Así como en el capítulo pasado tocamos el tema de las “grasas by-pass”, ahora nos referiremos a las “proteínas by-pass”. En general, a todas las proteínas contenidas en los insumos para alimentación animal se les reconoce un cierto porcentaje de efecto “by – pass”, que al igual que en el caso de las grasas, la gracia consiste en que un menor porcentaje sea degradable o soluble en rumen a la vez que un mayor gran porcentaje de estas proteínas sea aprovechable (digeridas y absorbidas) directamente en intestino, y entonces, la proteína en estos insumos, refiriéndonos a la composición (perfil) de aminoácidos, resulta de “mayor valor” que en la de una proteína altamente degradable.
Las proteínas altamente degradables en rumen son descompuestas allí en amonio (nitrógeno), sea cual fuere su valor ; el amonio es la materia prima para las nuevas proteínas bacterianas de la flora ruminal, las cuales al pasar al intestino constituyen las proteínas by-pass “naturales” finalmente digeridas y absorbidas por el rumiante.
Consideraciones generales :
1) De lo último anterior se desprende que proteínas de baja calidad y bajo by-pass son factibles de ser “mejoradas” por la flora ruminal, así como proteínas de gran calidad y bajo by-pass resultan “desmejoradas” por la misma flora (típicamente en lo que se refiere a aportes de lisina, metionina y otros aminoácidos azufrados).
2) Aparte de la fuente misma de proteínas, la degradabilidad en rumen o su contraparte, el by-pass, varía mucho por factores tales como tamaño de partícula, tratamiento térmico industrial, contenido y variedad de grasa, etc...incorpore estas consideraciones en la selección de las materias primas.
3) Los animales y la condición en que se encuentran, que mejor responden a las proteínas de alto by-pass son:
-rumiantes estresados (animales transportados o arreados largas distancias... largas horas de ingesta insuficiente, etc)
-rumiantes malnutridos (delgados , sometidos a raciones desbalanceadas, restringidas, cambios imprevistos de ración, de pastoreo a feedlots, etc.)
-animales jóvenes en fase de rápido crecimiento y/ o de alta exigencias productivas (confinados para producción de carne lechal (baby beef), etapas de recría en feedlots, etc.)
-vacas o cabras de alta producción láctea, que deben soportar bien un alto “drenaje proteico”)
- en general, cualquier rumiante cuyos requerimientos de aminoácidos se encuentren forzosamente insatisfechos por oferta limitada o que se encuentren sometidos a violentos cambios de hábitat y/o alimentación.
4) La velocidad de pasaje o tiempo de permanencia en rumen, que tiene el alimento ingerido, también afecta el by-pass de proteínas... cuanto menos permanecen las proteínas en rumen, más alto el by-pass resultante .
5) Con la administración de proteínas de alto by-pass es posible reducir costos... con la adición de proteínas by-pass, el aporte total de proteínas en la ración puede reducirse o bien podemos optar por sustituir una porción de la proteína verdadera por nitrógeno no proteico (urea, amonio, etc.)... sin embargo, el objetivo central de la utilización de proteínas by-pass es facilitar la estimación (reducir el riesgo de error) del óptimo balance entre energía y nitrógeno frente a crecientes exigencias nutricionales, de manera que nada se pierda...que no sobre energía ni se pierda nitrógeno por las fecas .
6) Es bien sabido que la flora ruminal, como todo organismo vivo, requiere de energía para subsistir y transformar el nitrógeno en estructurar proteínas; por lo tanto un rumiante que consume una dieta de alta energía puede albergar más cantidad de bacterias para aprovechar el nitrógeno no proteico, que un rumiante limitado a ingerir voluminosos...Un animal a pastoreo directo entonces tiene menos “habilidad inmediata” para tolerar y aprovechar impactantes cantidades de nitrógeno no proteico y/o carbohidratos fácilmente fermentables. Dicho de otra forma, si las raciones se “disparan” en cantidad de proteínas degradables y azúcares fácilmente fermentables, las bacterias se verán excedidas en su capacidad para aprovechar tales nutrientes y se producirán además disturbios y patologías metabólicas (acidosis ruminal, laminitis, infertilidad, etc.) . Entonces las proteínas y grasas by-pass son indispensables para enfrentar las contingencias y/o las “situaciones críticas nutricionales”, amortiguando los cambios.