INTRODUCCIÓN.
Esta es una planta perenne de días cortos y crecimiento erecto amacollado, que alcanza hasta 3 metros de altura; los tallos son fibrosos y delgados, las hojas lanceoladas de un metro de longitud, pubescentes y con la nervadura central bien definida. La inflorescencia es en forma de una panícula falsa; el sistema radicular puede penetrar hasta 3 metros en el suelo.
En Guatemala se inició la reproducción con un material que ingresó procedente de Colombia, identificado como CIAT 621; después de varios años de investigación, el ICTA liberó en los departamentos de Jutiapa y Jalapa un material que fue identificado como ICTA Real o Gamba, con un alto potencial para pastoreo de bovinos en terrenos ondulados del corredor seco.
MANEJO AGRONÓMICO DE LA ESPECIE.
Condiciones Ambientales.
Esta especie crece bien hasta los 1,000 metros sobre el nivel del mar; entre las condiciones más favorables para Andropogon gayanus se menciona una precipitación pluvial promedio de 1,000 mm anuales, con 3 a 5 meses de época seca, temperaturas entre 20 y30 grados centígrados, suelos de baja a media fertilidad pero con buen drenaje y pH entre 4 y 7.5. Rebrota rápidamente después de las primeras lluvias y es resistente a la quema, más no a condiciones de encharcamiento prolongado. Se adapta bien a diversidad física y química de condiciones de suelo, prefiriendo aquellos de textura franco arenosa.
Establecimiento.
Se propaga por medio de semilla sexual utilizando una densidad de 6 a 8 kilogramos/hectárea, sembrada a un centímetro de profundidad; también puede hacerse en forma vegetativa utilizando cepas. Se ha comprobado que se asocia bien con las leguminosas Stylosanthes guianensis, Arachis pintoi, Desmodium heterocarpon y aquellas de crecimiento voluble como Centrosema y Pueraria.
Manejo.
Dependiendo del resultado que reporte el análisis de suelo, se debe aplicar el 50 por ciento de la dosis de fertilizante al momento del establecimiento y el resto después de los treinta días, con repeticiones cada dos o tres años. Se recomienda manejarlo bajo pastoreo rotacional para que tenga el periodo de recuperación adecuado, pues resiste cargas animales hasta de 4 animales/hectárea en época lluviosa y una unidad animal/hectárea durante el periodo seco. El rebrote es muy rápido y dependiendo del ecosistema se recomiendan periodos de descanso de 35 y 42 días, en la época de lluvias y periodo seco, respectivamente. El primer pastoreo se puede hacer entre 4 y 6 meses de establecido.
Producción.
Dependiendo de las condiciones ambientales y el manejo, esta gramínea produce entre 10 y 25 toneladas de materia seca/hectárea/año, con un contenido de proteína cruda entre 7 y 10 por ciento y una digestibilidad de 50 a 55 por ciento. La calidad del forraje se mejora cuando se maneja asociado con leguminosas; en zonas de trópico seco donde prevalecen de 5 a 7 meses de sequía, se puede obtener ganancias de 240 a 280 kg/ha de carne cada año.