Internacional - La FAO reclama nuevas medidas para acabar con la influenza aviar
Publicado:19 de julio de 2004
Fuente:ConsumaSeguridad
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) pide a los países asiáticos para que no sacrifiquen a sus aves silvestres como medida para luchar contra los nuevos brotes de influenza aviar detectados en China, Tailandia y Vietnam. Según la organización, para garantizar una producción avícola sana hay que mejorar las medidas de prevención del contagio.
“El sacrificio de aves silvestres no ayuda a prevenir o a controlar la enfermedad”, asegura Juan Lubroth, especialista de la FAO en sanidad animal. El experto asegura que “las aves silvestres son un elemento importante del ecosistema y no debemos amenazarlo”. Lubroth considera que si bien algunas especies de aves acuáticas pueden ser un reservorio del virus de la influenza aviar, “hasta ahora no tenemos pruebas científicas de que la fauna silvestre sea la causante de los rebrotes de la enfermedad”.
La FAO sostiene que las principales vías de contagia de la influenza aviar son la falta de higiene en la cadena de producción, procesado y venta de aves de corral y de productos contaminados; los lapsos en los sistemas de bioseguridad (precauciones para evitar el contagio de enfermedades infecciosas); y el escaso seguimiento de las recomendaciones de medidas de control. “Para sacrificar aves silvestres, muchas de las cuales están en peligro de extinción, o cortar árboles para destruir su hábitat natural, no hace sino debilitar a estas especies, obligarlas a migrar hacia otros lugares y hacerlas más susceptibles a la gripe aviar o a otras enfermedades”, asegura William Karesh, veterinario de la Wildlife Conservation Society.
Para la FAO, el riesgo de contagio puede disminuir mejorando las instalaciones de cría de aves domésticas, e intensificando las medidas de bioseguridad, como evitar que aves de corral tengan contacto con otras aves voladoras que no están en cautiverio. Asimismo, mejorar la vigilancia e informar inmediatamente, desde las aldeas, permitirá detectar nuevos focos de infección y enfermedad antes de que sea demasiado tarde. Esta es la mejor manera de controlar la influenza aviar, asegura la FAO. Si no se declaran los nuevos brotes el éxito de las medidas de control se reducirá, y con ello se retrasará el inicio de las actividades de repoblación y sus inversiones.
Los planes de respuesta rápida ante la crisis deben incluir el sacrificio inmediato de las aves afectadas, usando equipos de protección y vestimenta adecuada a la normativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), además de la limpieza y desinfección de las instalaciones productivas. Las aves sacrificadas no deberán utilizarse jamás como alimento para otros animales, ni deberán comercializarse, según la FAO. Además, los mercados y los canales de venta deberán ser vigilados y controlados con análisis periódicos para controlar las mercancías.
Lic. en Ciencias Animales, Doctor en Filosofía - PhD, Ciencia Animal (Ciencia Avícola) / Gestión de micotoxinas en las Américas Estados Unidos de América