Alberto Gimeno
3 de junio de 2007
Apreciado Eng. Carlos,
En primer lugar, muchas gracias por su comentario positivo a mi artículo.
Respecto a sus preguntas y comentarios:
En su pregunta, “que restos de AFB1 existió en el hígado?”, no lo sé, ya que probablemente los autores no analizaron los residuos de AFB1 en hígado; sin embargo y por los estudios efectuados por otros autores, le puedo indicar que una contaminación de 1 ppm (miligramos/Kg) (mg/Kg) de AFB1 en pienso, llegó a dar en hígado de pollo residuos de la micotoxina de 0,25 (valor medio) y 3,70 (valor máximo) ppb (microgramos/Kg) (mcg/Kg) y una contaminación de 2 ppm dio unos residuos de 7,90 (valor medio) y 22,10 (valor máximo) ppb (Mintzlaff,H.J Lotzsch,R Tauxhmann,F Meyer,W Leistner,L. (1974) Die Fleischwirtschaft. 54, 774-778).
Otros autores (Rodricks J.V., and Stoloff,L. (1977) “Aflatoxin Residues from Contaminated Feed in Edible Tissues of Food-Producing Animals” in Mycotoxins in Human and Animal Health. Edited by : Joseph V.Rodricks, Clifford H.Hesseltine and Myron A.Melhman. Pathotox Publishers, INC . Park Forest South Illinois., pp.67-79), encontraron que con contaminaciones de AFB1 en pienso del orden 0,8 a 4,3 ppm, los residuos de AFB1 en hígado de pollo eran inferiores a 2 ppb.
Como verá, no hay una correlación y la variabilidad es grande, depende de la raza de pollo, de las variaciones en su metabolismo, del tiempo de ingestión del alimento contaminado, etc. En lo que a continuación le expongo verá nuevamente que no hay una correlación directa.
Me pregunta, “si es coherente encontrar un contenido de AFB1 en el hígado superior al consumido por el pollo”, mi respuesta es que eso no es posible, sin descartar la posibilidad del efecto acumulativo... Ahora bien, este no es el caso expuesto en el artículo, o sea: imaginemos un pollo que consume una medida de 80 g de pienso/día, contaminado con 0,4 o 4,3 ppm de AFB1, o sea, 400 y 430 microgramos (mcg) de AFB1/Kg; la ingesta diaria de AFB1 seria de 32 mcg y 344 mcg, respectivamente, en cambio en el hígado aparecen residuos inferiores a 1 y 2 mcg AFB1/Kg de hígado, respectivamente. Ahora imaginemos lo mismo pero con contaminaciones de 5 y 15 ppm de AFB1, la ingesta diaria de AFB1 sería de 400 y 1200 mcg, respectivamente, en cambio en el hígado aparecen residuos de 5,95 y 15,45 mcg AFB1/Kg de hígado. No se olvide que cuando yo pongo mcg, eso son microgramos.
No tengo datos de residuos en pechuga de pollo, sí los tengo en pechuga de gallina, o sea: una contaminación de 88 ppm de AFB1 en pienso, o sea 88000 microgramos/Kg, dio en la pechuga unos residuos de 83 microgramos de AFB1/Kg de pechuga.
Tal como antes le he dicho y habrá visto, no hay una relación directa entre la cantidad de AFB1 consumida y la concentración de residuos de AFB1 encontrada en los tejidos, desconozco que exista alguna ecuación de regresión para tener una idea aproximada de cuál pueda ser el nivel de residuos según la ingestión de micotoxina. En cambio si la hay para tener una idea aproximada del nivel de residuos de aflatoxina M1 en la leche según la cantidad de aflatoxina B1 diaria ingerida por las vacas lecheras.
No le entiendo la pregunta de los márgenes de AFB1. La legislación de la Unión Europea permite como máximo, para AFB1, una contaminación de 20 microgramos/Kg (0,020 ppm) en pienso de pollos adultos y 10 microgramos/Kg (0,010 ppm) como máximo en pienso de pollo joven. Con esas concentraciones máximas permitidas, el riesgo de problemas en el pollo y el riesgo de residuos de AFB1 en tejidos comestibles de origen animal son prácticamente nulos.
En mi país y la Península Ibérica en general, existen unos Organismos de Fiscalización y control de alimentos que actúan junto con los laboratorios de control de calidad del Estado para vigilancia y fiscalización de los niveles, no solo de aflatoxinas sino también de otras micotoxinas en alimentos para animales y humanos.
La responsabilidad para evitar niveles de contaminación no permitidos está en las manos de cada productor de alimentos y de cada entidad que los pone a la venta en el mercado.
Respecto a su última pregunta, le voy a comentar lo siguiente: La TD50 (dosis de micotoxina con la cual el 50 % de los individuos pueden desarrollar tumores malignos) para la AFB1 es de 1,15 microgramos/Kg de peso corporal/día y la TDI (ingesta de micotoxina diaria que puede ser tolerada) para la AFB1 es de 0,19 nanogramos/Kg de peso corporal/día, con un factor de seguridad de 6000 y un nivel de riesgo de 1/100000. Imaginemos un individuo con 50 Kg de peso corporal, la ingesta máxima de AFB1 diaria sería de 9,5 nanogramos o sea 0,0095 microgramos. Imaginemos un hígado de pollo con una de las mayores concentraciones de residuos de AFB1 antes referida, o sea: 22,10 microgramos/Kg. Si hace las cuentas verá que ese individuo solo puede comer 0,429 gramos de hígado diarios, o sea que ese hígado es totalmente impropio y peligroso para el consumo humano. En niños el riesgo es mayor ya que son más sensibles a la acción toxica de la AFB1. Claro que si hace las cuentas con el nivel de residuos de AFB1 de 0,25 mcg/Kg antes referido, la ingesta de hígado para ese individuo ya puede ser de 38 gramos diarios. Sin embargo debe tener en cuenta que la TDI (para micotoxinas cancerígenas) se obtiene, normalmente, dividiendo la TD50 por un factor de seguridad que puede oscilar entre 50 y 50000. Cuanto más alto sea ese factor de seguridad, más riguroso es el valor de TDI y cuanto más bajo, menos riguroso es el valor de la TDI.
Un saludo
Gimeno