Un buen servicio de conservación de instalaciones y equipos, busca reducir al mínimo las paradas del proceso, al mismo tiempo que hacer más eficaz el empleo de dichos elementos y de los recursos humanos, con el fin de conseguir los mejores resultados, con el menor costo posible.
La necesidad de tener una organización apropiada de mantenimiento, de poseer controles adecuados, de poder planear y programar con acierto las labores, ha surgido por varios motivos a saber:
1. CRECIENTE MECANIZACIÓN. El uso de máquinas en la industria avícola, ha reducido el costo de mano de obra directa, pero a la vez ha impuesto la exigencia de conservar debidamente éstas.
2. MAYOR COMPLEJIDAD DE LOS EQUIPOS. Esto amerita servicios de mantenimiento altamente especializados.
3. AUMENTO DE LOS INVENTARIOS DE REPUESTOS Y ACCESORIOS. Este hecho se debe a la mecanización y complejidad de los equipos.
4. CONTROLES MÁS ESTRICTOS DE LA PRODUCCIÒN. Aun cuando esta clase de controles, han reducido al mínimo los inventarios de materiales y repuestos, entre las distintas operaciones, también han provocado, que sea mayor el impacto de las interrupciones en la producción.
5. EXIGENCIAS CRECIENTES DE UNA BUENA CALIDAD. Con la implementación del HACCP, en las plantas, para mejorar la calidad e inocuidad del producto, que desde luego lo hace más vendible, observamos que sobresale también, la urgencia de corregir de inmediato cualquier condición impropia.
6. COSTOS MAYORES. Son el resultado de una mano de obra cada vez más cara y del constante aumento en los precios, accesorios y materias primas.
En virtud de los numerosos elementos, que tienen su parte en un costo de conservación mayor, la dirección empresarial ha tenido que prestar más cuidado al renglón de MANTENIMIENTO.
ASPECTOS POTENCIALES DE MEJORAMIENTO DEL MANTENIMIENTO
A menudo se ha descuidado la función de MANTENIMIENTO. Para muchas empresas, el mantenimiento ha sido y sigue siendo un mal necesario, como los impuestos y beneficios secundarios. Por desgracia este punto de vista, hace que se menosprecie la función.
Síntomas de indiferencia hacia ésta, por parte de la Dirección General , son entre otros los siguientes:
- Numerosos paros de las máquinas.
- Frecuentes horas extraordinarias de trabajo.
- Preferencia hacia la producción, sobre el buen estado de operación de la maquinaria.
- Falta de un programa de reposición de equipos.
- Mantenimiento Preventivo insuficiente.
- Falta de una selección planeada de Directores, Jefes, Supervisores de Mantenimiento
- Preparación inadecuada del personal de Mantenimiento.
- Deficientes instalaciones del taller y herramientas de mantenimiento.
Sin embargo creemos que la indiferencia hacia el mantenimiento se está viendo superada.
La alta dirección de una empresa, consciente de su papel, se ha dado cuenta que la función del cuidado de los equipos, es parte constitutiva de la operación total de una planta.
Los principios y prácticas utilizados y probados en la producción, a menudo no han sido extendidos a mantenimiento. A la función de Mantenimiento se le ha visto con tal desdén, que no se han aplicado a ella, las modernas técnicas de administración. Esto ha retardado el desarrollo de dicha función.
Cuando solo se siguen algunos o ninguno de los siguientes procedimientos, quiere decir que falta una aplicación de las técnicas administrativas en el mantenimiento:
- Planificación de los trabajos.
- Procedimientos escritos.
- Medición del desempeño.
- Planeación y programación.
- Programas de Capacitación.
- Técnicas de Motivación.
- Control de tiempos y costos.
La alta dirección ha demostrado que los principios y prácticas administrativas, sirven tanto para el mantenimiento, como para producción.
Se ha carecido de un adiestramiento apropiado de directores y supervisores de Mantenimiento. En el pasado los Capataces de Mantenimiento, solían ser elegidos tomando en cuenta sus conocimientos de mecánica, o su antigüedad. Más tarde, otros niveles de la supervisión como Directores, Coordinadores, Superintendentes etc. Solían provenir del grupo de Capataces y rara vez se llevaban a cabo programas de capacitación o adiestramiento con motivo de esos ascensos. Esto daba por resultado que los directores de Mantenimiento tuvieran mucha capacidad técnica, pero poco conocimientos en Administración.
Pero actualmente, ha tenido lugar un claro cambio, los supervisores ahora suelen ser ingenieros graduados que no provienen de los rangos menores y a los cuales se les proporciona adiestramiento en administración y se les proyecta a niveles superiores en virtud de sus conocimientos y capacidades administrativas.
Estamos seguros que la nueva generación de Directores de Mantenimiento se encuentra mejor calificada para convertirse en profesional.
Existen importantes posibilidades de reducción de costos que han sido pasadas por alto. El reconocimiento de la existencia de un potencial de disminución en los costos, se ha visto limitado en virtud del menosprecio con que se ha visto la función de MANTENIMIENTO, la falta de controles de costos y la reducida experiencia de la Dirección de Mantenimiento. La verdad es que existen posibilidades de bajar costos en muchas áreas entre ellas las siguientes:
- Reducción de labores innecesarias al aplicar acciones preventivas, métodos mejores y herramientas perfeccionadas.
- Mayor productividad de la mano de obra, mediante una planeación y programación más eficaces, y de una evaluación del desempeño.
- Mejor control de costos extraordinarios, como tiempo adicional, máquinas paradas, reconstrucción de piezas dañadas, piezas de repuesto etc.
Estamos convencidos que las reducciones en los costos, se acumulan en proporción al esfuerzo realizado por la Dirección General de las plantas, para mejorar los procedimientos de Mantenimiento, controles de costo y capacidad general de la Administración de Mantenimiento.