Introducción
La actividad agropecuaria en el país ha tenido una gran importancia durante muchos años, como parte elemental de la economía y las actividades primarias en el campo mexicano. Sin embargo, la actividad avícola en México ha tenido un repunte muy importante, al grado de desplazar a la carne de cerdo y bovino, siendo la carne de pollo la de mayor consumo por la población (Quezada Tristán, 2001).
Poco cuidado se ha puesto en los productos secundarios, la gallinaza, desecho orgánico de las gallinas ha sido utilizado como fuente de suplemento alimenticio en la ganadería. Este está compuesto de heces fecales, plumas, restos de alimento, almacenando gran cantidad de proteína cruda (30% en base seca) (Quintero, 1999).
Se ha reportado que la gran cantidad de nutrientes en la gallinaza propicia un micro hábitat ideal para el establecimiento de fauna entomológica, como lo son insectos y ácaros (Quintero, 1999; 2009), los cuales han tenido una gran adaptabilidad encontrándose en diferentes estratos. En la gallinaza se puede localizar artrópodos de hábitos variados desde ácaros degradadores de materia orgánica como es el caso de Caloglyphus sp., así como también depredadores de otros organismos como es el caso de Macrocheles sp. Aunado a esto se pueden encontrar insectos que funcionan como reservorios de enfermedades y parásitos de las aves destinadas a la producción de huevo o carne, tal es el caso de la Mosca, Musca domestica (Salas y Larraín 2007) y del tenebriónido Alphitobius diaperinus el cual es vector de importantes enfermedades aviarias como los son Virus Marek, Gumboro, Coronavirus Pavo, Newcastle, Influenza Aviar, Salmonella typhimurium, Escherichia coli, Aspergillus spp. Staphylococcus sp., y Eimeria spp. (Salin, et. al., 2003; Kaufman et al., 2005; Agabou y Allou, 2010).
El objetivo de este trabajo es dar a conocer la fauna de artrópodos asociados a la gallinaza, lo cual puede darnos indicios de las condiciones de bioseguridad que prevalecen y poder detectar áreas de oportunidad para mejorar el manejo en las granjas productoras de huevo y pollo, así como reducir el impacto negativo en la producción avícola por los parásitos que afectan y pueden transmitir enfermedades a las aves de postura y engorda comerciales y favorecer la inocuidad alimentaria.
Materiales y Métodos
Se colecto gallinaza de aves de postura y de engorda en algunas granjas avícolas de la parte norte, centro y occidente del país. Las muestras fueron colectadas directamente de las granjas avícolas, en los depósitos de gallinaza de las naves con gallina de postura y de crianza de pollos de engorda en diferentes etapas de producción. Las muestras se trasladaron en bolsas de polietileno tipo Ziplock de 2 kg y preservadas en alcohol al 70%, mismas que fueron etiquetadas con los datos correspondientes. El material fue trasladado al Laboratorio de Entomología de la Universidad Autónoma de Querétaro para su posterior análisis.
En el laboratorio se procedió a la separación de la materia orgánica (excretas), los artrópodos asociados, tanto adultos como larvas, utilizando tamices de 20, 60, 100 y 200 mallas, cada medida de tamiz fue vertida una caja Petri para su revisión en el microscopio estereoscópico Carl Zeiss STEMI 2000®. Los artrópodos fueron separados y depositados en frascos viales de plástico de 25 mL con alcohol al 70% para su preservación. Posteriormente algunos ejemplares en el caso de los insectos (coleópteros y dípteros) fueron montados en alfileres entomológicos para su posterior identificación, los ácaros fueron montados en preparaciones semipermanentes de polivinil lactofenol. Las larvas de los insectos fueron procesadas de acuerdo con la metodología de Vergara-Pineda y Medina-Cepeda (2012), para finalmente hacer las laminillas y colocar los insectos inmaduros en la posición adecuada para observar las características morfológicas según los grupos de artrópodos.
La identificación taxonómica de los artrópodos recuperados a partir de la gallinaza se realizó por medio de claves de Skidmore (1985), Stehr (1991), Huckett y Vockeroth (1987), Smiley (1991), Lindquist et. al., (2009), Walter et. al., (2009) y Oconnor (2009).
