INTRODUCCIÓN
La diferencia entre difusión y divulgación, las cuales muchas veces se han considerado como sinónimos, radica en que la primera se realiza entre un sector académico-científico en torno a un temática o área en específico donde se utiliza un lenguaje especializado; por su parte, la divulgación consiste en la traducción de dicho conocimiento generado a un lenguaje coloquial que pueda ser entendido por una amplia gama de la población (Bolet, 2015). Los procesos de transito de información y conocimiento están influenciados por el nivel de organización, la cultura y la participación familiar en las prácticas productivas aspectos que difieren del del marco académico, formal y estructurado (Serrano, 2013).
La semilla de maíz, considerada como una tecnología, es el insumo más importante en la producción pues determina el rendimiento y calidad del cultivo (Sierra et al., 2016); siendo su producción y distribución la transferencia de tecnología entre fitomejoradores y productores para lograr productividad y competividad (Luna et al., 2012); sin embargo, dicha adopción es heterogénea que se refleja en la producción (Donnet et al., 2012) donde los rendimientos discrepan por regiones en el país, por ejemplo en Sinaloa se registran rendimiento hasta de 12 t ha-1 mientras que en Veracruz (3.8 t ha -1) y en otras en zonas marginales sólo de 500 kg. (Del Ángel et al., 2018); así, el uso de semillas mejoradas ha permitido aumentar la producción en zonas de riego y con buenos temporales pero con efectos mínimos en temporales tradicionales (Fischer et al., 2014).
La teoría de la difusión, considerando a las semillas mejoradas como una innovación tecnológica, considera cinco etapas en las cuales la aceptación o no de esta puede darse en cualquier de ellas: conocimiento, interés, evaluación, prueba y adopción (Roger, 1962). Por otro lado, el enfoque en agroecosistemas considera que el productor como controlador de su sistema de producción decide las entradas (insumos, recursos y tecnología) para la producción con base en su contexto socioeconómico y cultural (Platas et al., 2017). La elección y adquisición de semillas de maíz está influenciada por aspectos técnicos (rendimiento, resistencia a plagas, enfermedades, sequía) pero además es de considerar la tipología de los productores, su cultura y economía (Ramírez et al., 2013).
En México, el cultivo de maíz es parte de la vida cotidiana en la mayoría de zonas rurales en la que dicha actividad no sólo está relacionada a la actividad productiva siendo a cuestiones culturales y religosas (CONABIO, 2009). México ocupa el cuarto lugar mundial como productor de maíz con más de 35 millones de toneladas producidas (2014-2015) mientras que Veracruz tiene el tercer lugar nacional con más de 500 mil ha con cerca del 6% % de la producción nacional siendo principalmente maíz blanco de temporal (80%) y riego (20%) (Sierra et al., 2016; Del Ángel et al., 2018) El municipio de Paso de Ovejas, Ver., tiene una superficie de 5,700 ha de maíz sembrado como monocultivo con rendimientos promedio de 3.2 a 3.8 t ha-1; el 98% de sus localidades son rurales; el 53% de su población se encuentra en situación de pobreza con rezago social además de un bajo nivel tecnológico (Sefiplan, 2016). La producción de maíz en el municipio se localiza en la zona de lomeríos (suelos de baja fertilidad, poco profundos y pedregosos) donde el estiaje se presenta durante seis-ochos meses (precipitación media anual menor a los 800 mm por año). El ejido es el tipo de tenencia más característico (Candelaria, 2011).
