que no falte humedad en el suelo, etc.). Puedo decir que la mayor ventaja de esta técnica es evitar el tiempo de exposición de la bacteria sobre la semilla durante un determinado tiempo en almacenamiento, tal como ocurre con la técnica convencional de inoculación, con los riesgos que ésta tiene de disminuir significativamente la viabilidad bacteriana sobre semilla que se produciría hasta el momento de la siembra (la importancia de ésto dependerá del tipo de inoculante y de la/s tecnología/s de protección bacteriana empleados). La desventajas que puede tener esta técnica es que requiere mayor trabajo y constante control durante el proceso de aplicación. Es importante destacar que con la inoculación en la línea la aplicación de bacterias no es tan localizada como la técnica sobre semilla, ya que hay una dispersión de bacterias en el entorno de la semilla, sobre la línea de siembra esto traerá como consecuencia un cambio en la distribución de nódulos en la planta, resultando frecuentemente mayor proporción de nódulos en raíces secundarias respecto a la técnica convencional sobre semilla, sin embargo esto no es un impedimento para la fijación de N. Saludos.