En la forma más simple podemos decir que heno es un forraje deshidratado....es un forraje "seco" (pero no demasiado). Y por qué se llegó a esto. Sencillamente por la necesidad de conservar los forrajes para épocas donde se escasea y se hace indispensable tenerlo guardado y que los rebaños no mueran de hambre. Entonces se llega al ensilaje y al heno; ambos para conservar el forraje. Hoy haremos algunos comentarios respecto al heno.
Qué forrajes se pueden henificar? Todos lo que quiera (y pueda). Por qué? Porque no todos se dejan henificar. Por ejemplo los elefantes, la caña y algunos otros, que tienen buena cantidad de agua no se dejan secar fácilmente. Habría que hacerle un secado rápido, porque de lo contrario, los hongos se desarrollan cuando la planta aún está húmeda y cuando se llega al secado deseado, tiene gran cantidad de hongos. Quiere decir que hay buena cantidad de aparatos que facilitan la operación...pero acá queremos tratar el método de hacerlo artesanalmente, para evitar costos. Creo que buena parte se va es en la organización en su elaboración. Prácticamente todo se reduce a cortar y secar para guardar posteriormente. Y pensemos en que para esto se debe tener organización en le finca. Por ejemplo, tomemos el Matarratón (Gliricidia sepium); generalmente se tienen las plantas regadas por la finca. Así, se deben podar todas, recoger el forraje, llevarlo a secado y guardarlo. Y aquí arranca el orden....hay que chequear en ese predio, cuánto se demora la planta en estar nuevamente de corte y programar esta actividad, para hacerla periódicamente, pero con la precisión que se requiere. Puede botarle imaginación al cuento...pude ser cada tres meses...dedíquele dos o tres días a preparar el heno. Estamos hablando que de 90 días usted le debe dejar tres al heno. Mucho?...no creo. Y con malicia debe programar el secado para cuando haya sol...cosa más sencilla. En San Alberto (tierra cálida), secábamos el Matarratón en dos horas. Dos horas y creo que no es mucho pedir...entonces en los tres días...cuánto puede secar? Ya vamos viendo que no es cosa del otro mundo. En la organización debe programar henificar un forraje de muy buena calidad. Y digamos que la mejor época es cuando la planta está en prefloración o sea cuando empieza a mostrar la flor. El proceso se debe hacer con las diferentes plantas, pues algunas salen más rápidamente que otras...creo que no es mucho complique pues generalmente están por el mismo espacio de tiempo. Vamos viendo así que esto no tiene nada de complique y sólo se requiere tener ganas de hacerlo.
El heno tiene sus VENTAJAS que son muchas, pero acá sólo miraremos algunas. Para que quede bien, debemos emplear material inicial de calidad. Miremos que la hoja tiene más nutriente que el tallo; algunos llevan a éste a la quinta parte en proteína respecto a la hoja. De entrada estamos diciendo que el tallo no es el mejor material para secar. Considero que el heno nos da mejores ventajas que el silo; pero hay algunos materiales que son difíciles de secar; tal es el caso de la caña, del pasto elefante, del pasto Guatemala; ellos tienen mucha agua en el tallo y cuando éste está seco, ya hay buena presencia de hongos; se debería hacer un secado rápido, que le gane la carrera al hongo, o sea que cuando se vaya éste a reproducir, ya no hay condiciones de humedad y no lo podrá hacer; pero es un proceso que resulta costoso. La norma es: "forraje que no se deje henificar....ensilarlo". El heno se debe bajar en su humedad al 20% como máximo y éste es un problema. Hay aparatos, que no son costosos, para medir la humedad en el forraje pero son difíciles de conseguir en el mercado. Hicimos un ensayo, casi un juego, en la Facultad de Veterinaria. Tomamos una cantidad de hojas (de Búcaro- Erytrina glauca) y las pesamos; se llevaron las hojas al sol y cada hora se hacía el pesaje (es un juego), hasta bajarlas al 20%. O sea, más sencillo....dividir el peso inicial por cinco y cuando llegue a esta medida se suspende la acción solar; el forraje debe estar entre el 15 y el 20% de humedad. Esto es como referencia, para que en los primeros ensayos sepa, más o menos, cómo debe quedar de seco el forraje. Pero más luego, con algo de experiencia ya sabe darle PUNTO. Así, la medida es el criterio de cada quien; algunos, para iniciar, secan un poco de forraje y los guardan en un costal de fique o de fibra (no tiene problema con la presencia de aire) y van calibrando....lo importante es que al guardarlo no cree moho, indicativo de que ha quedado muy húmedo. Entonces...la práctica hace al maestro. Es como en la cocina, que la señora da el PUNTO a los alimentos. Ventaja grande la facilidad de elaboración del heno. El heno debe tener un color verde claro; el verde refleja el caroteno, que es la provitamina A, que en el organismo se vuelve Vitamina A, la cual se absorbe por el organismo. Si el heno es de color marrón o café, ya no hay caroteno y se tendrán los problemas de falta de Vitamina A. Se deben desechar los palos, que tienen sí mucha lignina y nada más.