A nivel nacional, coexisten dos mercados en la producción de semillas, el formal y el informal; el primero, basado en patentes, normatividad y regulaciones, está conformado por empresas particulares, instituciones y centros de investigación con una distribución a través de redes formales; en el segundo, los productores utilizan sus reservorios de semillas de las cosechas anteriores que se comercializan en redes informales o se intercambian en ferias los materiales genéticos (Almekinders et al., 1994; Hermann et al., 2009; CODESPA; 2015). Los principales estados productores de semilla en el país son Guanajuato (66%), Jalisco (11%) y Querétaro (9%) siendo la principal empresa operaria Monsanto en los últimos años (Luna et al., 2012). Posterior a la de la revolución verde, las semillas mejoradas se convirtieron en un insumo estratégico de la producción (Castañeda et al., 2014) que ha contribuido a la pérdida de la biodiversidad genética de en aras de una agricultura comercial (FAO, 2009). En los años 50´s la industria semillera se enfocaba en empresas familiares, en los 70´s comenzó la expansión de empresas norteamericanas y europeas; en la década de 70-80´s se produjo una concentración y fusión de empresas por parte de la industria farmacéutica y de agroquímicos; para el año 2000, cinco transnacionales (Dupont/Pioneer, Monsanto, Syngenta, Doe y Aventis) dominaban cerca del 90% % del mercado mundial de semillas (Castañeda et al., 2014); la expansión neoliberal, por falta de mecanismos de regulación y políticas adecuadas para el desarrollo del sector restringió la participación de empresas nacionales al no poder competir en las mismas condiciones quedando así la mayor parte de la producción y distribución a cargo de transnacionales (Luna et al., 2012). De esta manera, en México, la producción de semillas certificada ha sido insuficiente para satisfacer la demanda nacional con una importación de al menos 300 mil t por año desde el 2008 siendo la superficie nacional sembrada de poco más de 6 millones de hectáreas (mha) de las cuales sólo el 44% corresponden a semillas mejoradas en temporal (Donnet et al., 2015). El mercado actual de semillas en el país es de 7.4 mha (82% en temporal y 18% en riego; en temporal se utilizan semillas N (55%) y a semillas mejoradas (45%) (Sierra et al., 2016).
El objetivo del presente estudio fue conocer los medios de comunicación por los cuales los productores tienen conocimiento y decide adquirir una semilla mejorada de maíz. Como hipótesis general se planteó que la comunicación interpersonal (productor a productor; familiares y amistades) es el principal medio de conocimiento para que el productor adquiera un tipo y marca de semilla mejorada de maíz.
MATERIALES Y MÉTODO
El estudio se realizó en los ejidos Bandera de Juárez (19º 12´05.38” LN y 96º25´26.21” LO); Paso Panal (19º 12' 21.15'' LN y 96º 29' 23.14'' LO); y Acazónica (19°12'47.92" LN y 96°35'21.67" LO). El primero cuenta con 773 habitantes; el segundo con 167 y el tercero con 1,078 habitantes (Sefiplan, 2016). Se obtuvo el listado de productores de cada ejido. El marco muestral fue integrado por 103 productores. Para determinar el tamaño de muestra se utilizó la ecuación planteada por Scheaffer et al. (2007). Se utilizó un muestreo no probabilístico por cuotas; el criterio de selección fue ser productor de maíz ubicado en los ejidos objeto de estudio. Se utilizó el método de la encuesta y la técnica de entrevista semiestructurada con sus variables de análisis (Cuadro 1).
Cuadro 1. Operacionalización de las variables medios de comunicación adquisición de semillas mejoradas en los ejidos de Bandera de Juárez, Paso Panal y Acazónica, Mpio. de Paso de Ovejas, Veracruz
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Con los resultados obtenidos se elaboró un modelo conceptual de agroecosistemas de la producción de maíz donde el productor, como controlador del sistema de producción, regula, determina y decide las actividades en el mismo; esto mediante información, conocimiento y uso de tecnologías que llegan a éste a través de un proceso de transferencia; el cual, está influenciado por factores político, social, económico y humano, que permite aceptar o rechazar las innovaciones tecnológicas que le lleguen del exterior (Figura 1).
