La industria avícola peruana recibió con dolor el fallecimiento de Julio Soichi Ikeda, el inmigrante japonés que revolucionó el sector.

Ikeda creó la principal empresa avícola peruana que hoy cuenta con cerca de 5.000 trabajadores, 100 granjas integradas y dos plantas de beneficio con producción de dos mil pollos por hora. En sus comienzos había sido deportado a EE.UU. durante la Segunda Guerra Mundial. Tras la culminación del conflicto bélico, volvió a tierras peruanas en busca de una segunda oportunidad.
En 1948, con ayuda de un primo, Julio Soichi Ikeda incursionó en la crianza de patos. El inmigrante japonés no imaginó que lo que comenzaba como un negocio de supervivencia despegaría hasta transformarse en San Fernando, la mayor empresa avícola de Perú. Tras algunos años, la familia se dio cuenta de que también podían ingresar a la crianza de gallinas y empezaron la producción de huevos, que repartían por bodegas y mercados de la zona.
Julio Soichi Ikeda, su esposa Rosa y sus cuatro hijos (foto: archivo de la familia Ikeda) Ikeda fue adquiriendo conocimiento en el sector y expandiéndose. En 1963, decide apostar por adquirir un lote de pollitos luego de notar que, dentro del mercado culinario peruano, el pollo a la brasa comenzaba a ser una moda. Fue así que, descubriendo las tendencias del momento y atento a la demanda de los consumidores, creció al punto de expandir sus terrenos para la crianza de sus animales. Fue aquí, en este periodo de expansión, cuando, en 1968, cae una crisis de precios y una peste que “desplumaron” su pequeña empresa.
Pero esta recesión, como las anteriores, también fue motivo de acción y fortaleza. Con la garantía de su buen trabajo y su experiencia previa, un amigo le vendió un lote 4000 pollitos a crédito. Dos años después, el granjero, junto a su familia, supo aprovechar su chance duplicando los pollos en sus tres galpones. Y luego de repuntar una crisis más, sus hijos comenzaron a participar y a aportar conocimientos a su padre. Fue así como se dividieron las tareas: Alberto había construido el último galpón en Chincha, mientras Máximo y Fernando se dedicaban a la producción y Julio a la comercialización. Finalmente, en 1972 los Ikeda deciden ponerle un nombre a su marca y optan por “San Fernando”, en honor del menor de los hermanos. Para ese momento, la producción de la empresa llegaba ya a 8000 pollos semanales. Pero aún debían enfrentarse a una importante competencia en el mercado, ya que había muchos más granjeros ofreciendo lo mismo que ellos.
Entre otros hitos importantes esta el año 1977, cuando inician las operaciones de la primera planta de alimento balanceado y, gracias a la experiencia y los buenos resultados, deciden incursionar en dos nuevos negocios: el de huevos comerciales, en 1979, y luego en la crianza de cerdos, en 1986.
Hoy, San Fernando es líder en todos los mercados en los que participan a nivel nacional. Se destaca como el mayor productor de carne de aves, huevos, cerdo y embutidos. En el extranjero, exportan a mercados competitivos. La empresa ha logrado establecer un sólido lazo emocional con sus clientes, convirtiéndose en parte esencial de la mesa de los peruanos a lo largo de varias generaciones. Su eslogan es “La buena familia”.
Sin dudas que la perseverancia, la humildad, el trabajo y el respeto fueron las claves de “Don Julio” para poner a San Fernando en un lugar privilegiado y ejemplar.
Referencias:
.- Ikeda, la buena familia. Enrique Higa Sakuda / 11 Feb 2021. http://www.discovernikkei.org/es/journal/2021/2/11/ikeda/
.- https://www.san-fernando.com.pe/
.- Julio Ikeda, el inmigrante japonés que revolucionó la industria avícola de Perú. https://www.amexcorporate.com.ar/multitaskers/el-camino-del-lider/julio-ikeda-el-inmigrante-japones-que-revoluciono-la-industria-avicola-de-peru
.- Los Ikeda. emprendedores. La Buena Familia. Octubre 2008. La página de Guillermo Tejadada Puetto. http://www.guillermotejadadapuetto.com/