9 de agosto de 2009
Segundo Acápite
Al hablar del Cruzamiento Dirigido, porque razón no comenzamos por aclarar lo que el centenar de ellas significa. La genética nos dice que un Fenotipo mas la influencia de Medio Ambiente o Entorno, nos da como resultado nos da como resultado las llamadas Razas.
Hace ya unos tres cuartos de siglo, se nos vino a la cabeza de que las razas criollas, como las que tiene Colombia, Segundo Acápite.
que hay varias pero una sola, comenzaron a notar que estas razas, en cada uno de los medio ambientes donde se generaron, habían ido decayendo y que era urgente buscar una raza resistente, una raza fuerte, una raza que subsistiera con la misma atención que le damos hoy en día al ganado. Teníamos que encontrar esa raza nueva, resistente, que coma 6 meses del año y los otros 6 para meditar sobre que hacer para que los siga alimentando, esa paja seca que decimos es un heno de calidad y hay que tratar de aprovecharlo.
El año de 1949 llegaron a la zona donde yo hacía ganadería, los primeros cientos de Reproductores de ese ganado resistente. Después de un año, nos sacamos la lotería, teníamos los mejores toretes del mundo, novillas que por su talla y vigor, iban a ser unas excelentes madres. La solución estaba dada.
No sabíamos de que se trataba, y el único error residía, en que no se había traído una raza, como se nos ha dado en llamar, a esa mezcla de subgéneros o como se les llame que son los bos taurus y bos indicus. Realmente el F1 que vimos era monumental y por ese entonces no sabíamos lo que después se ha ido descubriendo, que había un juego genético que se llama Heterosis o Vigor Híbrido. Desde ese entonces, nos montamos en el vigor hibrido, ese fenómeno genético que nos favorece una sola vez pues no sus rasgos genéticos no se transmiten y van disminuyendo conforme cruzamos esas curiosidades que hay ahora y son las llamadas sintéticas.
Seguimos con esa música hasta que una década después estos resistentes habían decaído tanto, que alrededor de los años 1960, una gran ganadería que hubo en mis pagos, seleccionó por lotes para vender en subasta. Se había asomado, lo que ahora se está asomando por otras algunas partes y creyeron conveniente deshacerse antes. El Administrador que era amigo me pidió colaboración para separar los lotes y el primer día que llegué al rancho de mi amigo, en son de broma, le pregunte que como había logrado seleccionar esas cabras blancas de orejas largas de la raza Anglo Nubian.
Recién ahora, en que los que quieren mejorar esa costumbre de criar ganado, nos dicen que entre los dos bos que andan por estos mundos, existen una serie de diferencias en los que a ganancia diaria de peso respecta, fertilidad distinta, docilidad igualmente distinta, calidad de carne, una inferior que otra.
Ha llegado el momento en que pensemos con la cabeza para mejorar el bolsillo, el bolsillo de todos y recomendemos de las cuales estamos seguros y que han sido verificados. Ya no podemos pensar en que nuestra carne por ejemplo son para la carnicería de mi pueblo. La ganadería es de marcha lenta y por eso debe ser segura. La carne deben venir al rancho a comprarla no ir nosotros a venderla. La deben buscar los consumidores por su calidad, por su ternura.
Voy a extenderme un poquito para contarles que eso lo he vivido. Mi abuelo fue un terrateniente poderoso. Tenía antes de 1930, grandes extensiones de tierra donde sostenía su ganadería que también era numerosa. Nunca, ni él ni sus descendientes, permitieron un solo indicus en sus predios. Siempre trabajaron con el Durham y cuando yo llegue, ya a trabajar, habían 2 reproductores Angus negro. Hasta el año 1953 seguía con la misma selección pero estadísticamente manejada con el sistema Kardex de tarjetas.
Para poder hacer esto, abandono los despoblados, o lo que es lo mismo donde llovía 4 meses al año, redujo el inventario de ganado mandándolo a una zona con mejores condiciones climáticas, mejor dicho de agua. En el predio donde yo trabaje había un gran río y de allí sacamos a ambas márgenes del río canales de riego para regar, pasto para pastoreo en lotes de 30 o más hectáreas. El riego encareció el pasto que al ser reemplazado por maíz, este se volvió mas rentable. Esto llevo al ganado por otros rumbos, a otros predios con mas agua de lluvia pero siempre tercos en no introducir la joroba y orejas largas.
Yo fui el que rompió la tradición, cuando las tierras fueron repartidas entre los familiares, a mi madre le tocó su parte. Dedicamos la parte que nos tocó al cultivo de algodón, pero como la ganadería la llevamos en la sangre, comenzamos con 40 novillas de criollo x Holstein y Santa Gertrudis. Esta raza como todos saben tiene 3/8 de Indicas i ni siquiera completo pues ese indiques estaba con algo de sangre Afrikánder que es taurus.