Un aporte, sobre este tema se a llevado a cabo diversas investigaciones alrededor del mundo, a fin de ofrecer al mercado un producto científicamente comprobado y acorde con los criterios de los métodos experimentales. En respuesta a las necesidades y oportunidades de la avicultura, conforme iba cambiando la industria, especialmente en evolución genética y del aumento de la productividad dentro de un marco sustentable. Estudios demuestran que la suplementación de niveles de 33% de inclusión de los microminerales inorgánicos, utilizados tradicionalmente en la industria, garantiza concentraciones iguales o superiores de minerales depositados en los tejidos en comparación con las fuentes inorgánicas, con la ventaja adicional de que se reduce considerablemente la excreción de minerales al medio ambiente. El éxito de las investigaciones sobre la idea de la sustitución total se extendió posteriormente al campo. Se estima que actualmente, más del 15% del total de reproductoras de pollos de engorda en Brasil, están consumiendo minerales orgánicos en sustitución total de las fuentes inorgánicas. Los índices de desempeño y los demás parámetros medidos, tanto para matrices pesadas como para gallinas de postura y pollos de engorde, son bastante satisfactorios y sorprendieron a la industria que tal vez por desconocimiento del potencial de los minerales orgánicos. Es necesario tomar en consideración que con la evolución actual de la genética es absolutamente indispensable conocer, no solamente las exigencias nutricionales de microminerales, sino además garantizar su disponibilidad para el animal. Eso es lo que se logra con el uso de los minerales orgánicos. La industria avícola moderna está comprometida con el medio ambiente, la seguridad alimentaria y la sostenibilidad. Por tal razón, busca tecnologías que permitan lograr animales más saludables, sin dejar de lado el compromiso con la productividad y las utilidades. Factores de producción como la edad, la estirpe, la muda forzada, los programas de luz, las instalaciones y el ambiente, la sanidad y, por supuesto, la alimentación de las gallinas, pueden modificar el rendimiento y la composición química del huevo y de sus propiedades funcionales. Las enzimas digestivas constituyen uno de los grupos de suplementos, debido al hecho de ser un producto natural y de probada eficacia. Su empleo hace posible el incremento energético del pienso disminuyendo al mismo tiempo el coste del mismo. La genética del ave, totalmente esencial para el tipo de producción que pretendemos obtener carne o huevos. Las condiciones del hábitat, los galpones, en el sentido más amplio, es decir, a todo lo que abarca al confort ambiental del ave, a sus necesidades de espacio, equipo, etc. El manejo, también en el sentido más amplio, abarcando así tanto al trato a que se somete a las aves, como a la higiene del galpón y a los planes de bioseguridad para prevención de enfermedades. El avicultor que intenta preparar alimento para sus aves o el nutrólogo de la fábrica de alimento han de tener unos conocimientos bastante profundos sobre el tema, tanto más elevados cuanto mayor sea la complejidad de cada empresa.
Felicitaciones a Xavier Roulleau, Socio-Gerente. Dietaxion por tan brillante investigación.
Ing. Oswaldo Seclén.