29 de septiembre de 2007
Estimado Marco Antonio:
La situación que tienes en tu explotación es la misma que manejamos quienes trabajamos en el trópico y no contamos con las instalaciones dotadas de ambiente controlado. Estás aplicando algunos de los métodos que normalmente se aplican ante situaciones graves de estrés, tanto para los propietarios y técnicos como para los pollos.
Someter los pollitos en sus primeros días de vida a choques térmicos altos bien sea por períodos prolongados o cortos con interrupciones (38 grados o mas) consideramos que no es una práctica sana porque ya algunos investigadores en manejo han logrado demostrar que algunos órganos internos, como por ejemplo los riñones, se ven seriamente afectados por los choques térmicos bien sea por frío o por calor extremos en la primera semana de vida y cuando el riñón se daña podemos encontrarnos en graves aprietos en la vida posterior de las aves. Agregar Vitamina C y ácido acetilsalicílico en el agua de bebida, mas electrolitos, consideramos que puede ayudar a mejorar ciertas condiciones fisiológicas de las aves, pero no es la panacea ni la garantía de que vamos a tener óptimos resultados de rendimientos zootécnicos al final del ciclo que son, al final, nuestra meta común a todos quienes estamos comprometidos con la producción de los pollos.
Así, hasta el infinito, encontramos una serie de prácticas de manejo características de ciertas regiones o de personas que las aplican bien por consejo directo de otros avicultores o técnicos o por propia iniciativa, siendo unas buenas, otras regulares y otras, por qué no decirlo, malas y contraproducentes para las aves. Generalmente hablamos de que hemos hecho algo y eso fue muy bueno y nos dió excelentes resultados, pero muchas veces no es una sola acción realizada la causante del buen resultado a veces un buen resultado es la sumatoria de varias actuaciones, o un cambio de temperatura o de ambiente, a presencia o ausencia de condiciones climáticas diferentes de acuerdo con la época del año, que coinciden con un procedimiento o tratamiento especial que estemos realizando.
Este problema del estrés calórico y sus letales influencias en las explotaciones avícolas nos ha confundido y desesperado a todos en nuestras explotaciones y quien diga que no, que arroje la primera piedra, como dice el dicho popular. Soluciones para este fenómeno, como lo manifiesta el Ingeniero Fernando Antonio Patiño, es una y muy fácil: Galpones, Ramadas o Galeras con ambiente controlado y con ello no solo controlamos el estrés calórico sino que podemos producir 35 kilos o más de carne por metro cuadrado.
Mas todo lo que hay en este mundo tiene su PERO. Esta solución que en realidad es sumamente viable y fácil y que, en honor a la verdad, es la verdadera solución para nuestro medio tropical, no es ni viable, ni fácil, ni posible para quienes no cuentan con los recursos económicos que permitan inversiones de esta naturaleza. Consideramos que nosotros como técnicos debemos es idear medios y métodos de procedimiento en manejo de las condiciones adversas bien sea para nuestras propias explotaciones o para las de nuestros clientes, explotaciones que en muchos casos son el soporte económico único de una gran cantidad de empresas medianas y pequeñas.
La razón o causa del problema planteado por Marco Antonio está claramente expuesta por él mismo: TEMPERATURA DE 36 grados o mas y HUMEDAD RELATIVA (HR) muy alta (90 por ciento). Estos dos factores unidos son una verdadera bomba para la salud y el rendimiento de los pollos de engorde, para reproductoras y ponedoras. ¿Qué puede hacernos explotar esta bomba?: FALTA DE AIREACIÓN. Basta leer muchos artículos escritos por investigadores en manejo para darnos cuenta que Tº ALTA + HR ALTA + VENTILACIÓN DEFICIENTE O NULA = SOFOCACIÓN, MUERTE SÚBITA, PROBLEMAS RESPIRATORIOS, MALOS O BAJOS RENDIMIENTOS Y, FINALMENTE, ALTAS MORTALIDADES.
Y las altas mortalidades son las que nos hacen poner el grito en el cielo, a iniciar tratamientos costos para tratar de controlar no solo el estrés calórico sino el problema respiratorio que se nos ha desarrollado. ¿Y por qué nos asustamos tanto?. Porque este fenómeno de grandes mortalidades se inicia después de los 30 días de edad y se acentúa en la quinta y sexta semanas de vida de los lotes, que es la época en que los costos son mayores. Y se nos agrava la situación cuando vemos, muchas veces, que los tratamientos que instauramos para combatir el problema respiratorio (generalmente Micoplasmosis simple o complicada, Colibacilosis, etc) no funcionan. ¿Y por qué no funcionan?.Porque muchas veces el problema primario no es bacteriano sino de manejo. ¿Manejo de qué? De los tres elementos que dentro de los galpones o ramadas tenemos: Temperatura, Humedad y Aireación, elementos que cuando se asocian bien (como lo hacen en el interior donde existe confinamiento de animales) producen un elemento altamente peligroso para el sistema respiratorio: EL AMONÍACO. Y está comprobado que el Amoníaco cuando, cuenta con condiciones favorables, inicia el daño de los epitelios del árbol respiratorio entre los 9 y 12 primeros días de vida de las aves.
Por eso es tan importante colocar ventiladores o abanicos dentro de los galpones o ramadas y, en algunas ocasiones, colocar microaspersores en regiones muy cálidas. Pero lo de los abanicos y los microaspersores no es caprichoso. Los primeros deben colocarse de tal manera que formen una corriente adecuada sobre las aves que pueda remover el gas que se forma por la presencia de las heces y la cama en general (Amoníaco) sino que, junto con la microaspersión, produzca en las aves una verdadera SENSACIÓN TÉRMICA que les haga agradable el ambiente y facilite la respiración.
Esto que estamos planteando no es la fórmula mágica para solucionar el problema pero consideramos que, junto con los consejos, comentarios y sugerencias de otros foristas, podamos ir avanzando y logrando mejores resultados frente a este fenómeno del estrés calórico.
Lo importante es procurar hacer las cosas lo mejor posible, estudiar los resultados, comparar parámetros en diferentes épocas y condiciones ambientales y ver cuál o cuáles acciones son mas aconsejables para nuestros procedimientos en lotes futuros.
Buena suerte.
