Introducción
El Reglamento 2019/6 de la Unión Europea, prohíbe el uso de antibióticos al secado en vacas sanas y entro en vigor el 28 de Enero de 2022. La reducción del uso de antibióticos, es una herramienta clave dentro de la agenda de “Una Sola Salud”, buscando lograr una salud óptima para las personas, los animales y el ambiente. La administración intramamaria de antimicrobianos a todos los cuartos mamarios de todas las vacas al secado, ha sido un pilar en la prevención y control de la mastitis. Sin embargo, la salud de la ubre ha mejorado considerablemente durante las décadas recientes, con reducciones en la prevalencia de infecciones intramamarias al secado y la introducción de los selladores internos de pezones. La terapia al secado total, puede no ser necesaria en todos los tambos. La terapia al secado selectiva (TSS), en reemplazo de la terapia total en sábana, mejora el uso prudente de antimicrobianos en la industria lechera (Rajala-Schultz et al., 2021; Santman-Berends et al., 2021). Ello reduce la prevalencia de resistencias antibióticas, beneficiando a la salud pública y animal. Desde la introducción de la prohibición de la terapia total en los Países Bajos, el uso de antimicrobianos para la terapia al secado se redujo en un 36% (Santman-Berends et al., 2021). McCubbin et al. (2022), junto a otros 12 referentes mundiales de mastitis (incluyendo los siguientes países: Canadá, Bélgica, Países Bajos, EE.UU., Nueva Zelanda, Finlandia y Australia), publicaron una revisión de la TSS y su impacto sobre la salud de la ubre, producción de leche, económico, uso y resistencia antimicrobiana. Los métodos de selección a nivel de cuartos o vacas utilizados para la TSS incluyen umbrales del recuento de células somáticas (RCS), identificación de patógenos, historial de mastitis clínica o una combinación de los parámetros mencionados. El trabajo concluye que la TSS puede adoptarse sin consecuencias negativas para la salud de la ubre y la producción de leche.
Reducción del uso de antibióticos al secado
Kabera et al. (2021), publicaron un trabajo de revisión sistemática y meta-análisis, para investigar la eficacia de la terapia al secado selectiva (en donde solamente los cuartos/vacas infectados fueron tratados con antimicrobianos), comparada con la terapia al secado total (todos los cuartos/todas las vacas recibieron antimicrobianos, independientemente de estar o no infectados). Con el secado selectivo, el tratamiento antimicrobiano se reserva para los cuartos o vacas infectadas, mientras que los cuartos y vacas sanas no reciben antimicrobianos. Para reemplazar los antimicrobianos, en las vacas sanas se utilizan selladores internos del pezón. Los mismos han demostrado ser muy efectivos, como alternativa a los antimicrobianos con fines preventivos. Se incluyeron 12 estudios que reportaron los siguientes parámetros: (1) porcentaje de cuartos o vacas no tratadas con antimicrobianos con secado selectivo, (2) riesgo de incidencia de infección intramamaria (IIM) durante el período seco, (3) eliminación del riesgo de IIM, (4) prevalencia de IIM post-parto, (5) incidencia de mastitis clínica en la lactancia, o (6) producción de leche y RCS en la lactancia subsiguiente. El secado selectivo, redujo el uso de antimicrobianos al secado en un 66%. No hubo diferencias en la eliminación de IIM existentes al secado entre el secado selectivo y total. El riesgo de incidencia de IIM durante el período seco, riesgo de IIM al parto, riesgo de mastitis clínica al inicio de la lactancia y la producción de leche y RCS en la lactancia temprana, no difirió entre el secado selectivo y el secado total, cuando un sellador interno de pezones fue administrado a los cuartos/vacas sanos no tratados con antimicrobianos al secado. En los estudios, donde no se utilizó un sellador interno de pezones, el secado selectivo resultó en un alto riesgo de adquirir nuevas IIM durante el período seco y presencia de IIM al parto. Al respecto Bucher et al. (2019), demostraron que pasar de una terapia antibiótica al secado total a una terapia selectiva sin sellador interno, incrementaba el RCS de 80.500 cel/ml a 390.667 cel/ml, mientras que con el uso del sellador interno se elevaba de 95.726 cel/ml a 96.871 cel/ml. Con respecto a la incidencia de mastitis clínica en los primeros 100 días en leche, en la terapia selectiva sin sellador interno se incrementaba del 0% al 28%, mientras que con el uso del sellador interno se reducía en un 50% (del 10% al 5%). Tijs et al. (2022), reportaron que el 98,8% de 262 tambos en Holanda, utilizaban el secado selectivo.
En la Tabla 1, se resumen los trabajos publicados de reducción de antibióticos con la terapia al secado selectiva.
Tabla 1. Reducción de antibióticos con la terapia al secado selectiva.
