Introducción. El alza constante de los precios de los ingredientes usados en la alimentación animal ha obligado a los nutriólogos y formuladores a incluir aditivos en las raciones como alternativa para mejorar la eficiencia de éstas; las enzimas exógenas, en su variedad de aplicaciones mejoran la digestibilidad de nutrientes, inactivan y/o destruyen factores antinutricionales, aumentan la digestibilidad de polisacáridos no amiláceos en aves y cerdos. En este sentido, las investigaciones en el campo de las enzimas se orientan a mejorar la digestibilidad de los cereales que podrían remplazar al maíz en las dietas de los animales, pero existe un gran potencial para mejorar la digestibilidad, en particular las pastas de oleaginosas. Actualmente existen en el mercado proteasas exógenas que son utilizadas en la alimentación de cerdos; sin embargo, no existe información suficiente sobre su impacto real en el valor nutritivo de una materia prima, por lo que es necesario generar esa información y así obtener el máximo beneficio de ellas.
Material y Métodos. Se utilizaron dos ingredientes; maíz y pasta de soya, cada uno para elaborar dos dietas, con y sin la inclusión del Ronozyme ProAct a razón de 200 ppm; las dietas se formularon para proporcionar 170 g/kg de Proteína Cruda (PC) con el ajuste apropiado de caseína y almidón de maíz, vitaminas y minerales de acuerdo a la NRC y óxido de cromo (0.25%) como marcador de digestibilidad. Adicionalmente se agregaron 10g/kg de grasa animal para disminuir el polvo y se agregó sacarosa a razón de 50 g/kg para aumentar palatabilidad. La unidad experimental consistió en un cerdo macho castrado, en etapa de crecimiento con peso vivo de 35 ± 2.8; provistos con cánula simple en “T” a nivel del íleon distal, fijada de acuerdo a la metodología descrita por Reis de Souza et. al., (2000). Se utilizaron un total de 12 cerdos alojados en jaulas metabólicas individuales, provistas con comedero y chupón. El periodo experimental fue constituido por cinco días de adaptación a la dieta, cinco días para colecta de heces y dos días para la colecta de contenido ileal. El efecto inducido por Ronozyme ProAct se midió empleando un diseño Cross-over 2x2, es decir 2 tratamientos y 2 periodos; por lo que, cada tratamiento tuvo un total de seis replicas. Las ecuaciones para los cálculos de las digestibilidades son las descritas por Mariscal-Landín y Reis de Souza (2006) Los datos se analizaron empleando el Procedimiento “Mixed” del paquete estadístico SAS.
Resultados y Discusión. La digestibilidad ileal aparente de la dieta elaborada con maíz se comportó de forma similar en ambos tratamientos, excepto el aminoácido Glicina (Cuadro 2), numéricamente con el uso de la enzima la digestibilidad promedio de los aminoácidos siempre es mayor para ambos ingredientes. En la pasta de soya, la PC y los aminoácidos Fenilalanina y Acido Glutámico fueron más digestibles en la dieta con enzima, pero la Lisina, Tirosina, Cisteína lo fueron en la dieta sin enzima (P<0.05). Al corregir por las pérdidas de Nitrógeno endógeno (Cuadro 3), la digestibilidad promedio de los aminoácidos en el maíz se mantuvo superior al adicionar la enzima, al igual que la digestibilidad de Glicina. En la dieta con pasta de soya adicionada con la enzima se mejoró la digestibilidad ileal estandarizada de la PC, Lisina, Isoleucina, Valina, Fenilalanina, Ácido Aspártico, Glutámico y Serina (P<0.05). La mejora provocada por la enzima ProAct sobre la digestibilidad fecal de la proteína de la pasta de soya (Cuadro 1), confirma indirectamente una mayor digestibilidad de la proteína a nivel ileal de la dieta adicionada con enzima.
Conclusiones.El uso de la enzima ProAct mejoró la digestibilidad de todos los aminoácidos a nivel ileal, aunque este efecto no haya sido significativo en todos los casos, sin embargo es de consideración el aumento en la digestibilidad de algunos aminoácidos esenciales en la pasta de soya, por lo que su uso estaría dirigido a este ingrediente.
Implicaciones. Al emplear enzimas en dietas de monogástricos y volver más digestible un nutriente, y por lo tanto más disponible para el organismo, podemos asegurar una mejora en los parámetros productivos y en consecuencia disminuir los costos de las raciones.