INTRODUCCION
La evaluación y formulación de dietas para rumiantes es un proceso en donde es necesario contar con información químico-bromatológica de los alimentos de manera precisa y, particularmente de valoraciones de energía y fracciones proteicas (proteína degradable y proteína no degradable en el rumen) que permiten estimar los requerimientos proteicos en términos de proteína metabolizable (PM) en lugar de Proteína Cruda (PC). Evaluar o formular una dieta con base única y exclusivamente en PC, está obsoleto. Los valores de energía, proteína degradable (PDR) y, proteína no degradable en el rumen (PNDR) son utilizados como inputs en modelos computarizados y dinámicos (ej. CNCPS, NRC de Ganado de Carne, NRC de Ganado Lechero) de evaluación de dietas para bovinos, a fin de detectar deficiencias o excesos de nutrientes. Para obtener estos valores apropiadamente, tanto en forrajes como en suplementos es necesario conocer un número cada vez mayor de fracciones; lo que obligatoriamente conduce a la implementación de nuevas metodologías en los laboratorios de nutrición, que además de estar limitadas a la disponibilidad financiera, implican el empleo sustancial de tiempo y esfuerzo.
En nuestro laboratorio se obtienen, de manera rápida, los valores de energía (Nutrientes Digestibles Totales, NDT; Energía Neta de Lactancia, ENL; Energía Metabolizable, EM; Energía Neta de Mantenimiento, ENm y Energía Neta de Ganancia ó Crecimiento, ENg) de los alimentos mediante el empleo de la ecuación sumativa del NRC (2001). Estos valores son ajustados al efecto que el consumo tiene en la digestibilidad de manera tal que puedan ser expresados de acuerdo al nivel de consumo esperado. Así mismo, nuestro laboratorio cuenta con procedimientos in situ (alternativamente se pueden realizar fraccionamientos químicos de la PC) para estimar las fracciones, PDR y PNDR, de manera rutinaria.
Los objetivos de este trabajo fueron familiarizar a los productores, personal técnico y estudiantes con el concepto de PM, el uso práctico de los valores de laboratorio y los modelos computarizados en la evaluación moderna de las dietas para bovinos de leche. Además de determinar el potencial máximo de producción de leche de vacas doble-propósito bajo pastoreo intensivo como si fuese la única fuente de energía y proteína metabolizable existente en la finca.
CASO FINCA 1
La finca está localizada en Humocaro Alto (Estado Lara, Venezuela) y conformada por un rebaño lechero de aproximadamente 130 vacas lecheras mestizas Pardo Suizo. La consulta del propietario obedeció a la baja producción de leche, a pesar de suficiente oferta de materia seca; la ración para las vacas de alta estuvo formada por 25 kg de pasto Bermuda cortado y 6,5 kg de un suplemento comercial. El promedio de leche del rebaño total fue 11 kg/vaca/d.
CASO FINCA 2
La finca 2, localizada en Maracaibo (Estado Zulia) fue visitada en compañía de la ASOCIACION BOLIVARIANA DE PRODUCTORES DE BURIA (Estado Lara) atendiendo una invitación de la Cooperativa “SISTEMAS AGROPRODUCTIVOS EFICIENTES”. El rebaño está formado por aproximadamente 100 vacas mestizas perijaneras en estado de lactancia, bajo módulos de pastoreo intensivos (48 divisiones de 1250 m2 c/u con cerca eléctrica) en una extensión total de 6 Has. El tiempo de ocupación es de 3 horas y se emplean 2 potreros por día con 23,5 días de descanso. Los pastizales están formados por una asociación de Brachiarias, Bermuda y Estrella que son fertilizados periódicamente con abono orgánico y mezclas de fertilizantes inorgánicos, roca fosfórica y humus de lombriz. El sistema de riego consiste en un sistema por aspersión con 12 horas de riego por día (una línea de riego/potrero/d) en los periodos de sequía.