Parámetros a tener en cuenta para adoptar el secado selectivo
Rowe et al. (2020), evaluaron dos protocolos para secado selectivo: el cultivo en tambo (CET) 2 días antes de la fecha de secado y un algoritmo basado en el RCS individual y registros de mastitis clínica. En el caso que el CET diera positivo o si las vacas tenían un RCS individual mayor a 200.000 cel/ml o 2 o más casos de mastitis clínica durante su lactancia o 1 caso de mastitis clínica en los últimos 14 días de lactancia; las mismas recibían la terapia antibiótica al secado. Todos los cuartos de todas las vacas recibieron sellador interno de pezones. Ambos protocolos redujeron el uso de antibiótico al secado en un 55%, sin afectar el riesgo de curación de IIM y nuevas IIM durante el período seco e IIM entre 1 a 13 días en leche. El trabajo concluye que ambos protocolos pueden reducir substancialmente el uso de antibióticos al secado, sin afectar negativamente la dinámica de IIM. Rowe et al. (2023), demostraron que el secado selectivo fue eficaz en vacas con baja (< 23,7 kg/d), media (23,7 a 30,4 kg/d) y alta (> 30,4 kg/d) producción al secado.
- Otros parámetros a tener en cuenta a nivel de tambo son los siguientes:
- RCS en leche de tanque inferior a 200.000 cel/ml en el último año.
- Control lechero y registro adecuado de mastitis clínicas.
Ausencia de Streptococcus agalactiae y control de Staphylococcus aureus. Clabby et al. (2022), demostraron que el secado selectivo en tambos con prevalencia de Staphylococcus aureus, produjo alto RCS e IIM al parto.
Qué recomiendan en Europa?
Bradley et al. (2018), publicaron un acuerdo Pan-Europeo con respecto a la terapia al secado. Recomiendan administrar un sellador interno de pezones al secado en todas las vacas y en todos los tambos. Aquellos animales infectados necesitan recibir una terapia combinada antibiótico y sellador interno. Los rodeos se clasifican en “bajo riesgo” o “alto riesgo”. Estos últimos son los que tienen un RCS mayor a 250.000 cel/ml en 2 de los pasados 6 meses, problemas de Streptococcus agalactiae y con períodos de riesgo de mastitis. En cuanto a las vacas se las considera infectadas con un patógeno mayor si: tienen más de 200.000 cel/ml en al menos uno de los 3 controles lecheros previos al secado y vacas con mastitis clínica en los últimos 3 meses antes del secado. Los rodeos de alto riesgo deben recibir una terapia al secado combinada; mientras que en los de bajo riesgo se puede utilizar el secado selectivo a través del uso del sellador interno de pezones solamente.
Tambos robóticos y convencionales con collares de monitoreo, sensores y automatización
En los últimos años se han incrementado en Argentina los tambos robóticos y la adopción de tecnologías de precisión (collares de monitoreo, sensores, automatización, etc.) en estos tambos y los convencionales. Los reportes diarios de salud de la ubre permiten recabar información en tiempo real, para la toma de decisiones correctas en tiempo y forma. Debido a ello y a que muchos de esos tambos tienen bajo RCS en leche de tanque, los mismos han dejado de realizar el RCS individual mensual. Por lo tanto, no nos permite utilizar completamente el protocolo de secado selectivo que incluye el RCS individual. El mismo podría reemplazarse por el Test Mastitis California (TMC). Sin embargo, McDougall et al. (2022), demostraron que comparado con el RCS individual se incrementaba el porcentaje de cuartos tratados con antibióticos al secado (26,7% para RCS vs. 63,9% para TMC). Se debe tener en cuenta que el secado selectivo, tiene como objetivo la reducción del uso de antibiótico al secado. Además, Mosca et al. (2023), demostraron que el uso del TMC incrementó en un 10% las IIM post-parto y en un 40% por estafilococos y estreptococos. Por lo tanto, el protocolo de CET sería el adecuado y recomendable para estos tambos.
Conclusiones
La lactancia no se inicia luego del parto, sino en el momento del secado. Una buena sanidad de ubres al secado va a impactar en mastitis y calidad de leche, pero también en la expresión del potencial del pico de producción de leche, persistencia en la lactancia, fertilidad, natimortos, calidad de calostro y otras enfermedades (cetosis, metritis, retención de placenta y afecciones podales). La terapia al secado selectiva, permite un uso estratégico y racional de antibióticos. La reducción de los mismos oscila entre un 50-80%. Ello reduce el riesgo de residuos de antibióticos en la leche de tanque y previene las resistencias antimicrobianas. La reducción en los costos de tratamientos antibióticos al secado es de 4.000-5.000 litros/100 vacas. El secado selectivo reduce el uso de antimicrobianos al secado, sin efectos adversos en la salud de la ubre (mastitis clínica y subclínica) o producción de leche y RCS; sí y sólo sí, es utilizado un sellador interno de pezones para cuartos/vacas sanos no tratados con antimicrobianos (Winder et al., 2019b; Kabera et al., 2021). El secado selectivo, es una estrategia de alto impacto en el uso de antimicrobianos al secado con fines preventivos, brindando una mayor seguridad alimentaria e imagen para el consumidor.
"Secado Selectivo" Tema desarrollado dentro del Webinar sobre el Trabajo en Calidad de Leche en Argentina y entre el 9 al 11 de Abril en las Jornadas de Calidad de Leche Fatro Ibérica en Madrid, León y Lugo, España, junto con el Médico Veterinario español Demetrio Herrera.