La tecnología enzimática mejora la digestibilidad. Por una producción animal más eficiente y sostenible

La tecnología enzimática mejora la digestibilidad, reduce los residuos y contribuye a una producción animal más eficiente y sostenible

La búsqueda de eficiencia y sostenibilidad en la producción animal ha llevado a la adopción de tecnologías como el uso de multiproteasas en las dietas animales. Se ha destacado por sus beneficios económicos, productivos y de bienestar animal.

Los beneficios del uso de la proteasa en las dietas animales pueden verse a muy corto plazo, especialmente cuando se reformulan las dietas.

La proteasa permite reducir el nivel de inclusión de ingredientes proteicos en el pienso, gracias a la mejor utilización de los aminoácidos por parte de los animales. Esto repercute directamente en un ahorro para el productor. Además del impacto económico inmediato, la suplementación con proteasa también genera resultados significativos en los rendimientos de producción, como un mayor peso de la pechuga de pollo en el momento del sacrificio.

Según el zootécnico, otro aspecto destacado es la reducción del nitrógeno (N) en las excretas, lo que minimiza su volatilización en forma de amoníaco en los establos, aportando beneficios para el bienestar animal y la eficiencia alimentaria.

Los altos niveles de amoníaco se asocian a enfermedades respiratorias, menor ganancia de peso y mayor mortalidad de las aves. Reducir este impacto medioambiental es una ventaja directa para los animales y el productor.

Además, la tecnología permite un menor uso de recursos naturales, ya que hace posible reducir la inclusión de materias primas proteicas en el pienso. Al utilizar proteasa, podemos reducir la inclusión de soja, por ejemplo. Esto reduce la necesidad de suelo para cultivar soja, un recurso natural de alto impacto. Esto tiene el efecto de reducir la huella medioambiental por kilo de carne producida.