Otro punto de interés es la época de corta del forraje. En líneas generales, las gramíneas tienen su mayor valor en proteína, cuando inicia la floración. Hay que programar todo haciendo que entre corte y corte, en las gramíneas, no pasen de 50 días. El Angleton (Dichanthium aristatum) es muy buen forraje para tierra cálida, pero su cultivo es chinchoso; me quedo con el estrella (Cynodon plectostachyus) y para lo frío el kikuyo (Pennisetum clandestinum) habiendo otros mejores, pero de cultivo complicado. El kikuyo es mejor que el estrella. Se ha sugerido, comprar CORTES de pasto. Negociar con un productor de tierra fría cada corte del kikuyo...se henifica y tiene usted un magnífico aporte a la ración. Esto se haría cada 50 días. El heno, de por sí, es bien liviano, lo que representa una gran ventaja para el transporte; es necesario prensarlo, para bajar el volumen, operación bien sencilla como se verá más adelante. El problema parasitario se controla en buena medida con el empleo del heno, pues el hecho de ser bajo en agua, dificulta la propagación parasitaria. Como se observa hasta ahora, la elaboración no representa alto costo, si se hace en forma artesanal, como trataremos luego. Aquí no hay problemas con las plagas (ratones etc) sino que se conserva en buenas condiciones en la bodega. Se pueden organizar costales de diferentes plantas, para preparar una buena ración, de acuerdo a las condiciones fisiológicas de cada grupo de animales; así los de levante tendrán un mayor porcentaje y va bajando este porcentaje, haciendo mezclas al momento de hacer la ración.
Trataremos la forma sencilla de preparar el HENO. Hay que partir de la base de tener GANAS. Con ellas todo es bello en la vida y sin ellas...Hay que tener en cuenta que la calidad del heno depende de la calidad del forraje a emplear. Un forraje bueno dará un heno bueno...un forraje regular dará un heno regular. Entonces seleccionar el mejor material, para tener un producto digno de la fábrica. El mejor momento de corta es cuando se inicia el período de prefloración. Usted debe organizar la actividad; seleccionar los cultivos por especies; tener el grupo de matarratón, por ejemplo, y ver cada cuánto hay que cortar...llega la época y podar todas las plantas, organizando estas podas en los tiempos establecidos.
Al final del proceso se debe tener un heno de color verde claro...pero casi todos los henos que conocemos son de color marrón o amarillo...esos están mal elaborados. Un heno de este color, está falto de caroteno que es el precursor de la Vitamina A...y si se proporciona buena cantidad se presentarán los problemas de esta avitaminosis. De modo que a inyectar vitamina A al rebaño. Es necesario prepararlo con buena técnica. Lo corriente es secar el forraje al sol. También se puede secar con maquinaria especializada pero de alto costo que no justifica su empleo. Tomemos como ejemplo el pasto estrella; ya el corte ha empezado a formar las flores; con guadaña, hoz o macheta se corta debidamente y se deja en el corte bien distribuido para que seque más fácil. Hacia el medio día se le da un voleo para que seque parejo; y hacia las cuatro de la tarde se lleva a secado a la sombra; aquí va de color verde, pues el sol es el encargado de hacer que se torne marrón. Ahora viene el secado a la sombra. Ha visto usted como los Scauts hacen un trípode, para de allí colgar la olla; simplemente son tres palos amarrados; bien....se amarran en forma horizontal unas varas a distancias que estime conveniente y en éstos hay que colocar el pasto..."como colgando ropa" dicen los españoles. Una vez llena la primera tanda, hay que empezar con la segunda y seguir subiendo hasta llegar arriba. Imagine que la parte interna esta hueca (de pasto) y que el aire puede entrar y salir sin inconvenientes. Lógicamente el trípode debe estar a la sombra; allí se deja hasta que dé PUNTO. Esto del punto es interesante; el forraje se corta con el 80% de humedad (o de agua); al sol se deja hasta que baje al 60% y ahí se continúa secando a la sombra hasta que tenga un 15%. Hay aparatos para medir este grado de humedad, pero la experiencia le puede colaborar enormemente. Haga ensayos hasta dar con el punto. Puede emplear costales pequeños (de fique) y buscar en poca cantidad lo deseado que es el punto. Si se daña...vuelva a hacerlo.
Pero si quiere algo de mayor tamaño, puede emplear dos varas que irán recostadas verticalmente a la pared; a estas varas debe colocar otras varas atravesadas, como si fuese una escalera de travesaños muy anchos....cuánto? usted dará la medida. Como en el trípode, se debe colgar el pasto "como colgando ropa", hasta llegar arriba al primer travesaño.. La parte baja de la escalera está separada de la pared y así queda un espacio suficiente para que el aire circule. Vea que el proceso es bien sencillo y de economía...ni hablar. Uno de los inconvenientes del heno es su volumen, cosa que se remedia con una simple prensa. Los técnico dela FAO presentan una bien sencilla que consiste en un cajón, de la medidas que usted considere convenientes y que lo puede hacer en madera o en metal; esa cajón lleva una tapa que entra a la caja y que va en su centro con para hacerle la presión. Recuerde que se seca...lo que se deje secar; si lo hace con hojas de ramas (y hay tantas), puede emplear un molino...no es el que está pensando. Conoce usted el aparato que emplea en construcción para cernir la arena; es un marco con fondo en malla; pues bien éste es el que necesitamos; basta colocarle patas, para poder anclarlo al suelo, que quede bien firme y a una altura conveniente, buscando la comodidad al operario. Se echa a la malla cantidad de hojas secas y se refriegan contra la malla. Al otro lado saldrá ya el forraje molido; de acuerdo a la malla, más o menos fina saldrá el forraje en polvo o un poco más grueso. Esta es una operación que demora poco tiempo y el operario va adquiriendo práctica y cada vez será mayor el rendimiento. Este material se recoge se encostala y va a bodega...la duración es de varios meses y hasta años. Tener el cuidado de no dejar los costales a nivel de piso, sino colocarlos sobre una tarima, para evitar la humedad. Se me ocurre que es un proceso muy simple, muy rápido, muy económico y que nos deja buenos dividendos. Algunas fotos han de ayudar a entender mejor el proceso.