El papel del moco en la salud respiratoria
El moco secretado por el sistema respiratorio es un importante mecanismo de defensa contra las infecciones. Está compuesto por un 95% de agua, un 2% de sales y un 3% de compuestos orgánicos, incluidas células relacionadas con el sistema inmunológico, anticuerpos y lisozima, una enzima capaz de destruir microbios y eliminar las impurezas.
El moco protege las células epiteliales y los cilios respiratorios, mantiene el sistema respiratorio húmedo y atrapa partículas como polvo, contaminantes y microorganismos, evitando que cuerpos extraños lleguen a los pulmones.
Muchas enfermedades de las aves y el ganado están acompañadas por una acumulación de moco en el sistema respiratorio, lo que empeora el pronóstico de la enfermedad:
1. La acumulación de moco, especialmente cuando la viscosidad del moco es elevada, disminuye el movimiento de los cilios respiratorios. Los cilios respiratorios desempeñan un papel esencial en el sistema de limpieza del tracto respiratorio (consulte nuestro artículo sobre la importancia de los cilios respiratorios aquí)
2. Los patógenos, especialmente las bacterias, crecen fácilmente en acumulaciones de moco, iniciando infecciones secundarias.
3. Las masas de moco obstruyen las vías respiratorias y causan dificultades para respirar con normalidad.
Aceites esenciales con acción mucolítica y expectorante natural
Un mucolítico se define como una sustancia que reduce la viscosidad del moco al alterar la estructura química de la mucina. Un expectorante es un agente que promueve la expulsión de moco del tracto respiratorio al aumentar la lubricación.
Durante las enfermedades respiratorias, se administran mucolíticos para reducir la viscosidad del moco acumulado. Cuando el moco se vuelve más fluido, los cilios pueden moverse más rápido, limpiando el tracto respiratorio. Los mucolíticos a menudo se combinan con expectorantes para un mejor efecto.
Los aceites esenciales ricos en fitoquímicos con grupos cetona y lactona en su estructura química, como por ejemplo verbenona, tujona, carvona, criptona, pulegona, mentona y pinocamona, son excelentes mucolíticos . La menta, el romero y el pino son buenos ejemplos.
Por otro lado, los aceites esenciales ricos en fitoquímicos con grupos éter o éter fenólico en su estructura química, como el cineol, el guayacol y el anetol, son expectorantes. Algunos ejemplos incluyen el eucalipto (quimiotipo cineol) y el anís estrellado.
Ventajas del uso de aceites esenciales con actividades mucolíticas y expectorantes
Los aceites esenciales han demostrado ser capaces de mantener a los animales sanos y productivos incluso durante los períodos de riesgo de enfermedades respiratorias.
Siempre que haya una infección respiratoria, se pueden administrar aceites esenciales junto con el antibiótico de elección para reducir los signos respiratorios y acelerar la recuperación.
Cuando hay una concentración elevada de amoníaco en el ambiente, los aceites esenciales evitan la acumulación de moco, manteniendo a los animales sanos.
Además, los aceites esenciales son multifuncionales, proporcionando beneficios adicionales:
- Ciertos aceites esenciales son antimicrobianos y tienen efectividad contra ciertos patógenos, como micoplasma u hongos respiratorios.
- Otros aceites esenciales son capaces de acelerar la frecuencia del latido ciliar hasta un 20%, potenciando la limpieza fisiológica de las vías respiratorias.
- Muchos aceites esenciales son poderosos antioxidantes.