En este apartado, trataremos de dilucidar, con tres ejemplos concretos (uno en el área de la prevención, uno en el área del tratamiento, y uno en el área del post-tratamiento), cuán beneficiosos pueden ser los productos nutracéuticos, y por qué pueden ser una alternativa real de cambio en el manejo de la salud animal.
Hasta hoy, en el manejo de la salud en instalaciones ganaderas o clínicas veterinarias, era poco frecuente plantear la prevención como uno de los factores básicos de la salud, siempre y cuando no tengamos en cuenta, claro, los tratamientos antibacterianos preventivos.
El ejemplo que vamos a traer a colación, y que puede servir como un buen paradigma de los beneficios en prevención con la administración de productos nutracéuticos, es el de la inmunología. Una bacteria u otros microorganismos patógenos, no siempre encuentra la misma facilidad para invadir el organismo de un animal. Un sistema inmunológico saludable, reforzado, y con amplias defensas, siempre combatirá con mayores garantías un ataque bacteriano, y será menos susceptible a contraer una infección.
Impromune es un producto nutracéutico, destinado a servir de refuerzo inmunitario para perros y gatos. Se compone de una fórmula patentada, Nucleoforce®, constituida por Nucleótidos. Los nucleótidos son un buen ejemplo de lo que hemos venido versando con anterioridad, ya que son unos nutrientes fundamentales para la salud inmunitaria, habiendo demostrado, en mamíferos, aumentar la respuesta inmunitaria innata y auxiliar.
Por tanto, estamos ante una prueba patente de los beneficios de los nutracéuticos en el ámbito de la prevención, en este caso con Impromune: un producto que puede reforzar la respuesta inmunitaria frente al ataque de los microorganismos patógenos, en cualquier etapa de la vida, pero sobre todo en periodos de apatía o inmunosupresión.
Algunas de las patologías que conocemos en la clínica de pequeños animales, son crónicas. Este tipo de enfermedades, que requieren de una terapia continua y prolongada, no pueden ser tratadas con medicamentos farmacológicos, ya que su administración prolongada, podría generar efectos y otros daños secundarios.
Una de las enfermedades crónicas muy conocidas en perros y gatos, es la osteoartrosis. Esta enfermedad requiere de una continua terapia condroprotectora y antiinflamatoria, que solo un producto nutracéutico es capaz de otorgársela en el tiempo.
Hyalutidin DC es el único condroprotector líquido del mercado, y está indicado para la prevención y el tratamiento de las artropatías. En cursos de osteoartrosis, su uso permite una terapia antiinflamatoria y condroprotectora incluso crónica, debido a que está compuesto de ingredientes naturales: el ácido hialurónico, y el condroitín sulfato.
Hyalutidin DC es un ejemplo claro de un tratamiento de una patología con un producto nutracéutico, que reduce la inflamación, mejora la movilidad articular, protege al cartílago, y con una absorción cercana al 100 %.
La medicina convencional, tanto humana como veterinaria, puede llegar a descuidar el post tratamiento, como una parte de la misma patología, y otro campo a abordar para una salud global e integral. Cuando el animal, por ejemplo, ha sido víctima de una infección bacteriana, es posible que tras la administración de un antibacteriano, su vitalidad decaiga. La virulencia de un antibacteriano, su impacto por ejemplo en la flora intestinal, y el desgaste energético y estresante en el que el animal se ve inmerso en el curso de la enfermedad, puede dejarlo apático, y débil. En estos casos, existen productos reconstituyentes para prodigar una ayuda mediante el aporte de micronutrientes esenciales y revitalizantes.
Anima Strath es un magnífico alimento complementario, fabricado en Suiza, y bajo controles de seguridad y calidad muy serios. Alberga toda una serie de macronutrientes y micronutrientes, indicados para estimular y re-activar el organismo del animal, cuando por motivos diversos se encuentra convaleciente.
Anima Strath presenta un valor biológico extraordinario, y un perfil de acción y asimilación muy alto. Con su administración, se estimula, de forma natural, el rendimiento, la producción, la resistencia, las funciones metabólicas, la recuperación, el apetito, las defensas, la reproducción, el aspecto, etc.
La alimentación o nutrición es la primera base, o el primer pilar para la salud. No es extraño, tanto en mascotas como en animales de granja, encontrar dietas cotidianas deficitarias. Los piensos convencionales, en numerosas ocasiones, no contienen más allá que los macronutrientes esenciales. Un déficit en micronutrientes que se prolonga en el tiempo, puede dejar órganos fisiológicos concretos sin atender, lo que conllevará su debilitamiento, y su exposición a la enfermedad.
Nutrientes naturales tales como los ácidos orgánicos, especias, aceites esenciales y bioflavonoides, probióticos y prebióticos, minerales, por hablar solo de algunos, han demostrado ser la vía más oportuna para eludir la enfermedad, para protagonizar o coadyuvar en el tratamiento si esta es una realidad, o para reconstituir la salud del animal en el post tratamiento. Hablamos de nutrientes que pueden ayudar a la defensa frente posibles infecciones bacterianas, mejorar las funciones digestivas y metabólicas vitales, proteger el cartílago, aportar vitaminas, minerales, y aminoácidos, equilibrar el Ph, poblar de microorganismos benéficos la flora bacteriana, ser fuente de energía en etapas de notable desgaste…; solo por citar algunos beneficios.
Los productos nutracéuticos no van a hacer desaparecer los medicamentos farmacológicos, ya que no deben. Pero si se les prodiga la importancia que merecen, y se aprovechan sus beneficios, conllevarán una reducción de estos, evitarán efectos secundarios, y conseguirán siembre una mejora de la salud general del animal.