![MEDIOS DE DIVULGACIÓN DE SEMILLA MEJORADA DE MAÍZ EN TRES EJIDOS DEL ESTADO DE VERACRUZ, MÉXICO - Image 1](/_next/image/?url=https%3A%2F%2Fimages.engormix.com%2FS_articles%2F54246_208.gif&w=1080&q=75)
La divulgación y transferencia de tecnología, en este caso semillas, según Larqué et al (2014) y Del Ángel et al., (2018) se da de manera vertical; es decir, de las instituciones generadoras de los materiales genéticos hacia los productores que pasa por las etapas de investigación, prueba, validación y transferencia; no obstante, dicho esquema vertical no ha logrado resultados favorables pues muchos de los encargados de ella, a pesar de contar con preparación académica no cuentan con la formación en cuanto a divulgación y extensión del conocimiento; de igual forma, las publicaciones impresas (libros, folletos o trípticos) así como días demostrativos, cursos cortos y platicas con productores no han logrado impactos favorables. En los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez del Mpio. de Paso de Ovejas, Veracruz los productores dedicados a la siembra de maíz son de edad madura (60±5 años) cerca del 50% con estudios promedio de primaria inconclusa (3er año de primaria) siendo el grado máximo de estudios a nivel preparatoria (7%). Se encontró que no hay diferencias estadísticas entre acceso a medios de comunicación y origen genético de la semilla para las variables edad (p=0.47) y escolaridad (0.07); por lo que estas dos variables no determinan la adquisición de semilla (Cuadro 2); dato que difiere lo reportado por Salas et al., (2013) quienes mencionan que la apropiación de tecnología está influenciada por la escolaridad y edad del productor.
Cuadro 2. Edad y escolaridad promedio de los productores con respecto al medio de comunicación y origen genético de la semillas de maíz en los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez en el Mpio de Paso de Ovejas, Veracruz.
![Cuadro 2. Edad y escolaridad promedio de los productores con respecto al medio de comunicación y origen genético de la semillas de maíz en los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez en el Mpio de Paso de Ovejas, Veracruz.](/_next/image/?url=https%3A%2F%2Fimages.engormix.com%2FS_articles%2F54246_426.gif&w=1080&q=75)
Los productores adquieren principalmente semillas híbridas (H), variedades de polinización libre (VPL) y en menor escala semillas nativas o criollas (N)(Figura 2). Al respecto, Donnet et al. (2015) mencionan que los productores de subsistencia para el autoconsumo utilizan semillas N mientras que los productores con un enfoque comercial utilizan semillas mejoradas (H y VPL); para que los productores adopten semillas mejoradas se requiere el conocimiento de sus características y potencial agronómico además que sea de fácil acceso su adquisición y precio adecuado a su disponibilidad de efectivo (Sierra et al., 2016; Del Ángel et al., 2018); por su parte, los productores que utilizan semillas N se enfocan a la selección de su propios materiales genéticos considerando principalmente el tamaño de mazorca, grosor delgado de olote y buena sanidad (Magdaleno et al., 2016); según Fernández y Leiva (2002) la estandarización de materiales genéticos y la tendencia de establecer agricultura comercial por encima de la de autoconsumo ha ocasionado la pérdida de la biodiversidad con la finalidad de obtener mayores rendimientos.
Figura 2. Empresas productoras de semillas mejoras de maíz preferidas por los productores de los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez del Municipio de Paso de Ovejas, Veracruz.
![Figura 2. Empresas productoras de semillas mejoras de maíz preferidas por los productores de los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez del Municipio de Paso de Ovejas, Veracruz.](/_next/image/?url=https%3A%2F%2Fimages.engormix.com%2FS_articles%2F54246_630.gif&w=1080&q=75)
En el área de estudio se encontró una heterogeneidad respecto a las marcas adquiridas de semilla mejorada; se identificó que, durante los últimos cinco años, el 45% de los entrevistados han utilizado dos marcas, 29% una marca, 16% utilizaron tres marcas y el resto (10%) ocuparon cuatro marcas; siendo el principal medio de comunicación el vecino-productor seguido del técnico agrícola. El egreso total (miles $) que realizan los productores por las semillas de maíz es dispersa; los productores que compraron entre una y cuatro marca de semillas pagaron en promedio $ 4, 776; los que adquirieron tres marcas pagaron, en promedio, $ 3, 385; y, los productores que adquirieron de dos marcas $ 7, 446. (26%). Al respecto, Espinosa et al. (2003) determinó que los costos de producción de las semillas H dobles son superiores 6% y hasta 23% en los H trilineales en comparación con semillas VPL y N. Las VPL proporcionan rendimientos importantes en buenos temporales además de la posibilidad de utilizar semilla para ciclos subsecuentes sin detrimento significativos en los rendimientos; en el caso de las semillas H, el maíz el grano cosechado no es factible de utilizar como simiente siendo esto uno de los atractivos comerciales de la producción de semillas H ya que los productores requieren cada ciclo adquirir semilla (Gárgano, 2014; Donnet et al., 2015; Espinosa et al., 2003). El precio de la semilla nacional oscila entre 700 y 1,800 pesos por saco de 20 kg (entre 60-65 mil semillas) mientras que las semillas de empresas transnacionales oscila entre 2,500-3,000. Los precios y los rendimientos entre tipos de semilla y zonas de producción contrastan; ya que en ambiente idóneos de riego los H alcanzan hasta 11-12 t ha-1 mientras que en temporal con tecnificación hasta 8 t ha-1 y en temporales con tecnología tradicional entre 4-6 t ha-1; datos que de cierta manera justificarían la adquisición de semillas a un precio elevado en relación al costo-beneficio; no obstante en el área de estudio se encontró que los rendimientos promedio son de 3.2-3.8 t ha-1 debido a las condiciones agroecológicas y al bajo nivel de tecnología utilizado; aspecto que no justificaría a la adquisición de semillas con alto valor comercial.
