Introducción
El éxito de la explotación pecuaria suele ser atribuido a la acertada decisión sobre el genotipo del animal a ser explotado, el cual solamente podrá producir satisfactoriamente si las condiciones del medio ambiente que lo rodean le permiten expresar su potencial productivo. En general, las condiciones agroclimatológicas imperantes en las regiones tropicales determinan, en la mayoría de los casos, las rentabilidades de las explotaciones. El clima ejerce un efecto, reduciendo el consumo de alimento, alterando el consumo de agua, disminuyendo la eficiencia de utilización de los nutrientes dirigidos y ocasionando considerablemente pérdidas de nutrientes sudor y saliva.
La temperatura bienestarable para vacas lecheras tiene un rango entre 4,5º C a 24º C, por debajo o por encima de dicha temperatura, sufren un estrés térmico, afectando el consumo y la producción. En América Latina, la ganadería de leche especializada y de doble propósito se practica en zonas bajas que generalmente se caracterizan con alta precipitación, humedad relativa y temperatura ambiental. En general el nivel de producción de leche en zonas ecológicas es relativamente bajo debido a la pobre nutrición animal, el efecto del estrés climático y problemas de enfermedades que enfrentan los animales (Bodisco et al., 2006).
La interpretación de las reacciones de los animales bajo la influencia del clima nos indica las diferencias morfológicas funcionales que existen entre las razas y aún entre los individuos de una misma raza. Para determinar qué características anatomofisiológicas se relacionan con la adaptabilidad, es necesario estudiar el efecto de los factores ambientales específicos sobre los órganos o partes del cuerpo y en regiones subtropicales en primer lugar determinar qué efecto tendrá sobre el animal la radiación, la temperatura y la humedad. Por eso la importancia que tiene el tema en el desarrollo ganadero del país y específicamente en la toma de medidas para mitigar el efecto del ambiente sobre los animales, trayendo consigo un mejor desempeño productivo y aumentos productivos tan necesarios en estos tiempos de crisis. En Cuba el índice temperatura – humedad en las épocas del año en Cuba afectan la producción de leche pero no se sabe en qué grado lo hacen en la vaquería 021 de la Granja Guayabal. Por lo que el objetivo del presente trabajo resultó determinar la influencia del índice temperatura – humedad (ITH) sobre la producción de leche por época del año en la unidad mencionada.
Materiales y Métodos
La investigación se desarrolló en la unidad 021 perteneciente a la granja Guayabal, ubicada en el municipio San José de la Lajas, provincias Mayabeque.
Se utilizaron los datos de producción de leche diaria por vaca de la vaquería en el periodo abril 2014 – marzo 2015 y la temperatura y humedad promedios diaria que ofrecieron la estación meteorológica de Tapaste del Instituto de Meteorología.
Los animales se encontraban bajo las mismas condiciones de alimentación y manejo. Se calculó el ITH (índice temperatura – humedad) mediante la fórmula planteado por Starr, (1988). ITH = 0,72 (TDB + TWB) + 40,6 Dónde: ITH = Índice de temperatura- Humedad TWB = temperatura del punto de rocío en °C TDB= temperatura del bulbo seco en °C La temperatura del punto de rocío y el vapor de agua son datos que fueron obtenidos de la tabla Psicrométrica (1972). Se realizó un análisis descriptivo de las variables y un análisis de varianza simple (ANOVA) de la producción de leche y el ITH por época del año. Además se efectuó un análisis de regresión simple, donde se escogió la producción de la leche como variable dependiente y el ITH como independiente. Para el procesamiento de los resultados se empleó el paquete estadístico Statgraphics Plus v 5.1. Posteriormente se realizó una valoración económica sobre el estimado de leche dejada de producir en la unidad entre las épocas del año y el dinero dejado de ingresar a la unidad.
Resultados y Discusión
Con los datos de producción de leche diaria por vaca se realizó un análisis de varianza para determinar si existían diferencias entre las épocas del año (Tabla 1)
Tabla 3. Análisis de varianza simple de la producción de leche diaria por vaca por época del año.
Las producciones de leche se comportaron con una media de 9,54 L/vaca/día en el periodo lluvioso y de 5,43 L/vaca/día para el poco lluvioso, mostrando un coeficiente variación de 11,73 y 15,38 % respectivamente. Puede apreciarse que existen diferencias estadísticas altamente significativas (p–valor ? 0,001) con un nivel de confianza del 99,9 % entre las producciones de leche por vaca en las épocas del año. Siendo mejor la producción en la época lluviosa. Al respecto Ortega (1994) afirma que los mejores bimestres de producción de leche son los del periodo lluvioso, donde se producen los mayores rendimientos de materia seca, lo que permite una mayor oferta por animal por día y a su vez posibilita una mayor selección de los animales con relación al periodo poco lluvioso.
La vaca que tiene genéticamente una alta producción de leche, producirá con deficiencia si se alimenta en forma inadecuada para mantener sus necesidades. Por su parte, Hernández et al. (2002) plantean que la producción de leche, por vaca por año en el trópico, es aproximadamente una cuarta parte de la lograda en zonas templadas debido a factores ambientales que tienen mayor efecto en el comportamiento de la raza Holstein. Se mencionan además la disponibilidad y calidad de los alimentos, el manejo, trastornos fisiológicos, patologías y el clima.
