Es la expresión de nuestras damas ante un suculento plato. Un exquisito sancocho (sopa) que lleva buena cantidad de ingredientes que le dan ese sabor especial. Pero igual sucede con la cabra y con la camura, que gustan mucho del sancocho en su menú.
TODO EN EL MISMO LOTE. Tradicionalmente se ha venido empleando un lote para la siembra de la gramínea y otro para levantar el banco de proteínas. En la práctica, qué pasa? El obrero gusta de emplear la gramínea y ni mira al banco, por una razón muy sencilla: en poco tiempo recoge la ración de pasto; para el banco necesita mayor tiempo y esfuerzo; mejor trabajar menos, y echar sólo el pastico, desequilibrando la ración. Recuerde que en líneas generales, la camura consume mucho pasto (gramínea) y un poco de ramas, mientras que la cabra consume muchas ramas y un poco de pasto.
En un predio a 1.200 metros sobre el nivel del mar se ha hecho este ensayo, dando tan buenos resultados, que lo traemos a cuento para que lo analice y si le encuentra conveniencia lo replique en otras partes. El lote tiene siete mil metros cuadrados de área y en él se ha establecido el sancocho. En pastos (Gramíneas) se han seleccionado la MARALFALFA Y EL MORADO o indú, en proporción de 70 y 30 respectivamente. En muchas personas no tienen buena aceptación, pero estimo que con un buen manejo dan muy buenos resultados. Se han sembrado a chorrillo y en surcos de a 70 cm. Espacio si se quiere amplio, pero se trata de intercalar otras plantas.
Queremos mezclarle forrajeras, sean o nó leguminosas, pero que cumplan varios requisitos: dar muy buena cantidad de forraje, ser éste de muy buena calidad, ser precoces, de buena aceptación por el rebaño, que duren mucho tiempo en producción y que se desarrollen en mezcla con el pasto, ya que se trata de organizar el forraje en un solo lote, para facilitar el manejo. Aproveche la gran ventaja de la leguminosa de recoger el nitrógeno del aire, por sus hojas, pasarlo por el tronco y fijarlo al suelo por la raíz. Así nos estamos ahorrando mucha fertilización comprada. Con el deterioro de la capa atmosférica, el rayo de sol se presenta más fuerte y es hora que coloquemos algo de sombra a esta superficie forrajera. En este sentido, el PIÑÓN OREJO u OREJERO (Enterolobium cyclocarpum), juega muy buen papel. Tres o cuatro árboles en una hectárea estarán muy bien; además es leguminosa. La usamos sólo para sombra.
En nuestro lote se han sembrado 200 matas de PLÁTANO (Musa sp). Se siembra dentro del pasto, con la intensión de cortar un racimo a diario. El rebaño solo comerá el racimo con su bellota, toda la hoja y el vástago (nada más). Analice la energía que tiene, que la proteína la buscamos por otro lado. Todo se pasa por la picapasto, cortando primero el vástago en tiras, para poderlo picar fácilmente. Es forraje que les encanta. A diario, cuando se corta el pasto se cortan también las hojas de plátano que se empiecen a amarillear y va a la ración del día. Continuamos sembrando más plantas.
El CHISPIADOR o BOTÓN DE ORO (Titonia diversifolia) ha dado magnífico resultado. Produce muy bien entre el pasto; es tan precoz, que se corta al tiempo con éste; de proteína estamos del 18 al 23%; el rebaño lo consume con agrado.
El CONFREY (Sinphytum peregrinum) se desarrolla igualmente bien en mezcla con el pasto. También nos da corte al tiempo con los anteriores. Contiene alcaloides hepatotóxicos que en nuestro caso no se han manifestado, tal vez por la cantidad mínima que se suministra. El sancocho.
La combinación de todas estas plantas, la debe hacer pensando en la regla de oro: mucho pasto y algo de ramas para el ovino y macha rama y algo de pasto para el caprino….mezcle de acuerdo al rebaño que tenga.
MORERA (Morus sp) que se emplea en la industria del gusano de seda, que convive con el pasto, que nos da corte con él, de gran apetencia por el rebaño y de altos valores nutricionales.
La ACACIA FORRAJERA (Leucaena leucocephala), leguminosa que nos fija mucho nitrógeno y que con su hoja diminuta produce una sombra bien interesante. Se podría dejar a libre crecimiento para buscar la sombra tan benéfica, teniendo en cuenta el poco forraje que pueda producir.
La gama de los CAYENOS (Hibiscus) que también se desarrollan bajo el pasto y que pueden dar corte con todos los otros. Alimento muy rico y gustoso. El sancocho.
El CACHAFRUTO (Eritrina edulis) que produce unas semillas de mucho valor en la alimentación tanto humana como animal, siendo leguminosa. Su forraje es muy bueno.
A nivel de piso encontrará toda la variedad de malezas que se pueda imaginar y que en su gran mayoría se constituyen en alimento valioso. El manejo es bien sencillo: con la macheta se corta el pasto y las plantas mayores para luego meter la macaneadora y aprovechar la maleza rastrera. En este sistema, la maleza, luego del corte, no compite con el pasto por altura.
YUCA (Manihot). También crece entre el pasto. A cada corte se quitan las hojas, dejando sólo el tallo; pero ojo, que hay unas variedades bien tóxicas por lo que es necesario dejar las ramas en oreo por 24 horas en el mismo corte. O sea que al día siguiente se emplea en mezcla con el resto de forrajes. Hay que darle corte cada mes y así tendrá una planta de ocho y más años de duración.
YUCO (Cnidoscolus aconitifolius). Para variar, éste también va dentro del corte de pasto y le damos un manejo similar al de la yuca, ya que produce una leche que ocasiona mucha piquiña; corte hoy y racione mañana.
CORDONCILLO (Piper angustifolium). Es una maleza difícil de acabar, pero que se nos vuelve un buen forraje, dando corte con el pasto. A la ración dá un aroma muy agradable para el rebaño.
Esta es una propuesta de alimentación para su rebaño que le puede dar muy buen resultado ya que toda la atención se dedica al solo lote y no distrae su atención en cosa distinta. Puede emplear otras plantas de acuerdo a las circunstancias. Su rebaño, que está totalmente confinado, lo verá y exclamará:
Uffff….UN SANCOCHO….DE ATAQUE!