La divulgación y conocimiento de las semillas mejoradas por parte de las instituciones y centros de investigación está a cargo principalmente de académicos o prestadores de servicios profesionales a la institución quienes realizan actividades de extensionismo sin muchas veces contar con la capacitación para tal fin. Por su parte, en los Ayuntamientos municipales está a cargo de técnicos de las Direcciones de Fomento Agropecuario los cuales establecen relaciones comerciales con empresas locales (tiendas de agroquímicos y fertilizantes) que distribuyen principalmente marcas transnacionales y en menor escala empresa regionales o locales; estas a su vez utilizan al asesor agrícola en menor escala y área geográfica de influencia en comparación con las empresas transnacionales, las cuales cuentan con coordinadores estatales, regional así como técnicos agrícolas promotores en diferentes áreas locales; siendo la principal estrategia comercial la asesoría técnica como un factor importante en la adopción y uso comercial de los materiales mejorados (Castañeda et al., 2014; Sierra et al., 2016).
En el área de estudio se encontró que las marcas (Dekalb, 56% y Pionner 21 %) de empresas transnacionales y en menor escala de empresas nacionales de las marcas Terra y de centros de investigación como la VPL CP-569 o H-507 (Figura 3); dato que concuerda con lo reportado por Del Ángel (2016) quienes reportan que los productores utilizan mayormente semillas mejoradas (H y VPL) en comparación con las N. En el presente trabajo las empresas privadas de mayor presencia en el mercado son Monsanto (34%) y Pioneer (13%), y las instituciones de investigación pública (Colegio de Postgraduados e INIFAP) aportan el 9% y 28% respectivamente.
Una explicación de la diferencia en la presencia de mercado entre empresas transnacionales, nacionales y centros de investigación pudiese ser que en éstos últimos sus actividades sustantivas son la educación, investigación y vinculación con el medio rural; no siendo prioridad la producción de semillas con fines comerciales sino la investigación, validación y transferencia de tecnología a los productores dejando la actividad de producción comercial a microempresas de nivel regional o local siendo el objetivo principal de toda empresa la generación de riqueza; no obstante la diferencia en relación a la capacidad financiera, de infraestructura, logística y de mercado; así como la implementación de una política neoliberal inadecuada para el sector impide una competencia en igualdad de oportunidades con las empresas transnacionales.
Figura 3. Marcas de semillas mejoras de maíz preferidas por los productores de los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez del Municipio de Paso de Ovejas, Veracruz.
