Sobre este tema yo deseo resaltar dos aspectos: el primero se refiere a que todo lo que el hombre hace en relación a la Post-Cosecha está función del clima; por ejemplo los norteamericanos desarrollan sistemas de aireación para regiones donde generalmente cae nieve. Entonces ¿Tiene sentido que se copien los diseños de los equipos estadounidenses cuando en Sudamérica esta posibilidad climática no existe en la regiones productivas?
Las normas de comercialización están en función del clima donde se generan los mismos, por ejemplo conservar en clima frío un maíz con 14,5% por mucho tiempo es factible pero no es posible en las condiciones que reinan en Latinoamérica.
Solo mencionamos estos dos aspectos, pero creemos que queda bien claro para el lector que no es prudente trasladar tecnología sin considerar el clima de la región, básicamente no tiene sentido. Incluso dentro de Sudamérica no tiene nada que ver el clima de Matto Grosso en Brasil, el sur de Argentina, con el de Colombia o México.
Los errores que se cometen cuando no se valora adecuadamente el clima donde se debe trabajar lleva a pérdida de mucho grano, tanto en calidad como en cantidad, se gasta en exceso energía y combustible, se corre riesgo en los acopios y en definitiva se tiene un grave costo para la eficiencia del sistema de Post-Cosecha.
Solo al pasar también quiero mencionar que hoy las empresas de primer nivel de Sudamérica están construyendo acopios con tecnología de 20 años atrás. Obviamente quien está invirtiendo no tiene mucho conocimiento sobre cómo evolucionarán los equipamientos de almacenamiento, secado, muestreo, monitoreo, automatización, etc. etc. Pero las empresas especializadas deberían ocuparse de llevar a la práctica que hoy se paga solamente con un buen manejo de granos.
Volviendo al tema del clima y el almacenamiento, recordemos que la agricultura se inició en aquellas regiones donde era más fácil la conservación, regiones extremadamente secas y/o frías. Ud. puede encontrar muchas clasificaciones de climas en función de su capacidad productiva pero no va a encontrar una sola que hable del clima en función de su capacidad para conservar granos. En Argentina, el Dr. Eduardo Sierra, ingeniero agrónomo especializado en climatología, junto con Consulgran desarrolló una clasificación climática para el almacenamiento considerando dos variables clásicas, la temperatura y la precipitación.
Veamos los siguientes cuadros:
Cuadro Nº 1: Áreas hídricas para la post-cosecha
Fuente: Eduardo Sierra
Cuadro Nº 2. Zonas Térmicas para Post-cosecha
Vemos cuales son los parámetros para considerar desde óptimo hasta malo o marginal en función de los datos climáticos presentados. En el próximo cuadro reunimos ambas variables. De manera que Ud. a partir del conocimiento del clima de su región pueda determinar donde se encuentra.
Cuadro Nº 3. Zonas Termo hídricas para Post-cosecha
Fuente: Eduardo Sierra
Fácilmente Uds. pueden determinar en qué zona o región climática se encuentran para la conservación. La gran mayoría de las regiones productivas latino-americanas son consideradas Marginales para el almacenaje.
Esta información es tremendamente importante. Afecta por ejemplo la concepción de las platas de silos, que deben priorizar pre-limpieza con aire, que deben diseñar aireaciones para enfriar en 60 horas y no como las actuales que con suerte alcanzan el objetivo después de 100 horas, que deben disponer de sistemas de secado veloces y eficientes (preferentemente todo calor), que deben disponer de equipamientos de monitoriamiento y muestreo, que normalmente no se instalan, y podríamos seguir enumerando.
Por otro lado es necesario que los organismos gubernamentales junto con los privados redefinan sobre todo los niveles de humedad de comercialización. Porque en la medida que no se trabaja sobre materia seca (se comercializa por materia húmeda) muchos prejuicios tiene el responsable del manejo de la mercadería que pierde kilos de agua que resultan difíciles de recuperar y con esto vende menos grano de los que recibe.
Para complicar más este panorama el clima está cambiando y no a favor de una mejor conservación. El Ing. E. Sierra comenta: “es probable que, durante los próximos años, el semestre de primavera-verano sea más cálido y húmedo debido a que los vientos del nordeste bajarán desde el Ecuador al Polo Sur, llevando aire caliente, para restablecer el equilibrio térmico del Planeta. Durante el semestre de otoño-invierno deberemos esperar que los vientos del sudoeste suban desde el Polo Sur hasta el ecuador, para hacer lo mismo”.
La importancia económica de la producción de granos es suficientemente elevada como para que nos pongamos en serio a desenvolver tecnología verdaderamente adaptada para las diferentes regiones productivas de Latinoamérica. El conocimiento que es la base ya está disponible, sin dudas este nuevo enfoque debe llevar a cambios que permitirán reducir drásticamente las perdidas y las mermas, así como los gastos.