Los pastizales naturales son "comunidades vegetales" en las que
distintas especies interactúan entre si y con el ambiente en que se
encuentran. Dicha interacción se refiere a competencias por espacio,
luz, agua y nutrientes entre las plantas que componen un pastizal, ya sean
de la misma especie o no.
Se presentan así distintos tipos de pastizales según sea la clase
de especies que lo componen, desde aquellos dominados por gramineas (pastizales
serranos) a aquellos en los que coexisten especies leñosas (árboles
y arbustos) con gramíneas y especies herbáceas, como en los bosques
y montes del norte y oeste de la provincia.
En general, toda el área cubierta por pastizales naturales del país,
se encuentran distintos grados de degradación con respecto a la situación
de equilibrio en que se encontraban antes de la colonización. Con la
llegada de la explotación forestal del hombre y la ganadería
doméstica, se rompe dicho equilibrio original y comienza este proceso
de degradación. Pero ¿qué significa esta degradación?.
Desde el punto de vista del pastizal natural como recurso forrajero, significa
en primera instancia una pérdida de productividad, motivada fundamentalmente
por una variación en los componentes de esa comunidad original. En este
proceso, se produjo una paulatina disminución de las especies más
palatables y de mayor valor forrajero, las que fueron reemplazadas por especies
de menor o ningún valor o especies invasoras. En algunos casos se ha
llegado a la desaparición total o extinción de valiosas forrajeras,
lo que constituye no solo una menos producción, sino la pérdida
de material genético imposible de recuperar o " erosión
genética".
Este proceso es la consecuencia de un hábito de pastoreo selectivo del
ganado, que para conformar su dieta, busca y consume prioritariamente aquellas
especies más apetecidas y de mayor calidad. Al haberse manejado estos
pastizales con altas cargas animales (mayores a la que son capaces de soportar)
y sin ningún tipo de descanso o de manejo, el pastoreo continuo sobre
estas especies, hizo que disminuyera su capacidad de competencia con las menos
preferidas. La gran frecuencia e intensidad de defoliación a la que
fueron sometida, terminó con la muerte de las mejores forrajeras y la
proliferación de especies indeseables. Este proceso puede continuar
hasta la pérdida de la cobertura vegetal del suelo, la erosión
y la productividad cero.
Sin embargo, no debe atribuirse la culpa de esta degradación de los
pastizales a los animales que lo pastorean, sino al hombre que toma las decisiones
sobre su utilización. Pero si las decisiones son acertadas, se puede
tender a revertir este proceso hacia una recuperación de los pastizales
naturales mediante normas de manejo basadas en el conocimiento del funcionamiento
de los mismos.
Conociendo el Pastizal; Condición y Especies Claves
En primer lugar, es necesario reconocer la "condición" en
que se encuentra cada potrero del pastizal. Esta se refiere al estado o grado
de degradación en que se encuentra para lo cual se debe tener en cuenta
una serie de indicadores como los siguientes:
- La proporción
de los distintos tipos de especies, clasificadas según sus características
forrajeras (preferencia animal, productividad y calidad ) como:
- preferidas
- intermedias
- indeseables
- El vigor de las mejores especies (tamaño de las
matas, calidad de brotes, etc.)
- La cantidad de plantas anuales o malezas
- La proporción
de suelo desnudo (sin cobertura vegetal).
La relación existente entre estos indicadores y la condición
del pastizal y su producción de forraje, se puede observar en el cuadro
Nº 1.
Cuadro N° 1
La producción forrajera (expresada como kgMS/ha) es la base para determinar
la carga animal que es capaz de soportar cada potrero de pastizal natural.
En segundo lugar, es necesario reconocer y definir algunas "especies claves",
en base a las cuales se va a centralizar l manejo del pastizal y permitirán
ir siguiendo la evolución de la condición. Se consideran especies
claves, aquellas que tienen buena preferencia animal, alta capacidad de producción
d forraje, buena calidad y son perennes. Son las que se pretende que proliferen
con el manejo adecuado; son las que hay que cuidar.
Los Elementos de Manejo
El objetivo de un manejo adecuado, es la planificación del uso de los
pastizales, tendientes a obtener una máxima producción animal,
económicamente sostenida, compatible con la conservación y/o
mejoramiento de los mismos.
Son varios los elementos con los que se cuenta para cumplir con este objetivo,
partiendo de la decisión de recuperar este recurso forrajero.
1. Adecuación de la carga animal
La misma se refiere a que la cantidad de animales debe estar de acuerdo a la
producción forrajera de cada potrero, respetando un grado de utilización.
Esto significa que se debe dejar un remanente para la supervivencia de las
especies claves y de importancia para la cobertura del suelo. Este grado
de uso, es la proporción de la materia seca de forraje acumulado que
puede ser pastoreada sin afectar a la planta y se considera que puede variar
entre un 50 y 60%.
La receptividad animal, guarda una estrecha relación con la condición
del pastizal.
Esta relación, para pastizales del norte de Córdoba, se puede
cuantificar de la siguiente manera a modo de ejemplo Cuadro Nº 2. Esto
es importante porque al ir mejorando la condición del pastizal, se puede
aumentar la carga y en consecuencia la producción de carne/ha (pasar
de regular a buena implica duplicarla) .
Cuadro N° 2
2. Descansos
Efectuar un descanso de un potrero de pastizal natural significa retirar totalmente
los animales del mismo por un período de tiempo determinado. Estos
son de gran importancia sobre todo para su recuperación y pueden tener
alguno de los siguientes objetivos:
·* Permitir la semillazón y diseminación de las especies
mas pastoreadas, con lo que se logra implementar su numero de planta por resiembra
natural
Esto se debe hacer en la época propicia que es verano-otoño para
las especies de verano y primavera para las especies de invierno.
* Permitir la germinación y desarrollo de las nuevas plantas a partir
de la producción de semillas anterior. Las épocas adecuadas son,
primavera para las especies de verano y otoño para las de invierno.
* Aumentar el vigor de las especies claves existentes, descansando el potrero
durante el período de crecimiento activo de las mismas.
La organización de los descansos y épocas de utilización
de los distintos potreros, darán origen a los "sistemas de pastoreo" que
se puedan implementar como otro elemento de manejo. La complementación
de los pastizales naturales con pasturas cultivadas u otro elemento de gran
importancia para su manejo. Estos temas se tratarán en la segunda parte.