Introducción
El estrés por calor [índice de temperatura-humedad (ITH) ≥68] afecta negativamente la producción de leche, siendo estas pérdidas mayores en los sistemas de ordeñe voluntarios (SOV) que en los convencionales (Speroni y col., 2006). Las mismas podrían explicarse en parte por la reducción del consumo de alimento (West, 2003), dado que el ITH reduce el tiempo comiendo y de rumia de vacas lecheras (Tapki y Sahin, 2006). Sin embargo, no es conocido el impacto del estrés por calor en los comportamientos de vacas mientras pastorean en un SOV. Por lo tanto, nos propusimos evaluar la relación entre la producción de leche, la frecuencia de ordeñe y los comportamientos en pastoreo de vacas Holando ordeñadas en un SOV, con los valores de ITH diarios.
Materiales y métodos
En el SOV de INIA La Estanzuela se seleccionaron 25 vacas primíparas y 44 multíparas con más de 150 días en leche. Durante noviembre de 2019 la dieta de los animales consistió en pastoreos diarios de tres parcelas, las cuales estaban disponibles en distintos horarios del día (A: 6:00-14:00, B: 14:00-21:00 y C: 21:00- 6:00). Solo la infraestructura del tambo poseía sombra, encontrándose el agua en las parcelas. Durante 12 horas diarias (6:00-18:00), por 10 días, se observaron a los animales en la pastura, registrándose cada 10 minutos (método de scan) los siguientes comportamientos: parada rumiando, parada sin actividad, echada rumiando, echada sin actividad, y pastoreando. La frecuencia de ordeñe y la producción de leche diaria fue obtenida del equipo de ordeñe. A partir de la temperatura del aire (Ta) y la humedad relativa promedio (HR) se calculó el ITH diario (Thom, 1959), obteniéndose un promedio de Ta, HR, e ITH de 23,0 ± 2,8°C, 69,0 ± 7,4%, 80,5 ± 7,2, respectivamente (Figura 1). Los comportamientos fueron relacionados con el ITH del día de la observación (día 0); y la producción y frecuencia de ordeñe con los 3 días previos al ordeñe (-1, -2 y -3) a través de un modelo linear mixto con medidas repetidas en el tiempo. Se considero significancia estadística con un α 0,05.
Figura 1. Índice de temperatura y humedad promedio, máximo y mínimo. El día 0 es el comienzo de las observaciones de comportamiento, en los cuales se puede observar un período de “bajo estrés” (gris claro) y otro de “estrés severo” (gris oscuro) (García y col., 2015). La línea negra horizontal indica el ITH= 68 (umbral para vaca lechera).
Resultados y discusión
La producción de leche fue asociada con el ITH de los 3 días previos (P< 0,0001), pero no con el ITH del día del ordeñe. La producción disminuyó por cada unidad de incremento de ITH, con mayores niveles de pérdidas en vacas multíparas (día -1: -0,38 L; día -2: -0,41 L y día -3: -0,40 L) que en primíparas (día -1: -0,18 L; día -2: -0,20 L y día -3: -0,15 L). El efecto retardado del estrés calórico en la producción de leche que se refleja hasta 3 días después del aumento de ITH ha sido reportado en SOV pastoriles de Australia (Wildridge y col. 2018). El hecho de que primíparas tuvieran un menor nivel de reducción de la producción que multíparas podría deberse a que las primíparas presentan menor producción de leche (datos sin publicar) y/o menor susceptibilidad al estrés calórico (Benni y col., 2019). La frecuencia de ordeñe fue relacionada positivamente con el ITH del mismo día evaluado, aumentando 0,01 ordeñes por cada unidad de aumento de ITH (P=0,04), pero solo en vacas multíparas. La frecuencia de ordeñe no se asoció con el ITH de días anteriores. Fue interesante encontrar que a mayores valores de ITH, más veces fueron las vacas al tambo a ordeñarse, ya que Wildridge y col. (2018) reportaron que al aumentar el ITH disminuye la frecuencia de ordeñe. Además, cuando una vaca se encuentra bajo estrés calórico tiende a bajar su actividad (camina menos). Una posible explicación de nuestros resultados es que las vacas buscando la sombra del tambo se movieron hacia el SOV y fueron ordeñadas. En cuanto a los comportamientos, las vacas estuvieron mayor porcentaje del tiempo de observación parada sin actividad (+0,14%), y menor tiempo pastoreando (-0,30%), echada sin actividad (0,04%), y echada rumiando (-0,70%) (P< 0,0001) a medida que aumentó el ITH. El comportamiento parada rumiando no se asoció con el ITH diario. Nuestros resultados concuerdan con la bibliografía en sistemas lecheros convencionales, donde las vacas bajo estrés calórico dedican más tiempo a estar paradas para disipar calor, disminuyendo el tiempo echadas, pastoreando y rumiando (Provolo y Riva, 2009; Curtis y col., 2017), lo que afectaría su consumo de pasto, el descanso, la salud y su bienestar. Estos resultados reafirman la importancia de la disponibilidad de sombra en las pasturas en sistemas SOV. Una limitación de este estudio fue que no se registraron los comportamientos cuando las vacas estaban fuera de la pastura, por lo tanto, no sabemos si las vacas se echaron y/o rumiaron en los caminos o estructuras del tambo para lograr alcanzar suficientes horas de descanso.
Conclusiones
En las condiciones de este estudio, se evidenció la pérdida de producción de leche debido al estrés calórico ocurrido días previos. También se observó las vacas multíparas (pero no así las primíparas) modificaron su frecuencia de ordeñe según el ITH diario, visitando más el tambo a mayor ITH. El pastoreo y descanso de vacas en un SOV pastoril fueron reducidos cada vez que el ITH aumentaba.
Agradecimientos
Los autores agradecen a Marcelo Pla, Álvaro Gómez, Cristian González, y Gonzalo Viroga por la ayuda con la recolección de los datos. Financiamiento: Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (Proyecto N-23765 PL_25_0_00) y Agencia Nacional de Investigación e Innovación (Beca POS_NAC_ _2018_1_151523).