El valor saludable de la grasa butirosa (GB) ha sido cuestionado por su exceso en ácidos grasos (AG) saturados (AGS). La suplementación con aceites ricos en AG poliinsaturados (AGPI) permite modular la composición en AG de la GB en un sentido saludable (Antonacci y Gagliostro, 2020), pero su implementación puede resultar difícil. Los AGPI no protegidos podrían a su vez afectar la producción y composición química de la leche. El objetivo fue conocer el efecto del aporte de cantidades equivalentes de AGPI contenidos en una mezcla de aceites líquidos o solidificados sobre la producción y composición química de la leche. Los efectos sobre el perfil de AG y el metaboloma de la leche son informados en dos resúmenes de este mismo volumen.
Materiales y Métodos
Se utilizaron 18 vacas multíparas de raza Holando Argentino con 46 ± 12 días en lactancia asignadas en forma equilibrada según peso vivo (PV), promedio de producción y composición de la leche a tres tratamientos (n=6): Control (sin lípidos), AS-AP (aporte de una mezcla (p/p) de aceite de soja (87,5%) y de pescado (12,5%) y un suplemento lipídico Oralac® (OR, 90% de materia seca, 68,6% lípidos y 14% cenizas) con igual proporción de aceites que AS-AP. La oferta de pastura fue de 27 kg MS vaca-1 día-1 y el aporte de concentrado comercial fue de 3,5 kg vaca-1 día-1 durante cada turno de ordeño. Al momento del ordeño, los lípidos fueron manualmente mezclados con el concentrado en el comedero al 4% del consumo total estimado (20 kg) de MS (Antonacci y Gagliostro, 2020) durante 21 días consecutivos. Previo al inicio de la suplementación con lípidos y durante la última semana de ensayo, la producción y composición de la leche fue medida en forma individual en días no consecutivos dos veces a la semana. Los resultados fueron analizados mediante un diseño completamente aleatorizado (DCA) con los tratamientos como efectos fijos; mientras que vaca y error residual fueron considerados efectos aleatorios. Por otro lado, se evaluó si existían diferencias significativas en la producción de leche/proteína/grasa entre el tiempo final (F) (día 21) e inicial (I) (día 0) mediante prueba T-Student pareada. Durante la última semana se obtuvieron además muestras individuales de leche para composición en AG y metaboloma (resultados no informados en este resumen).
Resultados y Discusión
El consumo (800 g vaca-1 día-1) de aceites (AS-AP) mezclados con el concentrado fue total (sin rechazos) y rápida (menor a 10 min) sin ralentizar el ordeño. En cambio, el consumo del concentrado conteniendo el OR resultó más lento y variable entre vacas con rechazo del orden de 7-27% aún ante el agregado de saborizante. La suplementación con lípidos no protegidos no afectó ni la producción de leche ni los contenidos de sus componentes principales (Tabla 1). Tampoco se detectaron diferencias entre F menos I dentro de cada tratamiento para producción de leche, producción de leche corregida por grasa 4% (LGC4%) y tenor graso (P< 0,22). El bajo número de animales utilizado y la corta duración del período de suplementación (3 semanas) podrían explicar en parte el resultado ya que se ha postulado un tiempo de retardo de al menos 5 semanas previo a la manifestación de respuesta en producción de leche ante el aporte de lípidos suplementarios. El suministro de lípidos insaturados a vacas en alimentación pastoril suele reducir en promedio el contenido de grasa butirosa (GB) en un 8%, efecto no observado en el presente ensayo. Utilizando el test T (F-I) dentro de tratamiento, el tenor proteico permaneció inalterado en AS-AP, aumentando (P< 0,02) en OR (+2,4 g/kg) con una ligera disminución (0,7g/kg) en Control (P< 0,04). La suplementación con lípidos presenta un efecto negativo sobre la concentración de proteína en la leche que resulta más consistente ante el uso de grasas saturadas (-0,18 g/100 g) y sales cálcicas de AG (-0,12 g/100g) respecto a los aceites vegetales.
Tabla 1. Producción y composición de leche de vacas suplementadas con una mezcla de aceites de soja y pescado bajo forma líquida (aceites) o solidificada (Oralac®).
Conclusiones
Tomados en conjunto, los resultados permiten concluir que el suministro de AGPI contenidos en aceites poliinsaturados no protegidos al 4% del consumo total de MS no presentó efectos negativos sobre la producción o composición de la leche.
Antonacci LE et al. (2020). J. of Zoological Research, 01: 8-22.