Introducción
Las especies de brassicas forrajeras y su uso en alimentación animal, son largamente conocidas (Turk et al., 2009). En Chile se utilizan desde la década de los 60, especialmente como suplemento invernal. En Argentina se introdujeron recientemente en los sistemas agrícolas, principalmente como cultivos de cobertura. Los cultivares introducidos en los últimos 20 años en el mercado fueron desarrollados principalmente en Europa y Nueva Zelanda (Hepp y Teuber, 2021). A nivel regional se ha comenzado a probar su uso con ovinos (Villa et al., 2020), no obstante, existe escasa información productiva y de calidad sobre estas especies. El objetivo del presente trabajo fue realizar la evaluación productiva y nutricional de distintas especies de brassicas en el noroeste de Chubut, Argentina.
Materiales y Métodos
El ensayo se realizó en el Campo Agroforestal Experimental INTA Esquel (43º 07’ 40,1 S; 71º 33’ 32,6 O). La preparación del suelo consistió en dos laboreos con rastra de discos y grada rotativa. La siembra se realizó el 16-11- 2020 con sembradora manual hortícola a chorillo, marca “Planet”. Se utilizaron 4 grupos de brassicas con diferentes densidades de siembra y plantas.m-2 a lograr (Tabla 1).
La siembra fue en líneas cada 20 cm en una superficie de 5 m2 en un DBCA con 4 repeticiones. Se fertilizó a la siembra con fosfato diamónico (150 kgha-1 ), y al estado de 8 hojas con urea (200 kgha-1). Se desmalezó manualmente en dos oportunidades. Se regó por goteo diariamente desde la siembra hasta su corte sin limitaciones hídricas. Al corte (15- 04-21), en cada parcela se estimó el número de plantas y se cosechó 1 m lineal que se secó y pesó para estimar la biomasa total que se comparó con ANOVA y test LSD. Sólo en el cv. Rival se separaron raíz y hoja (la única que posee raíz comestible expuesta sobre el suelo). La calidad nutricional se determinó en una muestra compuesta por cada variedad.
Resultados y Discusión
El número de plantas por superficie logrado fue superior a lo esperado en Titan, Regal y Hunter, debido a problemas en la dosificación de semilla, provocando mayor competencia intraespecífica. La densidad fue similar a la densidad recomendada en las restantes (Hepp y Teuber, 2021). La producción de biomasa fue diferente (P< 0,05) entre materiales (Tabla 1). La mayor producción se logró con Rival compuesta por un 77% de raíz y 23% de hoja. La segunda variedad fue Regal y posteriormente se ubicaron sin diferencias entre ellas, Titan, Goliat, Winfred y Hunter con rendimientos que oscilaron entre 7000 y 8000 KgMSha-1. Al final del ciclo se observaron pulgones en la mayoría de las parcelas, aunque no se realizó control químico. Por otro lado, la digestibilidad y la energía fueron elevadas en todas las variedades (Tabla 2).
Tabla 1. Variedades ensayadas por especie, densidad de siembra utilizada (kg.ha-1), número de plantas esperadas, número de plantas logradas por m2 , porcentaje de logro y Producción total de materia seca (kg MSha-1 ).
Tabla 2. Caracterización nutricional de las variedades de las Brassicas ensayadas
Conclusiones
Los resultados obtenidos en esta experiencia, demuestran que la producción de forraje, así como la calidad lograda en otoño con las diferentes brassicas fue muy buena, destacándose el cv “Rival”. Es importante señalar que la limitación más importante de estos cultivos es la falta de oferta de semilla, por lo que su desarrollo dependerá de la disponibilidad de semillas en Argentina.