![Figura 3. Marcas de semillas mejoras de maíz preferidas por los productores de los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez del Municipio de Paso de Ovejas, Veracruz.](/_next/image/?url=https%3A%2F%2Fimages.engormix.com%2FS_articles%2F54246_378.gif&w=1080&q=75)
Los productores en el área de estudio se informan por cuatro medios diferentes acerca de las semillas mejoradas de maíz disponibles en el mercado. Los ejidatarios de Acazónica y Bandera de Juárez Acazónica obtienen información por dos y tres medios diferentes mientras que Paso Panal sólo por un medio; esto debido a la ubicación geográfica con relación a polos de desarrollo (p=0.068). Los medios de comunicación identificados son el productor-vecino, intermediario local ó técnico agrícola, televisión, folleto, parcelas demostrativas, H. Ayuntamiento, empresas productoras de semilla, visitas y/o pláticas con productores. A nivel general, en los tres ejidos, el principal medio de comunicación es el productor-vecino (45%) seguido del técnico agrícola de empresas semilleras (23%), información de casas comerciales de agroquímicos y fertilizantes (18%) y por el Ayuntamiento (14%). Considerando cada ejido por separado, se encontró que el primer medio es el técnico agrícola como intermediario local (40%) en los ejidos de Acazónica y Paso Panal; en el caso de Bandera de Juárez el principal medio de comunicación es el productor-vecino (33%); se encontró que por lo menos un medio de comunicación es diferente en los tres ejidos (p=0.0021) (Figura 4). A partir del tercer medio de información no se encontraron diferencias significativas entre los medios de comunicación (p=012).
Figura 4. Principales medios de comunicación respecto a semillas mejoradas de maíz en los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez en el Mpio. de Paso de Ovejas, Veracruz.
![Figura 4. Principales medios de comunicación respecto a semillas mejoradas de maíz en los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez en el Mpio. de Paso de Ovejas, Veracruz.](/_next/image/?url=https%3A%2F%2Fimages.engormix.com%2FS_articles%2F54246_424.gif&w=1080&q=75)
Los resultados encontrados en el presente estudio concuerdan con lo reportado por Larqué et al., (2014) y Del Ángel et al., (2018) respecto a que la transferencia tecnología y conocimiento es más eficaz a través de las relaciones interpersonales (productor a productor, familiares y amigos) posiblemente con por aspectos subjetivos como la confianza y la convivencia cotidiana ya que se encuentran en un contexto geográfico determinado caracterizado por un contexto agroecológico, socioeconómico y cultural. Así la transferencia de tecnología vertical descrita por Larqué et al., (2014) pudiese ser complementada con productores innovadores o líderes con influencia en su comunidad; al respeto Ramírez et al., (2013) mencionan que las empresas productoras además de considerar las características genéticas y agronómicas de las semillas mejoradas deben considerar los aspectos sociales y culturales de los productores ya que en el área de estudio debido a la baja escolaridad y al rezago socioeconómico los medios impresos no tienen impactos positivos dato que concuerda con Del Ángel et al., (2018) respecto a que los libros, folletos o trípticos en la información de semillas mejoradas no está documentado su eficacia. Cabe destacar la importancia del asesor agrícola como intermediario local en la realización de días demostrativos, cursos cortos y pláticas con productores como una estrategia de acercamiento y eslabón de enlace entre las empresas y la comunidad; ya que la adopción de tecnología por imitación es un proceso que requiere tiempo, si la innovación representa una mejoría en el que hacer es utilizada por otros miembros en una secuencia de observación-aprendizaje (Damián et al., 2007; Serrano, 2013; Krishnan y Patnam, 2013). Si bien los medios de comunicación contribuyen a reforzar la propaganda de cierta tecnología está terminará por ser adoptada cuando sea transmitida de productor a productor. La adopción de semillas mejoradas es un aspecto de importancia para contribuir a incrementar la productividad del agro mexicano; no obstante, hay que considerar la importancia de la conservación y utilización de los materiales genéticos locales.
CONCLUSIONES
En los ejidos de Acazónica, Paso Panal y Bandera de Juárez del municipio de Paso de Ovejas, Ver., se encontró que las relaciones interpersonales (productor-vecino, familiares y amistades) son el principal medio comunicación por el cual el productor adquiere una semilla mejorada de maíz seguido del técnico agrícola. En estos ejidos se utilizan principalmente semillas híbridas (H), seguido en variedades del polinización libre (VPL) y en menor escala criollas o nativas (N). El mercado está dominado por marcas de empresas transnacionales. El área de estudio presentó limitantes agrícolas, bajo nivel tecnológico y rezago socioeconómico; a pesar de ello, el uso y costo de híbridos transnacionales es mayor en comparación con las variedades de polinización libre y nativas.