Resultados y discusión
En la muestra recibida a inicios de Abril, proveniente del norte del país y que consistió de adultos de moscas, se identificó a Piophila casei (Linnaeus, 1758) (Diptera: Piophilidae). Por otro lado, la muestra de gallinaza colectada en una granja de postura, misma que fue recibida a mediados de Abril, procedente del occidente de México, tuvo los siguientes insectos: Musca domestica Linnaeus, 1758 (Diptera: Muscidae), Fannia sp. (Diptera: Fannidae); Tenebrio sp. (Coleoptera: Tenebrionidae), Trogoderma sp. (Coleoptera: Dermestidae) y los ácaros Macrocheles sp. (Mesostigmata: Macrochelidae) y Caloglyphus sp. (Astigmata: Acaridae). La proliferación de artrópodos en un sistema producción intensivo, como es el caso de las granjas productoras de huevo, sugiere que las excretas permanecen confinadas durante mucho tiempo, el ensamble de las especies, indica la presencia de forontes como la mosca común y especies foréticas como Macrocheles sp.; así como los consumidores primarios como los ácaros del orden Astigmata que se pueden alimentar de las excretas de aves o de los hongos que crecen a partir de las heces, dichas especies sirven de alimento a sus respectivos depredadores, ello indica que el nicho ecológico formado por las excretas permanece sin perturbaciones quizá durante varios meses.
Muestras de gallinaza recibidas a mediados de Mayo, provenientes del centro del país, tuvieron los siguientes insectos: Hydrotaea aenescens (Wiedemann, 1830) (Diptera: Muscidae), Alphitobius diaperinus (Panzer, 1797) (Coleoptera: Tenebrionidae), Dermestes ater (DeGeer, 1774) (Coleoptera: Dermestidae) y también el acaro Macrocheles sp. Una de las muestras tuvo predominante incidencia de H. aenenscens, esta especie requiere de cierta humedad en el sustrato, eso indica un manejo y mantenimiento deficiente en las condiciones al interior de la granja, tal como fugas de agua en los bebederos. Otra de las muestras tuvo alta incidencia de A. diaperinus, que si bien las condiciones de manejo fueron mejores, el problema con este insecto es que funciona como reservorio de varias enfermedades que pueden pasar de una parvada a otra si es que no se eliminan cuando se vacía la granja; enfermedades virales como Marek, Gumboro, Newcastle y Leucosis, bacterias como salmonelas y campilobacterias, además de varios parásitos intestinales y se le asocia la transmisión de coccidios (Cecco et al., 2005).
La muestra correspondiente a una granja de pollos de engorda que fue colectada el occidente de México, tuvo alta población de ácaros de la especies Caloglyphus berlesei (Michael 1903). La muestra de 300 gramos, que fue tamizada y homogeneizada en un vaso de precipitado de 100 mL, se contabilizaron nueve ácaros (de diferentes etapas de desarrollo) por cada diez microlitros de agua en promedio en diez lecturas. Lo anterior da una idea de la alta población de C. berlesei, la persona que proporcionó la muestra indicó que los trabajadores tenían algunas molestias al entrar a dar servicio a la granja, de manera que es probable que las aves también estuviesen estresadas por la fuerte actividad de los ácaros.
Una muestra más recibida a inicios de Diciembre y que fue únicamente de plumas en una granja de postura ligera procedente de los altos de Jalisco; se le encontró con una gran cantidad de ácaros Ornithonyssus bursa (Berlese) (Mesostigmata: Macronyssidae), conocido como ácaro tropical de las aves, este ácaro es una plaga seria de aves de corral y silvestres, pese a ser hematófago, no se le ha asociado como vector de enfermedades (Denmark y Cromroy, 2012). El hallazgo de grandes cantidades de O. bursa puede ser un indicador de fallas en el aislamiento de una parvada de pollos, ya que las aves silvestres pueden ser la fuente para estas infestaciones en las granjas (Cuadro. 1).
Cuadro. 1. Lista de insectos y ácaros encontrados en la gallinaza en granjas avícolas de huevo y pollo de engorda.
Conclusiones
Se encontraron varios grupos de artrópodos en muestras de gallinaza. La presencia de productores primarios, depredadores y otras especies presentes es un indicador de que las heces de las gallinas y/o pollos no son removidos durante mucho tiempo, ello sugiere que se deben hacer cambios en el manejo y disposición de gallinaza y pollinaza. La mejora en el manejo y remoción de estiércol (control cultural) aunado al uso racional de reguladores de crecimiento contra larvas de moscas (control químico), permitirá un control adecuado de los mismos y disminuir el uso de insecticidas. La eliminación de los reservorios de enfermedades como es el caso de los tenebriónidos encontrados puede ayudar a prevenir brotes de enfermedades de una parvada a otra. Evitar la entrada de aves silvestres a las naves en donde se encuentran los pollos contribuye a disminuir los casos de la presencia de ácaros hematófagos. Se continuaran haciendo estudios sobre los artrópodos asociados a el sistema de producción de huevo y pollo de engorda.