En esta finca, las vacas salen a pastorear después del primer ordeño (6 a.m.) y regresan a los corrales aproximadamente 3 horas después, en donde se les proporciona una mezcla de algún subproducto, nepe de cervecería y melaza. En la vaquera, previo al ordeño de la tarde, se les suministra suplemento comercial, a razón de 1,0 kg por cada 2 L de leche por encima de 10 L/vaca/d. Al terminar el ordeño de la tarde (5 p.m.), las vacas ingresan a un nuevo potrero en donde permanecen 3 horas y al final se recogen en los corrales anexos a la vaquera, en donde descansan toda la noche.
Bajo este módulo de producción intensivo se logran producciones mayores a 1200 L/d (12,5 L/vaca/d, 100 L/Ha/d).
ANALISIS REALIZADOS
Todos los análisis fueron realizados en el Laboratorio de Nutrición del Decanato de Ciencias Veterinarias (Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado, UCLA). Además de las fracciones químico-bromatológicos (Materia Seca, Proteína Cruda, Cenizas, Extracto Etéreo, Lignina, Fibra Neutro Detergente, Fibra Acido Detergente, Proteína Cruda Insoluble en Neutro Detergente, Proteína Cruda Insoluble en Acido Detergente) se analizó la digestibilidad
in vitro de materia seca (DIVMS) y fibra neutro-detergente (DIVFND). El contenido de energía (NDT y ENL) fue estimado a través de la metodología descrita por el NRC (2001), mientras que las fracciones, PDR y PNDR, fueron analizadas empleando técnicas de digestibilidad in situ.
RESULTADOS
En el Cuadro 1 se pueden observar los resultados químico-bromatológicos y análisis de degradabilidad proteica tanto en forrajes como en el suplemento evaluado. El valor de PC en el pasto Brachiaria (Finca 2) duplico el valor correspondiente al pasto Bermuda, debido al efecto de la fertilización y al riego continuo. Los contenidos de proteína soluble y proteína degradable fueron también 100% mayores para el pasto Brachiaria. Estos resultados a favor del pasto Brachiaria pueden atribuirse a la fertilización nitrogenada como fue observado por Juárez et al (1999).
Por otro lado, la concentración de fibra fue también mucho menor en el pasto Brachiaria; sin embargo, el pasto Bermuda tuvo una más alta DIVFND. Al ajustar la DIVFND considerando las diferencias conocidas entre digestibilidad in vitro y digestibilidad in vivo, y calcular los valores de NDT a niveles de mantenimiento, no se apreció diferencias en el contenido de ENL, a nivel productivo, entre estas dos especies.
Uno de los propósitos de esta evaluación fue determinar el potencial de producción de leche de las vacas doble-propósito en el módulo de pastoreo intensivo (Finca 2), asumiendo un consumo máximo de MS de 12,3 kg/vaca/d (2,3 % PV). En segundo lugar, se evaluó el efecto de los diferentes contenidos de PC y sus fracciones (PDR y PNDR) en la producción de leche, utilizando para ello, la información de las fincas descrita en el Cuadro 2. Para la finca 2 se realizó una simulación de dieta, como si se empleara el mismo suplemento que en la finca 1. En todas estas simulaciones se usó el software CNCPS v. 5 (Nivel 2). La información químico-bromatológica de cada alimento fue introducido al programa sin alterar las tasas de degradación (kd) y de pasaje (kp) que el mismo tiene asignado. El CMS de pasto en ambas fincas fue estimado asumiendo que las vacas no perdieron peso, es decir, tuvieron un balance energético igual a cero.
La producción de leche potencial de las vacas a pastoreo (Brachiaria), como única fuente de alimentación, alcanza 10 kg/d según la disponibilidad de energía (Cuadro 3). Los niveles de energía del pastizal, a pesar de ser buenos (1,32 Mcal de ENL) frenan la producción de leche, de tal manera que cualquier valor mayor al 11% de PC en el pastizal, no producirá incrementos adicionales en la producción de leche. Las valoraciones de ENL del programa coincidieron con las del laboratorio al emplear la metodología descrita por el NRC (2001) acompañada de los ajustes por concepto de DIVFND y experiencia del nutricionista.
