A pesar de los avances de la ciencia y tecnología se siguen manejando elementos empíricos que históricamente han pasado de generación en generación y cuya tendencia nos revela que serán heredados a las nuevas generaciones rurales; estos elementos se relacionan con la creencia y la fe que la gente especialmente del campo profesa a la influencia de las fases lunares en la naturaleza y en este caso en las actividades agropecuarias. Es muy común escuchar a muchos agricultores que las siembras y cosechas deben realizarse según las fases de la luna; que estas influyen en el crecimiento y desarrollo de las plantas, en los animales y hasta en el ser humano.
Para compartir este tema y consensuar las interrogantes mas adelante planteadas, necesitamos conocer al menos las generales sobre la luna, sus fases, algunas experiencias empíricas y otras inducidas científicamente a esclarecer la influencia lunar en procesos productivos, en el crecimiento y desarrollo de las plantas.
Las fases de la luna son las diferentes iluminaciones que esta presenta durante el ciclo realizado en 29.53 días.
L
una nueva o novilunio. Ocurre cuando la luna se encuentra entre el sol y la tierra, uno de sus hemisferios, el que nosotros vemos, queda en la zona oscura, y por lo tanto, queda invisible a nuestra vista. La luna esta mas cerca del sol.
Cuarto creciente de luna. A medida que la luna sigue su movimiento de traslación, también crece la superficie iluminada visible desde la tierra, la Luna, la Tierra y el Sol forman un ángulo recto que permite una semana más tarde mostrarnos la mitad de su hemisferio iluminado; Durante este tiempo la parte iluminada de la Luna va creciendo día a día hasta la Luna Llena.
La Luna Llena o plenilunio. Cuando el sol, la tierra y la luna están en una línea casi recta; la luna recibe los rayos del sol en su cara visible, por lo tanto, se ve completa y mas alejada del sol.
Cuarto Menguante de luna. Los tres cuerpos vuelven a formar ángulo recto, por lo que se puede observar en el cielo la otra mitad de la cara lunar. La luna va decreciendo y su parte iluminada va mermando hasta desaparecer de nuestra vista, llegando otra vez a su posición inicial y comenzando un nuevo ciclo.
Figura 1. Fases LunaresLa Luna es el único satélite natural de la tierra, es un astro opaco y sin atmósfera, que refleja la luz del Sol. Tiene un diámetro de 3.476 Km., es 50 veces más pequeño que la Tierra y dista de ésta 384.000 Km. En su movimiento de rotación invierte unos 29 días y medio, por eso nos ofrece siempre la misma cara. Gira también alrededor de nuestro planeta (movimiento de revolución-traslación) tardando en promedio 27,554 días. Tiene una temperatura promedio durante el día de 1070 C y durante la noche de – 1530 C.
A diferencia de la tierra que recibe el 7 % de la luz solar, La luna absorbe el 93 % constituyéndose en un filtro o cuerpo intermediario de la luz solar, la cual es proyectada a la tierra con menos intensidad pero de manera mas sensible, penetrante y estimulante para los seres vivos.
Las antiguas civilizaciones (Babilonios, mayas e incas ) realizaban prácticas agrícolas de acuerdo con las fases lunares; definiéndose al respecto tres categorías de grupos:
a) los que continúan aplicando y defendiendo esta práctica desde una posición empírica y sin poder explicar los procesos,
b) los que no creen y la catalogan como un mito y
c) los que creen a medias, sin descartar la posibilidad de tal influencia, con limitaciones de experiencias y datos convincentes para definirse.
Un ejemplo de influencia lunar ya demostrado en el campo de fisiología vegetal, es el proceso fotosintético de las plantas siendo mucho mas intensivo durante el periodo extensivo aguas arriba (14 días a partir del 3er día de luna nueva hasta el 3er día de luna llena), confirmándose que el mayor incremento de la fotosíntesis de los cultivos se registra durante el periodo intensivo aguas arriba, 7 días partiendo del 3er día de C. Creciente hasta el 3er día de luna llena, periodo donde hay mayor incremento de la intensidad de la luz lunar en la tierra como se muestra en la figura No.2.
Figura – 2. PERIODOS DE MAYOR INTENSIDAD DE LA FOTOSINTESIS EN LAS PLANTAS
Las reacciones de las plantas a la influencia de las fases lunares pueden ser diferentes, dependiendo de las exigencias biológicas propias de cada especie.
¿Tendrá sensatez y lógica prestar atención a esta práctica de los agricultores? R.¡Claro que sí! Es sensato y lógico dar la atención necesaria a prácticas de sentir histórico y colectivo, como también respetar, atender y tratar de esclarecer las inclinaciones de los productores ignorando su nivel productivo, económico y social.
¿ Esta práctica es antagónica a la ciencia o a la formación de los técnicos?R.De ninguna manera lo es, ya que no niega los avances tecnológicos ni se opone a los criterios técnicos actualmente manejados; aún sin tener abundantes fundamentos científicos que avalen tal practica, tampoco contamos con elementos firmes para negarla. Pero es evidente que en los técnicos, universidades y otras instituciones agrícolas prevalece una mentalidad y una formación urbanizada carente de iniciativa e interés de crear las bases para desvirtuar o para confirmar tal relación influyente.
Información basada en giras de campo y opiniones de productores de diferentes regiones de Honduras.
Click aquí para ver la imagen en tamaño real¿Qué elementos de veracidad hay en esta práctica o creencia? R.Hay muchos! Responden los productores de acuerdo a su experiencia;
no hay ninguno responden con firmeza algunas personas y técnicos consultados; otros consideran que
puede haberlos pero no conocen el tema. Hay experiencias que avalan tal influencia: en papaya, trabajo de tesis A. Acosta Torales y M. C. Jaramillo Márquez, Universidad EARTH, C. R. 2001, en café, caña de azúcar, frutales, corte de madera, podas e injertos, según experiencias de J. Restrepo Rivera de la Fundación Juquira Candirú (en Colombia, Brasil y México 2005), en soya, experiencias de campo por C. A. Zelaya O. (Honduras 1993-2002), en maíz, fríjol, chile, tomate, camote, papa, zanahoria, experiencias de agricultores en diferentes zonas de honduras (1997 – 2004).
Considerando la importancia que tal práctica representa, se recomienda lo siguiente:
- recopilar, sistematizar y documentar las experiencias concretas de los productores,
- que los técnicos, personas y gremios interesados se involucren en casos concretos referentes al tema,
- que las universidades y escuelas agrícolas consideren las experiencias nacionales y de otros países, relacionando la temática, investigando a través de tesis de grado o en trabajos interdisciplinarios con la participación de sus especialistas.