Herrera (1998), afirmó que los meses lluviosos se superan la línea de crecimiento el pasto. Sin embargo, en el poco lluvioso la escasez de precipitaciones inciden directamente de forma negativa sobre el comportamiento del ganado al verse afectada la disponibilidad de pastos y forrajes, esta variable constituye un limitante en época poco lluviosa para lograr sostenibilidad en el agroecosistema.
Se valoró el ITH (Índice de Temperatura – Humedad) por cada día de observación para determinar el bienestar de las vacas en la nave de sombra (Ver Tabla 2). Realizándose una comparación entre las épocas del año. Por lo que es necesario tener en cuenta que el ITH es una de las variables que define el bienestar de los animales, ya que su valor máximo registrado durante nuestra investigación fue de 81,7 con un promedio de 76,03. Al respecto, Imanol (2007) por su parte considero que cuando los valores de ITH están entre 80 y 83 la vaca está en situación severa de estrés.
Tabla 4. Análisis de varianza simple del ITH por época del año.
Los valores del ITH se comportaron con una media de 77,37 en el periodo lluvioso y de 75,18 para el poco lluvioso, mostrando un coeficiente variación de 0,69 y 1,34 % respectivamente. Puede apreciarse que existen diferencias estadísticas altamente significativas (p–valor ? 0,001) con un nivel de confianza del 99,9 % entre los valores calculados del ITH .
Imanol (2007) plantea que en los experimentos realizados con el ITH en vacas lecheras se reporta la disminución de la producción de leche a valores de 75 o mayores y el estrés calórico comienza a presenciar a partir de los valores de 70 en los animales y afirman que en Cuba se ha concluido que a los 26º C es la temperatura a partir de la cual comienza el estrés térmico, al sol en vacas Holstein aclimatadas, mientras que a la sombra esta alteración no comienza hasta los 29º C, debido al sinergismo existente entre la intensidad de radiación y la temperatura del aire. Según Dowell (2002) el ITH es un índice integral que define la respuesta del animal, como una función compleja de la acción de la temperatura y la humedad del aire. Al analizar la influencia del ITH sobre la producción de leche se realizó un análisis de regresión simple cuyos resultados resultaron para el análisis de producción/ITH para un modelo ajustado de Producción = 86,0122 - 1,01974 * ITH con elevada significación (***) y un P-valor ? 0,001. El análisis mostró dado que el p-valor ? 0.001, existe relación estadísticamente significativa entre producción de leche y el ITH para un nivel de confianza del 99,9%. El coeficiente de determinación indica un 51,67 % de la variabilidad en producción leche por la influencia del ITH. El coeficiente de correlación es igual a - 0,72, indicando una relación moderadamente fuerte entre las variables. Este último valor negativo indica que a mayores valores del índice disminuyen las producciones de leche por animal.
Fisiológicamente, el clima es un factor limitante en el trópico ya que los animales de razas especializados tienen dificultad para expresar su valor genético. Entre los indicadores climáticos existe una interacción compensativa, aun disminuye el bienestar animal, en la época de lluvia, la temperatura y la humedad son más altas sin embargo hay mayor cantidad de lluvia lo que favorece el crecimiento del pasto y la producción por área coincidiendo con Ortega (1994) que planteó que las condiciones climáticas de la época de lluvia favorece al pastizal por permitir la acción de las bacterias a la descomposición de las heces fecales, acción esencial para garantizar la biocenosis, ya que las radiaciones son de mayor incidencia e intensidad permitiendo la fotosíntesis. Las altas temperaturas y la humedad produce malestar en las vacas lecheras lo que afecta negativamente la producción por disminución del consumo, mientras que Hernández et al. (2002) señalaron que la alimentación de las vacas es mejor en estos momentos ya que hay mayor disponibilidad de pastos, lo que compensa el efecto nocivo del clima.
Referencias
Bodisco, V.; Valle, A.; Mendoza, S. y García, E. 2006. Consumo Voluntario de Materia Seca, Peso y producción de vacas lecheras [en línea] enero. Disponible en: http://www.redpav-fpolar.info.ve/agrotrop/v28_3/v283a002.html. [Consulta: 23 de abril 2015].
Dowell, R. E. 2002. Improvement of livestock production in warm climate. USA: W. H. Freeman and Company.
Hernández, Melinda; Eduardo R.; Heredia, J. C. y Correa, S. 2002. Duración de la lactancia y producción de leche de vacas Holstein en el Estado de Yucatán, México. [en línea] diciembre 2002. Disponible en: http://www.uady.mx/~biomedic/revbiomed/pdf/rb021314.pdf Consulta: 13 de febrero 2015.
Herrera, R. 1998. Los pastos de Cuba. Tomo II. La Habana, Cuba: EDICA. Imanol, M. 2007. El estrés calórico efecto en las vacas lecheras: área de asistencia técnica en ganado de leche-. Missouri USA: ITGG.
Ortega, O. y Tapanes, B. 1994. Mejoramiento de los pastos naturales. ACPA, 16 (3), 4-6.