Las herramientas de monitoreo para el desarrollo eficiente de un programa de control de mastitis debe integrar el funcionamiento de un amplio grupo de actores del sistema productivo.
Si bien podemos establecer claramente los parámetros sanitarios de excelencia en calidad de leche, el DIAGNOSTICO INICIAL, debe ser el punto de partida hacia cualquier programa de control de mastitis y su evaluación periódica.
Desde aquí es fundamental establecer con claridad los OBJETIVOS DEL PROGRAMA a corto, mediano y largo plazo
Para poder establecer un orden lógico, al momento de la evaluación, es importante plantear un correcto lineamiento interpretativo en los diferentes estratos del sistema:
- Administrativos/gerenciales
- Técnicos
- Operativos
Y para cada uno de dichos estratos, el programa de monitoreo deberá establecer sus objetivos.
- Objetivos globales (administrativos/gerenciales):
Estos objetivos podemos tomarlos como la hoja de ruta sobre la cual la empresa debe hacer sus evaluaciones y correcciones.
Para esto es fundamental establecer plazos o límites de tiempo sobre los cuales podemos detenernos a evaluar.
En este estrato la información debe llegar de manera sintética, estableciendo claramente un grupo de indicadores globales que permitan evaluar resultados epidemiológicos y económicos del programa de monitoreo.
Ejemplos:
- Resultados del monitoreo de tanque: RCS/UFC/Composición.
- Grafica de incidencia/prevalencia de casos clínicos.
- Valoración de pérdidas (Insumos/descarte/productividad).
- Monitoreo de salud de las vacas: porcentaje de vacas con mastitis subclínica, tasa de nuevas infecciones, porcentaje de infecciones crónicas, etc.
Es importante utilizar una única unidad de medida para evaluar resultados, estableciendo al litros de leche como la más indicada.
- Objetivos técnicos :
Tomando como punto de inicio los objetivos sanitarios globales, es aquí donde comienza a existir una dinámica de interacción muy compleja entre diferentes actores del sistema.
Los técnicos/veterinarios/asesores deben comenzar con la planificación del trabajo, para ello una correcta lectura inicial de las herramientas del sistema es fundamental:
Herramientas:
#Recurso humano
#Sistema de producción
#Instalaciones
# maquina de ordeñe
#Maquinaria disponible
Desde este punto surge la estrategia de trabajo a desarrollar, es aquí donde el programa de trabajo se inserta en el sistema y comenzamos con el desarrollo técnico del mismo.
Dentro de esta etapa existen pilares fundamentales a la hora del desarrollo y el monitoreo del programa sanitario, tales como: Capacitar al personal, establecer protocolos de trabajo, protocolos de tratamientos, desarrollar registros (simples de realizar e interpretar), planificar funciones, asignar responsabilidades, programar tareas de mantenimiento (piquetes/galpones), etc.
Es recomendable desde el punto de vista técnico, también establecer con claridad los objetivos del trabajo, que esperamos obtener a corto, mediano y a largo plazo. De esta manera evitamos interpretaciones erróneas de los resultados obtenidos y generar expectativas reales.
La comunicación y el trabajo en equipo juegan un papel preponderante en el programa de control sanitario. Se sugiere establecer canales de comunicación y que la misma siempre sea clara y simple lo que facilitará una correcta interpretación y una correcta ejecución de la acción correspondiente.
- c) Objetivos operativos:
Se hizo mención sobre los objetivos globales y técnicos pero no sobre los operativos.
Revisión Periódica del programa:
El desarrollo previo permite generar las bases para planificar la periodicidad en la revisión y posterior reajustes del programa.
La complejidad del diagnostico inicial es lo que de alguna manera nos marcara la necesidad de la frecuencia del monitoreo, por lo general un Programa de control, en su primer etapa, requiere de un seguimiento con una periodicidad de 10 a 15 días, esta etapa es donde debemos consolidar los procesos de trabajo fundamentales para cumplir los objetivos.
Es aquí también donde por lo general encontramos la problemática sanitaria en su plena expresión y por ende es una importante fuente de datos epidemiológicos (individuales/poblacionales).
Una vez transitada la primer etapa, el programa entra en una segunda etapa donde continuamos consolidando los cambios planificados pero por sobre todo, comienzan a tomar una valoración mayor los mecanismos de control que podemos establecer a través de, planillas de registros de tratamientos, RCS individual/RCS tanque/RCS individual, etc. Aquí la periodicidad del monitoreo puede comenzar a extender sus intervalos a 30-40 días, siempre apoyándose en herramientas de monitoreo interno (del establecimiento) controladas por el profesional, que funcionen como alarmas tempranas en caso de producirse alguna alteración.
En esta etapa es importante incorporar la evaluación de indicadores de rendimiento de sala (ej: VO/hora), ya que el rendimiento de la sala nos permite establecer la dinámica del trabajo, una alteración en este punto, puede disparar un desequilibrio sanitario.
Podemos determinar la presencia de una tercera etapa, en esta el programa de control sanitario del establecimiento adquiere cierta autonomía, se van cumpliendo los objetivos propuestos en las etapas anteriores, quedan establecidos y consolidados los procesos de trabajo y protocolos. Lo cual nos permite establecer auditorias a intervalos mayores con una periodicidad entre 60-90 días.
Independientemente de las etapas del proceso en donde se encuentre el programa de control, es fundamental desde el punto de vista profesional, dejar establecidos mecanismos de monitoreo (no presenciales) permanentes. Estos siempre funcionaran como Alertas tempranas ante cualquier alteración que se produzca.
- Primer etapa ………..Objetivos a corto plazo
- Segunda etapa……..Objetivos a mediano plazo
- Tercer etapa…………Objetivos a largo plazo
Podemos interpretar el programa de control y su monitoreo como algo completamente dinámico y multifactorial, lo cual nos indica que el paso de una fase a otra es un proceso evolutivo lógico, este puede alterarse o modificarse debido a un gran número de variables.
Conclusión:
La revisión periódica del programa de control de mastitis, requiere de una correcta interpretación del estadio en el que se encuentra dicho programa, no obstante esto, la planificación de un programa sostenido de monitoreo a través de auditorías internas y externas al establecimiento, es la manera más eficiente de lograr una óptima producción de leche de calidad sostenida en el tiempo.