La porcicultura tecnificada surge a partir del aprovechamiento del cerdo de productos y subproductos de bajo valor nutricional y que el porcino puede transformar en proteína de excelente calidad. La capacidad omnívora del cerdo lo coloca en una posición privilegiada. Desgraciadamente hemos transformado este principio fundamental en una obligación productiva. Forzosamente queremos usar granos forrajeros, algunos de los cuales compiten con el uso en humanos y por lo mismo encarecen la producción. Mas aún cuando se agrega el ingrediente de la energía (producción de etanol a partir de maíz). En mi humilde opinión, deberíamos regresar a los orígenes de la producción. Aprovechar todos los subproductos de escaso o nulo valor nutricional para la alimentación de porcinos, principalmente a escala rural. Esto requiere estudios para desarrollar una dieta balanceada tomando como base los ingredientes disponibles. Imaginemos una situación ideal. Dos o tres hembras de pie de cría que dependieran de una supervisión Veterinaria e inseminación artificial, consumiendo esquilmos regionales adecuadamente balanceados. Las crías pueden también beneficiarse de estos productos o se pueden vender algunos de los lechones producidos. Habrá que hacer un estudio de sustentabilidad. Las aguas residuales y excretas se aprovechan en un biodigestor para producir biogas (metano) el cual se utilizaría para estufas domésticas (evitando el uso de leña o carbón, mucho mas contaminante), o bien, para generar energía eléctrica para la comunidad. El agua final resultante, ya sin demanda bioquímica de oxígeno, se puede reutilizar para riego agrícola. Este sistema "ideal" proveería de proteína de excelente calidad, energía (sea metano o eléctrica) y agua para cosechar otros productos. Insisto, todo bajo una adecuada supervisión Veterinaria.