México se consolidó como el segundo mayor mercado para el ganado porcino de Estados Unidos.
A seis meses de que fuera anunciado en forma oficial que se había registrado un mal de las vacas locas en Estados Unidos, los precios de la carne de res se han estabilizado, pero los precios del puerco han resultado ser los ganadores, de acuerdo a información del Chicago Mercantile Exchange.
El pasado 23 de diciembre el Departamento de Agricultura de Estados Unidos anunció un caso positivo de la Encefalopatía Espongiforme Bovina, mejor conocida como la enfermedad de las vacas locas.
Desde esa fecha los precios del futuro del ganado vacuno en pie en Estados Unidos para entrega en un mes han caído 3.9 por ciento, en tanto los precios del ganado porcino en pie registraron un alza del 47.2 por ciento, provocada por la mayor demanda del cerdo.
A raíz del anuncio, México, y países como Canadá, Japón, Brasil, Corea del Sur, Hong Kong, entre otros, decretó el cierre total de la frontera a las importaciones de carne de res.
Para el primero de enero del 2004 los precios del futuro de la carne de res habían caído 21 por ciento respecto al registrado 8 días antes, en tanto los precios de la carne de puerco crecieron sólo 0.6 por ciento en el lapso.
Para Estados Unidos el mercado mexicano de la carne de res es el segundo en importancia, después de Japón, sin embargo, las ventas al país latinoamericano cayeron 74 por ciento en los primeros cuatro meses del año, respecto al mismo periodo del 2004, según cifras del Departamento de Agricultura.
Apenas el pasado 3 de marzo México anunció la reapertura parcial a las importaciones de carne de res procedentes de Estados Unidos.
El pasado 21 de junio falleció la única persona contagiada con ese mal que residía en Estados Unidos, que presuntamente se contagió en un viaje al Reino Unido.
Las exportaciones de cerdo de Estados Unidos a México aumentaron 30 por ciento en el periodo de enero a abril, respecto al mismo periodo del año anterior.
Así, México se consolidó como el segundo mayor mercado para el ganado porcino de Estados Unidos, detrás de Japón.