Es interesante apuntar la hora en la que se inicia el parto e ir controlando cada 30-40 minutos el desarrollo del mismo. La oxitocina es la hormona que actúa provocando las contracciones uterinas y favoreciendo la eyección de la leche. En partos difíciles o prolongados será necesario un aporte exógeno de esta hormona. Pero tenemos que tener cuidado con la cantidad a inyectar y no sobrepasar la dosis recomendada ya que podemos provocar una contracción prolongada del útero que impida la expulsión de los lechones.
3. PRIMEROS CUIDADOS DEL LECHÓN
1. Reanimación del lechón. En ocasiones, los lechones pueden nacer con un cierto grado de hipoxia. Esto es más frecuente en partos que se alargan en el tiempo (cerdas de primer parto o de más de 6, estrés por calor) o en los lechones que nacen en los últimos lugares. Es importante que la reanimación sea rápida para que las consecuencias de la hipoxia sean las menos posibles: falta de vigor, hipotermia, etc.
2. Secado del lechón. El lechón nace mojado y pasa a un ambiente más frío. Si no lo secamos y lo ponemos debajo o sobre una fuente de calor rápidamente sufrirá una importante pérdida de su calor corporal. Al secarlo hay que evitar frotarlo enérgicamente ya que le podemos provocar arañazos debido a la piel tan fina que tienen. Estas pequeñas heridas pueden ser puertas de acceso de diferentes bacterias.
3. Termorregulación. El lechón también nace con muy poco aislamiento térmico (piel fina, pelo corto y poco denso y escasa grasa subcutánea) y con muy pocas reservas energéticas (30-35 g glucógeno/Kg peso). Estas reservas de glucógeno sólo sirven para cubrir las necesidades durante las primeras horas de vida; es decir, para mantener el calor corporal, establecer un vínculo con la madre y empezar a mamar. De ahí la importancia de que la ingesta de calostro se produzca lo antes posible.
4. Desinfección del cordón umbilical. Cuando nacen los lechones van arrastrando el cordón umbilical por la paridera con lo que el riesgo de entrada de patógenos por esta vía es enorme. Lo normal es que se corte a 4-6 cm del ombligo. Al hacerlo hay que evitar tirar de él ya que, esto puede llevar a la aparición de hernias umbilicales posteriormente (las observaremos en transición o cebo cuando el lechón empiece a aumentar la ingesta de pienso). Para su desinfección podemos utilizar yodo, spray de aluminio o polvos secantes que además son cicatrizantes.
5. Encalostramiento. Un buen encalostramiento es vital para:
- Cubrir las necesidades energéticas del lechón (temperatura y metabolismo) - Adquirir inmunidad (humoral y celular). Ya sabemos que el tipo de placenta de la cerda no deja pasar los anticuerpos y que, por lo tanto, el lechón recibe las defensas de su madre a través del calostro. El calostro se produce durante las primeras 24-48 horas y la concentración de IgG desciende rápidamente después del parto. El intestino del lechón también va perdiendo la capacidad de absorción de estos anticuerpos por lo que aproximadamente a las 12 horas del nacimiento ya sólo se absorben el 25% de los mismos.
- Regular la motilidad intestinal
Una vez que ha finalizado el parto y si éste ha sido numeroso y han nacido lechones algo más pequeños, podemos hacer un encalostramiento secuencial. De esta forma, podremos ayudar a aquellos lechones que han nacido con bajo peso. Este manejo requiere tiempo y mucha atención, por lo que, si no se puede realizar de forma correcta, y teniendo en cuenta que el calostro se genera de forma continua, es preferible dejar a todos los lechones con su madre para que aprovechen toda la producción de calostro. En nuestra experiencia, tiene buenos resultados cuando tenemos una cantidad de nacidos vivos de más de dos lechones sobre las tetas funcionales de la cerda.
4. MANEJO EN LOS 3 PRIMEROS DIAS DE VIDA
1.- Corte de colmillos. Esta operación no es necesario realizarla cuando la producción de leche en la granja es correcta. Los lechones maman y después de mamar duermen y solo tienen un breve periodo de competencia. Únicamente, si hay hipoagalaxia, los lechones presentarán unas lesiones en los carrillos producidas por los colmillos. En tal caso, y en esas camadas, se puede realizar el limado de los colmillos.
2.- Corte de colas. Este punto es controvertido. No hemos encontrado una solución al problema de canibalismo que se puede producir en la fase de transición y de cebo. La mordedura de colas tiene un origen multifactorial, y cuando se produce es muy difícil aislar o separar a los animales afectados para que reciban un tratamiento adecuado. Estas agresiones continúas producen un grave estrés en los animales que afecta a su bienestar. En los casos más graves, los abscesos que se forman en la columna provocan una parálisis del tercio posterior lo que obliga al sacrificio del animal. Aconsejamos cortar los rabos con sistemas eléctricos que, seccionan y cauterizan la herida al mismo tiempo, para evitar que ese corte sea una puerta de entrada de gérmenes.
3.- Inyección de hierro. El lechón nace con escasas reservas de hierro que apenas cubren sus necesidades los 2 o 3 primeros días de vida. Además, la leche de la cerda sólo aporta el 10% de sus necesidades. A esto se le suma el no tener acceso a otras fuentes (tierra) por lo que es necesaria su administración vía intramuscular.
5. CERDAS NODRIZAS Y ADOPCIONES
Con este manejo buscamos igualar los pesos de los lechones y asegurarnos que todos los lechones tienen una mama. El aumento de la prolificidad no siempre va acompañado de un incremento de la capacidad lechera de las cerdas por lo que, en ocasiones, no tenemos tetas funcionales para todos los lechones de la camada. La producción media de calostro es de 3.6 litros (1.9-5.3 l).
