Introducción
En los sistemas de cría extensiva de vacunos para carne del Nordeste argentino (NEA), el destete tradicionalmente se realiza entre los 6-8 meses, cuando el ternero alcanza pesos promedios de 140-170 kg. La prolongada lactación y la escasa disponibilidad de forraje perjudica la condición de los vientres, atrasando su retorno a la ciclicidad e interfiriendo con el objetivo productivo de destetar un ternero por vaca por año. El destete precoz, como alternativa para solucionar este punto crítico, se efectúa entre los 2-3 meses de edad del ternero y con un peso vivo promedio de no menos de 60 kg. Estos terneros generalmente no consiguen equiparar sus pesos con aquellos que continúan al pie de madre (destete tradicional), esta menor velocidad de crecimiento puede deberse al estrés por la separación de sus madres y al cambio de dieta (Weary et al., 2008). Algunos autores recomiendan implementar técnicas de destete para reducir el estrés, a saber: el uso de lata, la separación física por un alambrado (Siegford et al., 2007), el uso de una alimentación previa o diferenciada (creep feeding) y en algunos casos la combinación de estas técnicas (Newberry and Swanson, 2008). El objetivo de este trabajo fue evaluar la evolución del peso vivo de terneros destetados precozmente con dos alternativas de manejo.
Materiales y Métodos
El ensayo se realizó durante el mes de octubre de 2020 en la Estación Experimental Corrientes del INTA, con 90 terneros machos y hembras, de la raza Bradford, con peso y edad promedio de 75 Kg y 68 días respectivamente, en buen estado de salud y plan sanitario completo. El manejo del destete precoz se hizo bajo dos alternativas: Destete precoz tradicional (T1-n:45 rep:3 (n:15)): el día del destete, los terneros fueron trasladados por arreo desde el potrero hasta el corral de manejo. Luego del pesaje fueron separados de las madres, las cuales fueron trasladadas a otro potrero alejado, quedando estos solos en un corral contiguo al de destete. Destete precoz alternativo (T2- n:45 rep:3 (n:15)): Previo al deteste (20 días), los terneros fueron trasladados por arreo a un potrero cercano al corral de destete. Allí se acondicionó un sistema para creep feeding donde recibieron ración para destete hiperprecoz (PB: 23%). El día del destete, luego del pesaje, se trasladaron a un corral donde permanecieron próximos a las madres durante siete días, separados por un alambrado, permitiéndoles tener contacto visual, auditivo y táctil. Pasado este periodo las madres fueron trasladas a un potero alejado de los terneros. En ambos tratamientos, el primer día del destete los terneros recibieron solo agua. A partir del segundo día recibieron una ración constituida por iniciador bovino (PB: 19% al 1,2% de PV) y heno de alfalfa. Luego de 20 días se trasladaron a un piquete de pastura de Brachiaria brizantha cv. Marandu mas suplementación con pellet de trigo (PB: 16% al 1,2% PV). Los animales se pesaron al inicio y al final del ensayo (122 días). El diseño experimental fue un DCA con tres repeticiones. Para el peso de inicio, final y ganancia de peso total y diaria) se realizó comparación de medias a través del test de Tuckey, utilizando el paquete estadístico Infostat (no se tuvo en cuenta el efecto sexo ni su interacción con los tratamientos.
Resultados y Discusión
Con relación al peso vivo final se encontraron diferencias significativas (P< 0,05) a favor del T2 (Tabla 1) donde los terneros lograron una diferencia de 29 kg de PV más en promedio comparados con los T1. Estos resultados, en parte, se apoyan con los hallados previamente por Walker et al., (2007) que destacan la importancia de facilitar el aprendizaje al uso del comedero antes de su ingreso a corrales de engorde. Esta ganancia de peso extra por el creep feeding permitiría solventar los gastos efectuados para llevar adelante este manejo.
Tabla 1. Medias del Peso de inicio (PI), final (PF) y ganancias de peso total (GPT) y por día (GPD) de los tratamientos evaluados, ±error estándar (EE).
Conclusiones
La implementación de prácticas de manejo que mejoren la adaptación del ternero al desmadre, permitió aumentar la ganancia de peso.