En el Cuadro 4 se observa la comparación entre las vacas estabuladas (Finca 1) y las vacas a pastoreo (Finca 2). El CMS predicho (14,0 – 14,5 kg MS/d) fue similar a los valores medidos por Valle et al (1974) en vacas Pardo Suizo alimentadas con una ración pasto Elefante (Pennisetum purpureum) picado y suplemento. Se observa que el suministro de PC total fue 13,0% (base seca) superior en la finca 2. La proteína metabolizable (PM) es la sumatoria de la proteína verdadera proveniente de la Proteína cruda Microbiana (PCM) y la PNDR. Esta PM, una vez absorbida, cumple las funciones de mantenimiento, crecimiento, lactación y gestación del animal.
Los requerimientos y aportes (bacteria y alimento) de PM fueron calculados por el programa a partir de información contenida en el mismo que permite una estimación mecanicista de los contenidos de PDR y PNDR de la dieta. Los resultados en este sentido fueron congruentes con los valores encontrados de manera directa vía incubación in situ. Como puede observarse (Cuadro 4), la PM total y la PM proveniente de la PNDR fueron 62 g y 88 g, superiores en la finca 2, respectivamente. Esto significa que las vacas a pastoreo tuvieron una mayor disponibilidad de proteína en el intestino para ser absorbida y convertida en leche, que las vacas estabuladas. A pesar de que la PM limita la producción de leche en ambas fincas, este fenómeno es más marcado en la Finca 1, evidentemente. Las deficiencias de PNDR en la Finca 1 no son completadas por el suplemento comercial, como debería de ser, porque no presenta el balance idóneo PDR:PNDR. Al comparar ambas situaciones, el suplemento comercial se convierte en la fuente sustitutiva de PDR en la Finca 1, ya que los niveles de PC y PDR del pasto son extremadamente bajos. En Venezuela, este efecto sustitutivo e inducido por la agroindustria es más marcado en la ganadería estabulada y semiestabulada que en las fincas a pastoreo. Estas distorsiones no son deseables porque causan una reducción importante de la producción de leche y comprometen el funcionamiento reproductivo de los rebaños. El balance PDR:PNDR en los mal llamados “concentrados” comerciales debe estar cercano a 55:45 pero, la reducción de importaciones de harina de soya vinculadas a la falta de divisas, la improductividad agrícola, la falta de asesoramiento competente y/o las actitudes fraudulentas de varias industrias fabricantes, conspiran en contra de la buena fe de los productores Venezolanos que aún consideran es “mejor comprarlo hecho que ponerse a hacerlo”.
CONCLUSIONES
Los contenidos de proteína soluble, PDR y PNDR en los forrajes son muy variables y responden al nivel de fertilización y riego. Se observa que en muchas fincas
Venezolanas la producción de leche es limitada a 10 – 13 kg de leche/vaca/d por una insuficiencia de PM en la dieta.
Basado en estas evaluaciones, concluimos que el modelo CNCPS resulto muy útil para evaluar raciones de vacas lecheras en Venezuela, si se dispone de análisis confiables para forrajes y suplementos. La predicción de la respuesta animal depende altamente de valores acertados de al menos, proteína soluble, proteína degradable, y energía.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Juares, F., D. Fox, R. Blake, y A. Pell. 1999. Evaluation of tropical grasses for milk production by dual purpose cows in tropical Mexico. J. Dairy Sci. 82:2136-2145.
National Research Council. 2001. Nutrient Requirements of Dairy Cattle. 7th rev. ed. Natl. Acad. Press. Washington, DC.
Valle, A., E. Shultz, V. Bodisco, T. A. Shultz, y C. F. Chicco. 1974. Niveles de fibra y proteína en suplementos para vacas lecheras. Agronomía Tropical 24: 15-167.