Control de Gazapos

Es normal en mis recorridas por los criaderos escuchar a los productores de tener hembras de 10 pezones o partos de 11 y 12 gazapos y mi pregunta siempre es la misma: ¿ cuantos nacidos llegan al peso final para la venta? Y en el mejor de los casos la perdida es de un 36 %. De estas perdidas el mayor porcentaje se produce en la etapa de amamantamiento, 80 % y el resto en el destete. En la primera etapa la causa mayor de muertes se produce por diarreas, entre los 15 y 20 días del nacimiento, en el destete por mal manejo que provoca stress en los gazapos, mala alimentación, con perdida de peso, debilitamiento y diarreas. Con este panorama y durante un año hemos realizado pruebas para corregir este problema. Se tomo cuatro criaderos con planteles de 120, 180, 240 y 240 hembras en producción, de esto se prepara un lote de 10 hembras en el primero, 15 el siguiente, 20 en cada uno de los restantes, los servicios se realizaban los días lunes de cada semana en lotes de 6 semanas. Se realizaron modificaciones en esas jaulas como ser: levantar los comederos 15 cms del nivel del piso de las jaulas, para evitar que los gazapos comieran antes de los 20 días y se coloco una pastera a 3 cms del piso para el agregado de alfalfa, el bebedero automático a 15 cms. Los nidos eran pone y saca, de metal, a los que se le bajo la entrada a 3 cms y a la altura del piso, también se coloco una rejilla fina para el drenaje del orín y cama de cáscara de arroz de 2 cms. Cada lote de hembras se tomó al azar luego del servicio, el resto de las hembras servidas se tomaron como testigos, en dos criaderos fueron de monta natural y en los otros se utilizaba inseminación, en el resto de las labores cada criador siguió con su rutina normal. La tasa de nacimientos fue de 10,5 en el total de las hembras bajo control y las testigos, con diferencias sin importancia entre los cuatro criaderos, que no influían en el desarrollo de las pruebas. En todas las hembras se practico lactancia controlada, anteriormente solamente dos criaderos la realizaban, los nidos con cáscara de arroz eran más secos que los de viruta de madera o pasto seco y mantenían mejor la temperatura, ninguna hembra del control tuvo mastitis provocada por el roce de las mamas a la entrada de los nidos. A los 15 días, promedio, todos los gazapos salían del nido, los de control sin acceso a ningún tipo de alimento, en esta etapa no hubo perdidas en el control, pero en los testigos con cama de viruta y piso entero con pequeñas perforaciones las bajas eran del 10 %, es que la viruta de madera absorbe el orín y se enfría más rápido, especialmente en época invernal. A los 15 días se coloco en las pasteras de control, alfalfa triturada, para permitir a los gazapos iniciar una comida sólida, los testigos ya comían del mismo comedero de la madre, en la mayoría de los casos entraban a los mismos, donde había que sacarlos y orinaban la comida, en cuanto al peso de los gazapos no hubo grandes diferencias entre unos y otros. A partir del día 20 se coloco junto con la alfalfa pequeñas cantidades de alimento pelletizado, comenzando con 10 gramos por día y gazapo, luego se incrementaba en otros 10 gramos sucesivamente hasta llegar al día 30 con un consumo de 110 gramos diarios por gazapo y vinagre en el agua, a razón de 1 litro cada 100 para la bebida de gazapos y madre. El día 30 se realizo el traslado de las hembras de control y sus gazapos a las jaulas de engorde, en las testigos se siguió con la rutina de retirar solamente a los gazapos, el día 35 se retiraron las hembras de control, que volvieron a sus jaulas para una nueva parición. El peso de los gazapos dieron un promedio al destete de 680 – 730 gramos en los dos casos. La gran diferencia estuvo en el rendimiento por hembra y gazapo terminados. En las hembras testigos la mortandad estuvo en los mismos parámetros anteriores, cerca del 40 %, o sea por cada hembra se terminaron 6,3 gazapos, la mayoría de las muertes fueron ocasionadas por frío, diarreas, problemas respiratorios y strees post destete. En las hembras de control se terminaron 10 gazapos, con una perdida en todo el ciclo de prueba del 4,7 % gazapos por parición. Con esto vuelvo al principio ¿de qué vale tener 10 pezones o parir 11 gazapos, si a la venta llevo la mitad? ¿ Incluyo estas perdidas en mi contabilidad como no vendidos?. Desgraciadamente por problemas ajenos a los productores como ser la baja del precio de carne vivo pagado por los frigoríficos y el desmesurado aumento en el alimento balanceado, hizo que mas de 50 % de los productores desaparecieran y no poder seguir con estas pruebas en otros criaderos. Quizás este y otros trabajos de campo realizados sirvan a mejorar la rentabilidad de los sufridos productores, que ponen el capital y su trabajo pero no el precio.