INTRODUCCIÓN
El proceso de crianza de becerras y vaquillas de reemplazo, es uno de los más importantes para la empresa lechera, ya que su objetivo principal es obtener el mayor número de vaquillas sanas, que paran aproximadamente entre 22 y 24 meses de edad, que sirvan para el reemplazo de animales y para crecimiento del hato en producción, cuando sea el caso (1). Adicionalmente, representa entre el segundo y tercer lugar de los costos de producción de los establos, aunado a que los productores no ven el retorno de su inversión hasta que las vaquillas comienzan a producir leche (2,3). Durante la crianza, las becerras enfrentan una serie de desafíos: como adquirir una cantidad adecuada de calostro de alta calidad, evitar enfermedades infecciosas, y el impacto de otros estresores como son el descorne y el destete. Por ejemplo, la falla en la transferencia de inmunidad pasiva, no sólo resulta en un incremento en la mortalidad durante la vida temprana de una becerra (4), sino que tiene efectos a largo plazo. La falla en la transferencia de inmunidad pasiva, se ha relacionado con una menor eficiencia y tasa de crecimiento (5). Así mismo, el patrón de crecimiento de la becerra influye directamente sobre la edad al primer servicio, edad y peso al primer parto, así como sobre la lactación y reproducción de éstas cuando sean vacas (6). El sistema de procesos es una herramienta adaptada para su uso en establos lecheros, el cual está basado en metodología para la administración de negocios conocida por sus siglas en inglés como BPM o bussiness process management; dicho sistema permite organizar conocimientos, tecnologías y prácticas para la producción, así como, el uso de indicadores de referencia que facilita la toma de decisiones y la corrección de problemas. Así mismo, el sistema de procesos organiza las actividades en procesos y subprocesos, identifica actores o responsables de actividad, y utiliza indicadores por proceso y subproceso (1,7).
Objetivo
Identificar áreas de mejora en el proceso de crianza de becerras y vaquillas de reemplazo en un establo de la Región Lagunera.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se colectaron datos en un establo del sistema intensivo de producción de leche de la Región Lagunera. Se realizó una encuesta de procesos para la crianza de becerras y vaquillas de reemplazo para determinar el número y tipo de mejoras y/o re-ingenierías de proceso a realizar. Para la evaluación de las actividades de cada subproceso se calcularon los indicadores de subproceso refractometría (g/dL), ganancia diaria de peso durante la lactancia (GDPL) y ganancia diaria de peso durante el crecimiento (GDPC), los datos para calcular los indicadores fueron obtenidos a partir de los registros computarizados de 389 animales, y en el caso de GDPc se realizó un muestreo de 115 vaquillas entre 106 y 198 días de edad para obtener el peso estimado usando una cinta para pesar ganado. La GDPc fue calculada usando una ecuación de regresión, donde la pendiente de la recta se consideró como la ganancia diaria estimada (8). Adicionalmente, se obtuvo información sobre la cantidad e ingredientes que componían las dietas para vaquillas, así como la cantidad ofrecida por animal, y se colectaron muestras de las raciones ofrecidas y sus ingredientes para evaluar su calidad nutricional. Las muestras de las raciones y de los ingredientes individuales se secaron en una estufa de aire forzado durante 48 h a 60°C para la materia seca (MS). Posteriormente, las muestras se molieron en un molino Willey a un tamaño de partícula de 1 mm y se analizaron para contenido de proteína cruda (PC), fibra detergente neutro (FDN), fibra detergente ácido (FDA) y carbohidratos no fibrosos (CNF) mediante espectroscopía del infrarrojo cercano o NIR. Los indicadores fueron comparados con valores de referencia para identificar los factores críticos e identificar subprocesos susceptibles a mejorar. El análisis de la información consistió en estadística descriptiva (media, desviación estándar, frecuencias) y análisis de regresión lineal simple (9,10).
RESULTADOS
El proceso de crianza de becerras y vaquillas de reemplazo en el establo del estudio fue dividido en 3 subprocesos, y finaliza cuando las vaquillas cumplen 7 meses y son llevadas a otro sitio para terminar su crecimiento. A continuación, se describe cada uno de sus subprocesos.
Subproceso de nacimiento. Inicia con la llegada de la becerra a cunero y termina cuando la becerra se coloca en una jaula individual. El producto esperado es una cría sana que recibió 2 tomas de calostro y un consumo total de calostro de al menos 4 litros de calidad mayor a 60 g/L. Considera las actividades de pesaje, medición de la altura a la cruz, administración de calostro, aretado, manejo del calostro incluyendo: colecta, clasificación, pasteurización, almacenamiento y toma de muestras para bacteriología del calostro. Existe un solo empleado responsable de las actividades y un relevo. Indicador: promedio de refractometría.
