Por:Héctor Patullo, Director General de Adifib. Argentina
Resumen
La Conversión Alimenticia es un indicador de producción muy importante que nos indica cuántos kilos de alimento necesita consumir un animal para ganar un kilo de peso vivo.
Si partimos de la premisa que: “la alimentación representa alrededor del 70 % del costo de producción”, es por ello que realizar un manejo correcto de la misma nos va a ayudar al éxito del criadero.
La Conversión Alimenticia es un indicador de producción muy importante que nos indica cuántos kilos de alimento necesita consumir un animal para ganar un kilo de peso vivo.
Si partimos de la premisa que: “la alimentación representa alrededor del 70 % del costo de producción”, es por ello que realizar un manejo correcto de la misma nos va a ayudar al éxito del criadero.
Causas más comunes de un aumento en el Índice de Conversión:
Dieta
Desbalance energético-proteico de la dieta:
Bajo porcentaje de energía: para cubrir el déficit, parte de la proteína del alimento será destinada a energía afectándose el IC.
Bajo porcentaje de proteína: no se conseguirá el máximo crecimiento y la proteína sobrante se usará como energía, pero su eficiencia de utilización es menor, por lo que el IC empeorará.
Factores anti-nutricionales y tóxicos. Un ejemplo son las micotoxinas que pueden afectar el consumo diario de alimento y ejercer una acción negativa sobre la pared intestinal llevando a afectar de manera negativa al crecimiento y eficiencia alimentaria.
Granulometría: moliendas gruesas tienden a empeorar las conversiones pero moliendas muy finas pueden ocasionar úlceras en el estómago las cuales, además de poder ocasionar la muerte del animal, reducen el consumo de alimento afectando posteriormente el crecimiento y la conversión.
Ambiente
Temperatura confort o termo neutralidad: Cuando la temperatura ambiente desciende los animales aumentan su consumo diario para generar un mayor calor corporal, perjudicándose la conversión alimentaria. Mientras que cuando aumenta la temperatura, el animal no consume lo suficiente y también destina mucha energía en bajar su temperatura.
Falta de ventilación: puede llevar a concentraciones de oxígeno inferiores a las necesarias para mantener el crecimiento.
Exceso de humedad: cuando la humedad se combina con el acalor, hace que el cerdo pierda eficiencia para disipar calor mientras que cuando hay bajas temperaturas, esta favorece la proliferación de microrganismos nocivos para el animal.
Manejo
Mala regulación de los comederos: pérdida de alimento.