3 de diciembre de 2015
en diferentes casos de intoxicaciones por acumulaciòn de nitrògeno no proteico, realizando anàlisis bromatològicos, hemos encontrado dos factores importantes: el primero, obvio, en todos los casos, exceso de nitrògeno no proteico acumulado por la pastura, que sobrepasa la capacidad del animal para su conversiòn ruminal a nitrògeno proteico, generàndose el tìpico cuadro de intoxicaciòn por nitritios y nitratos, pero en un alto número, aproximadamente un 70% de los que he manejado, el problema no es solo la cantidad de nitrògeno, sino el desbalance de la aplicaciòn. La planta requiere un balance, gracias a dios con amplios rangos, de al menos 13 elementos minerales que muchos ganaderos pasan por alto en los programas de fertilizaciòn de sus praderas, y casi siempre nos concentramos en el que aparentemente nos da mayor beneficio, el nitrògeno, sin tener en cuenta que estas aplicaciones continuadas de un solo elemento, mas que nutrir las pasturas, y por ende al animal, terminan en un caos en el balance neto del sistema suelo-pasto-animal. A nivel suelo, pulverizamos todo el balance microbiològico que soporta el trabajo de nuestro sustrato, en cadena, nuestros pastos quedan imposibilitados para desarrollarse adecuadamente, , generando acumulaciones tòxicas, y perdiendo paulatinamente rendimiento de biomasa, y obviamente, el ganado da lo que come. Intoxicaciones, timpanismo, abortos, hipocalcemias, hipomagnesemias, y todas las hipos que podamos enumerar, todo esto ya ha sido descrito por otros foristas, como el Dr de La Rùa, o el Dr Fetcher. Los elementos que mas son afectados en balance para un adecuado plan de fertilizaciòn con excesos de nitrògeno, son magnesio, cobre, fòsforo, calcio, pero al final, todo el balance se derrumba. Insisto, si no se hace un anàlisis de suelo, serìa, mejor a largo plazo, como lo afirma el Dr de La Rùa no hacer ninguna aplicaciòn de fertilizantes.