Subproceso de lactancia.Inicia cuando la becerra es colocada en la jaula y termina cuando la becerra se mueve a corral. El producto es una becerra sana de 3 meses, que haya sido destetada a los 66 días de edad. Considera las actividades de toma de muestra para refractometría y obtención de resultados, pasteurización de leche para becerras, alimentación líquida con leche pasteurizada (2 tomas, iniciando con 2.5 l/toma hasta 6 l/toma en la 3ª semana y destete escalonado iniciando en la 7ª semana), alimentación sólida con concentrado iniciador ad libitum, vacunación, descorne, diagnóstico y tratamiento de becerras enfermas, destete, pesaje y medición al destete y a la bajada al corral. Existe un empleado responsable del subproceso y seis empleados más para realizar las actividades que funcionan al mismo tiempo como relevos. Indicador: GDPL. El concentrado iniciador ofrecido era peletizado sin texturizar con 87.8% de MS, 26.7% PC, 21.9% FDN, 11% FDA, 39.2% CNF y 2.8 Mcal de energía metabolizable (ME)/kg de MS.
Subproceso de crecimiento. Inicia con la entrada a corral y termina cuando la vaquilla es enviada a otro sitio para proseguir su crecimiento. El producto es una vaquilla sana de 7 meses de edad. Considera las actividades de alimentación con una ración totalmente mezclada, diagnóstico y tratamiento de becerras enfermas, vacunación, movimiento de animales entre corrales. Existen tres empleados responsables de diferentes actividades, uno para la alimentación y dos para las otras actividades, todos con responsabilidades en otros procesos del establo. Indicador: GDPc. La dieta para las vaquillas de 3 a 7 meses consistía en la mezcla de 80:20 base húmeda de concentrado para crecimiento y alfalfa de primera calidad, respectivamente; ofrecida a razón de 6 kg por animal al día, con una calidad nutricional de 82.3% MS, 19.4% PC, 26.9% FDN, 17.5% FDA, 44% CNF y 2.44 Mcal ME/kg de MS. La calidad del concentrado de crecimiento peletizado y texturizado fue de 86.2% MS, 23.7% PC, 16.4% FDN, 8.5% FDA, 48.2% CNF y 2.8 Mcal ME/kg de MS. La calidad de la alfalfa fue de 89.5% MS, 21.2% PC, 40.7% FDN, 34.5% FDA, 29.2% CNF y 2.33 Mcal ME/kg de MS.
En el cuadro 1 se presentan los indicadores del establo y los indicadores de referencia (1,7,11,12). Para los indicadores de nacimiento y lactancia el promedio observado rebasó el valor de referencia, sin embargo, para refractometría 14% de los animales presentaron valores inferiores. En el caso de GDPL sólo el 3% de las becerras se encontraron por debajo del valor mínimo de referencia. En la figura 1 se muestra la GDPC para las vaquillas en crecimiento. La media de peso de las vaquillas muestreadas en corrales fue de 124±8.5 kg (rango: 105 mín. y 145 máx.) y la edad de 151±25.3 días.
DISCUSIÓN
De acuerdo con el análisis nutricional de la dieta de las vaquillas del subproceso de crecimiento, la dieta sobrepasa las recomendaciones requerimientos nutricionales para vaquillas de con peso vivo promedio de 150 kg con una GDP deseada de 0.800 kg del National Research Council (13); sin embargo, la GDPC no corresponde a lo deseado. Al respecto, si bien es recomendado que se incluya forraje en las dietas de becerras después del destete, el requerimiento de FDN y FDA para animales entre 3 y 5 meses de edad no está definido. No obstante, se pueden tomar en cuenta resultados de investigación donde se ha observado que dietas con contenido entre 18 y 27% de FDN para becerras destetadas permiten un consumo adecuado de MS sin afectar la tasa de crecimiento (14) y para vaquillas de 6 meses de edad con 200 kg de peso vivo se recomienda de 30 a 33% de FDN (13). Sin embargo, en el establo del estudio la ración se ofrece a razón de 4.94 kg de MS por animal, lo que significa que las becerras de 100 kg tienen disponible 1.328 kg/d de FDN cuando su requerimiento es de 0.710 kg/d, lo que representa el 87% más. En el caso de las vaquillas de 145 kg de peso vivo el requerimiento de FDN es de 1.560 kg/d, por lo que están recibiendo 5% más de su requerimiento. Lo anterior, sin contar con que una de las problemáticas de incluir forrajes de alta calidad como la alfalfa es que se incrementa el riesgo de que las becerras y vaquillas consuman más forraje que pellet, diluyendo su consumo de energía (15).
CONCLUSIONES
El análisis de los indicadores permite sugerir que el área de oportunidad en el establo del estudio se encuentra en el proceso de crecimiento, donde se sugiere incluir el pesaje mensual de los animales para poder ajustar tanto la cantidad de MS ofrecida por animal de acuerdo con su peso y en consecuencia el contenido de FDN disponible para las becerras y vaquillas, y con esto, mejorar la GDPC.
Los presentes resultados forman parte del proyecto de apoyo a la investigación 1540583595 “Sistema de procesos para la mejora de la crianza de becerras y vaquillas de reemplazo en establos lecheros”. Agradecemos a “Lácteos Nuevo León” el permitirnos llevar a cabo las actividades de validación del proyecto antes mencionado además de todas las facilidades brindadas. La mención de cualquier marca o producto propietario en el presente trabajo no constituye una garantía o la aprobación del producto por el INIFAP; así mismo, no implica la aprobación de la exclusión de otros productos que también pudieran ser adecuados.