Introducción
El agua es un nutriente esencial para el ganado lechero, pero en especial para las becerras (NRC, 2001; Domínguez et al., 2007). El agua ayuda en el transporte de nutrientes dentro y fuera de las células, la digestión de los nutrientes, eliminación de productos de desecho, ayuda a la regulación de la temperatura corporal y a mantener el equilibrio de los electrolitos en la sangre. Es crucial para estimular el desarrollo del rumen, ya que el agua que se acumula en el rumen sirve como medio para que los microorganismos que van poblándolo se establezcan y puedan iniciar con la degradación de los nutrientes del concentrado. Está demostrado que el desarrollo del rumen es más lento cuando las becerras no tienen acceso al agua. Cuando las becerras tienen libre acceso al agua, tienen mejores ganancias de peso, inician el consumo de concentrado antes y consumen mucho más concentrado en comparación con becerras que sólo tienen acceso a su leche o sustituto de leche (Senevirathne et al., 2018).
Sin embargo, la calidad del agua es crucial ya que puede afectar su palatabilidad, así como causar problemas de salud. Y en especial en las becerras, ya que estas son más selectivas y al mismo tiempo más vulnerables a ciertos elementos que se pueden encontrar en el agua (Kertz et al., 1984; Senevirathne et al., 2021).
Al respecto, en la Región Lagunera, Domínguez et al. (2007) observaron que la aplicación de un tratamiento de ósmosis inversa al agua para la alimentación de becerras con el que se redujo la cantidad de sólidos totales disueltos (STD), bicarbonatos, cloruros, sulfatos y nitratos, así como conteos de coliformes totales y fecales, incrementó en un 13% el consumo de agua, 35% el consumo de concentrado y 30% la ganancia diaria de peso. En otro estudio, González-Avalos et al. (2019) aplicaron 5 ppm de cloro al agua para la alimentación de becerras del nacimiento al destete (45 días) y observaron que el consumo de agua fue 105% mayor al de las becerras testigo.
Sin embargo, a pesar de que existe evidencia de que mejorar el agua tiene un impacto positivo en el consumo de agua, así como en el desempeño de las becerras, en la Región Lagunera hay poca información sobre calidad del agua que se usa para la alimentación de becerras. Lo anterior, posiblemente a que no existe una cultura para la medición de la calidad del agua o a que el costo de los análisis se considere elevado. Sin embargo, la CONAGUA mediante la Red Nacional de Medición de la Calidad del Agua (RENAMECA) cuenta con una base de datos de calidad del agua de 5,000 sitios en todo el país del 2012 al 2021, de los cuales 278 corresponden a pozos de la Región Lagunera.
Objetivos
Empleando los datos de la RENAMECA, presentar los parámetros de calidad del agua relacionados con la calidad del agua necesaria para las becerras por municipio de la Región Lagunera, con el fin de que dicha información sirva de referencia para productores, asesores e investigadores interesados en el tema.
Material y métodos
Para el presente trabajo se empleó la base de datos de indicadores de calidad de agua (2012 al 2021) de la RENAMECA de agua subterránea (disponible en: https://app.conagua.gob.mx/ica/Contenido?n1=4&n2=3). Para lo anterior, se consideraron las clasificaciones de calidad para sólidos disueltos totales- salinización y riego agrícola, nitrógeno de nitratos, dureza y coliformes fecales, los datos se organizaron por municipio y clasificaciones de la RENAMECA y fueron comparados con los parámetros de calidad de agua requerida para becerras de la literatura disponible.
Resultados
En el Cuadro 1, se muestra la clasificación de calidad para sólidos disueltos totalessalinización y riego agrícola, nitrógeno de nitratos, dureza y coliformes fecales de la RENAMECA y los parámetros de calidad de agua requerida para becerras (NRC, 2001; Beede, 2005; Higgins et al., 2008; Schroeder, 2015; Senevirathne et al., 2018; Senevirathne et al., 2021; Swistock, 2021).
Cuadro 1. Clasificación de calidad para sólidos disueltos totales, nitratos, dureza y coliformes fecales de la RENAMECA y los parámetros de calidad de agua requerida para becerras.
De los registros de 278 pozos, 77 (27.7%) correspondieron a los municipios de la Región Lagunera de Coahuila: Francisco I. Madero, Matamoros, San Pedro, Torreón y Viesca. Los 201 pozos (72.3%) restantes pertenecieron a los municipios de la Región Lagunera de Durango: General Simón Bolívar, Gómez Palacio, Lerdo, Mapimí, Nazas, Rodeo, San Juan de Guadalupe, San Luis del Cordero, San Pedro del Gallo, y Tlahualilo (Gráfica 1). De acuerdo con los parámetros de calidad del agua para becerras, sólo el 11% de los pozos de la base de datos de la RENAMECA correspondientes a la Región Lagunera cuentan con calidades que no superan los límites máximos tolerables de los parámetros de sólidos disueltos totales, conteo de coliformes totales, nitratos y dureza del agua para ser ofrecida a las becerras. En la Grafica 2, se muestra el porcentaje de pozos por municipio que no superan los límites máximos tolerables de calidad del agua para becerras. Siendo el municipio de Matamoros el que cuenta con la mayor cantidad de pozos en esta clasificación, seguido de Gómez Palacio, Torreón y Francisco y Madero, en los municipios restantes menos del 10% de sus pozos cumplen con la calidad requerida.
Grafica 1. Distribución porcentual por municipio de pozos parte de la RENAMECA correspondientes a la Región Lagunera.
Gráfica 2. Porcentaje de pozos en cada municipio de la Región Lagunera que presentaron calidades que no superan los límites máximos tolerables de sólidos disueltos totales, conteo de coliformes totales, nitratos y dureza.
Finalmente, sólo el 26.2% de los pozos de este estudio cumplieron con la calidad requerida en el parámetro de coliformes totales.
Discusión
Los parámetros de calidad que se emplearon en el presente estudio fueron elegidos debido a que son los que mayor información brindan sobre calidad del agua para becerras y su análisis puede ayudar a encontrar áreas de oportunidad para la mejora del desempeño y salud de las becerras. De acuerdo con los resultados del presente estudio, cerca del 90% de los pozos de la Región requieren de algún tratamiento para el agua para cumplir con la calidad necesaria para las becerras, como la ósmosis inversa. De acuerdo con Domínguez et al. (2007) el tratamiento de agua de pozo con osmosis inversa redujo en un 93% el contenido de sólidos disueltos totales, 98.6% el conteo de coliformes fecales, y 66% la concentración de nitratos.
De acuerdo con los resultados del presente estudio sólo una cuarta parte de los pozos cuenta la con calidad microbiológica requerida para las becerras. La presencia en el agua de coliformes fecales como E. coli y Salmonella, puede favorecer la presentación de diarreas y deshidratación, en algunos casos severa. En los casos de contaminación con Salmonella también pueden observarse casos de neumonía y septicemia. Por lo que es posible que acciones encaminadas a la aplicación de desinfectantes como el cloro favorezcan la salud y el desempeño de las becerras, tal y como observaron González-Avalos et al. (2019).
Conclusión
La calidad del agua del 90% de los pozos que evalúa la RENAMECA en la Región Lagunera, no es adecuada para ser ofrecida a las becerras, por lo que se sugiere se realice al menos en una ocasión el análisis de calidad del agua en las crianzas para poder tomar acciones de mejora ya sea dirigidas a disminuir la contaminación bacteriana o de sólidos disueltos totales y nitratos o mejorar la dureza del agua.