Introducción
En la actualidad se dispone de información de la cantidad adecuada y forma de inclusión en las dietas de engorda de prácticamente todos los cereales de grano pequeño y lupinos blanco (Lupinusalbus L.) y australiano (Lupinusangustifolius L.)(Rojas y Catrileo, 2005), no así del uso de lupino amarillo (lupinusluteus L.)cuya variedad comercial registrada en el Centro de Genómica Nutricional Agroacuícola (CGNA) posee casi 39% más proteína cruda que el lupino australiano. En la alimentación de bovinos normalmente estos granos se emplean molidos o roleados con el objetivo de aumentar la disponibilidad del almidón y la proteína del grano y facilitar su mezcla. En lupino blanco y australiano y en avena (avena sativa L.) diversos estudios señalan que la molienda del grano no se traduce en ventajas productivas en los animales que lo consumen (Rojas et al., 2011).
El objetivo del presente estudio fue evaluar la respuesta productiva de la engorda invernal estabulada de novillos alimentados con dietas de engorda formuladas con granos de lupino amarillo.
Materiales y métodos
Se utilizaron 12 novillos Hereford x A. Angus de 23 meses de edad, nacidos en primavera y con 445+8 kg de peso vivo (PV) inicial promedio, para probar dos tratamientos correspondientes a las siguientes dietas de engorda: T1: paja de avena y granos enteros de avena y lupino australiano y T2: paja de avena y granos enteros de avena y lupino amarillo. La paja de avena correspondió al subproducto de la cosecha del grano que es expulsada por la máquina cosechadora de cereales, que fue enfardada en febrero del 2012.Ambas dietas se formularon con igual cantidad total de materia seca (MS), aproximadamente isoproteicos para 15% proteína cruda, isoenergéticos para 2,62 Mcal EM/kg MS e isofibrosa para 30,5% de fibra cruda. En forma previa se determinó la composición química de los alimentos. En ambas dietas los granos se entregaron enteros en su forma natural y de una sola vez en la mañana, entre las 9 y 10 am. La paja de avena se entregó en tres parcialidades diarias. Se consideró un período pre experimental de acostumbramiento de los animales a la estabulación y manejo de alimentación que se inició el 24 de julio de 2012 y un período experimental que se inició el 6 de agosto con una duración de 71 días. En el estudio se determinó el incremento diario individual de los animales, el consumo grupal, la conversión de alimentos y la presencia de granos enteros de lupino y avena en las heces fecales y su relación porcentual, base MS. En el frigorífico se determinó el rendimiento centesimal en caliente, el área del ojo del lomo y pH de las canales con 24 horas en cámara a 2ºC entre la novena y la décima costilla.
El diseño experimental utilizado fue completamente al azar con seis repeticiones por tratamiento. Los resultados se analizaron a través de un análisis de covarianza por peso inicial y las diferencias entre las medias corregidas fueron analizadas mediante una prueba T (5%)
Resultados y discusión
No se observaron diferencias estadísticas en la respuesta productiva de los novillos y tampoco en sus canales (Cuadro 1).El consumo promedio de MS correspondió en el T1 a 93,2 % y en el T2 a 95,5 % del señalado por la AFRC (1995) para novillos en crecimiento y engorda, y ganancias de peso diarias de 1kg animal-1, como los obtenidos en este estudio. El incremento de peso promedio alcanzado en ambos tratamientos es considerado bajo en consideración a lo alcanzado en engordas invernales estabuladas usando novillos (Rojas et al., 2011), que se puede explicar por el menor consumo de alimentos, base MS, en relación al peso de los animales y baja cantidad consumida de Mcal de EM en sí y en relación a la PC consumida (AFRC, 1995).
Cuadro 1. Respuesta productiva de novillos estabulados con dietas de engorda
Letras iguales en las filas señalan que no hay diferencias estadísticas significativas según T (P >0,05)
La presencia de granos enteros de avena en la heces fecales fue de 15,3 y 20,6% base MS para los tratamientos 1 y 2, respectivamente (P<0,05) y de grano entero de lupino de 0,8 y 3,8 % base MS en lupino australiano (T1) y amarillo (T2), respectivamente (P<0,05).La menor excreción fecal del grano de lupino australiano respecto del amarillo y estos de la avena podría tener causas asociadas al mayor tamaño de grano que contribuye a una mayor eficiencia de masticación al ingerir y en la rumia. Esto indica que se requiere más investigación para otras formas de uso del lupino amarillo, dado su alto contenido proteico y menor tamaño de grano para evitar la mayor pérdida a nivel de las heces fecales y mejorar su eficiencia de utilización por los animales.
Conclusiones
Bajo las condiciones del presente estudio la alimentación invernal de novillos estabulados con dietas de engorda formuladas con granos de lupino australiano o amarillo y paja de avena no afectó la respuesta productiva ni de las canales de los novillos.
Referencias
AFRC. 1995. Energy and protein requirements of ruminants. AFRC Technical Committee on Response to Nutrients.159 p. CAB International, Wallingford, Oxon, UK.
ROJAS, C., Y A. CATRILEO. 2005. Engorda a corral en la zona sur. p. 295-322. En A. Catrileo (ed). Producción y manejo de carne bovina en Chile. Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA, Temuco, Chile.
ROJAS, C., A. CATRILEO, Y T. GREZ. 2011. Evaluación productiva y económica del uso de grano entero de avena (Avena sativa L.) y lupino australiano (Lupinusangustifolius L.) en raciones de engorda invernal de vaquillas. Agro-Ciencia, Rev. Chil. Cs. Agropec. 27(1):41-48