En cuanto a las adopciones, para nosotros, lo más importante es lograr el equilibrio entre productividad numérica, sanidad y rentabilidad de los animales que destetamos. El objetivo final de destetar el mayor número posible de lechones es que éstos sean rentables, y para ello, los lechones tienen que tener una buena sanidad y un buen peso al destete. De esta forma lograrán desarrollarse correctamente en las siguientes fases de producción.
El manejo de los lechones en la paridera debe ser sencillo y debe estar perfectamente protocolarizado para evitar realizar adopciones innecesarias cuyo único objetivo sería aumentar la productividad numérica. Este aumento del número de lechones no tiene interés económico si los lechones no tienen una calidad suficiente para terminar de alcanzar las siguientes fases de producción. Definimos dos tipos de adopciones:
- 1. Lechones sobrantes. El día siguiente al parto se comprueba el número de tetas que son activas y el número de lechones vivos de que disponemos. Todos los que sobran se pondrán con una cerda adoptiva. Está será una cerda que haya parido hace unos 5-7 días y sus lechones pasarán a una cerda que tenga unos 21 días de lactación. Los lechones de esta última cerda, pueden permanecer en su cuadra de partos con suministro de pienso y agua hasta que se desteten el resto de las cerdas de la sala.
- 2. Lechones retrasados. Estos son los lechones que aparecen a partir de los 5 días del nacimiento y no tienen un desarrollo correcto por falta de producción de leche de la cerda. En este caso se colocan todos los retrasados en una cerda de 21 días de lactación, y se quedan hasta el destete de su sala.
5.1. MANEJO DE LAS ADOPCIONES A NIVEL PRÁCTICO
En las salas de maternidad hay que dejar tantos huecos como la prolificidad de la granja nos indique. Si tenemos salas de 24 parideras y prolificidad de 16 nacidos vivos con una media 14 pezones por cerda, tendremos que dejar unos 3 huecos en la sala para los lechones sobrantes, y normalmente 1 hueco por cada dos salas para los retrasados. No hay que olvidar que las salas deben respetar la premisa de todo dentro, todo fuera, de forma que lo que tenemos que mover son las cerdas de una sala a otra y nunca los lechones.
El manejo de las adopciones de lechones debe de hacerse con extremo cuidado. En primer lugar, porque los movimientos de los lechones en la paridera es una de las acciones que mayor impacto tienen a la hora de que las enfermedades infecciosas permanezcan, de manera constante, en la granja. Las granjas positivas estables a PRRS tienen un pequeño porcentaje de animales positivos, que no son detectados en las pruebas de monitorización, pero que al moverlos a distintas camadas aumentamos la capacidad de infección a otros lechones. La cerda que ha tenido animales positivos, también es capaz de trasmitir el virus ya que el virus permanece en la ubre y, por lo tanto, si ha tenido una camada positiva y se usa de nodriza, sus nuevos lechones se pueden infectar con el virus.
Como vemos, no solo los lechones transmiten entre ellos enfermedades sino la cerda también, por lo tanto, antes de cambiar y “emplear” a la nodriza se debe limpiar toda la zona mamaria con un jabón o una toallita. Además, es aconsejable dejarla un par de horas sin lechones para que tenga una buena subida de leche y acepte de mejor grado la camada adoptada.
6. MANEJO DE LAS SALAS DE PARTOS
En primer lugar, debemos de considerar la sala de partos como una unidad productiva y sanitaria. Para ello, en la misma sala debemos de tener cerdas que tengan una diferencia de edad en el parto como mucho de 2/3 días. Dependiendo de las dimensiones de la paridera será necesario mover animales para que la misma sala acoja a cerdas que han parido en un intervalo de tiempo corto, esto facilita todas las tareas de manejo de los lechones y de la alimentación de la cerda. La alimentación en maternidad debe ser individualizada, de esta manera es más sencillo ir generando la curva de ingesta de pienso.
Uno de los factores que más influencia tendrá en la retirada del oxido de zinc de la alimentación de los lechones, será el peso de los lechones al destete. Otro, la cantidad de pienso que han consumido en el periodo previo al destete. Por lo tanto, es fundamental destetar a los 28 días con un peso superior a los 6,7 kg y los más pequeños con más de 4 kg. Todos ellos deben haber consumido pienso suficiente en lactación. La cerda, en el último periodo de lactación, no produce toda la leche que necesitan los lechones, y, por lo tanto, es fundamental el suplemento con pienso para alcanzar el peso deseado al destete. El pienso debe estar fresco y limpio el comedero.
No hay que olvidar el factor agua. La calidad del agua de bebida es otro factor importante, la calidad microbiológica es importante para mantener la salud intestinal, y la calidad fisicoquímica para aumentar el consumo de agua por parte de las cerdas y, por consiguiente, aumentar la producción de leche. Es necesario que tanto cerda como lechones tengan accesibilidad al agua, y ésta debe ser de la mejor calidad posible.
7. LMPIEZA Y DESINFECCION DE LAS INSTALACIONES
Uno de los aspectos clave para mantener la sanidad de los lechones es contar con un buen protocolo en cuanto a limpieza y desinfección de las salas de partos. La contaminación ambiental es muy alta y es capaz de superar el estatus inmunitario de los animales. Esta rotura del equilibrio dará lugar a enfermedad. Para hacer un buen lavado y desinfección de las salas, hay que seguir los siguientes pasos:
- 1. Nosotros somos partidarios del lavado de los fosos de las parideras con una bomba específica para reducir la presión de infección de patógenos digestivos. Previamente se retira toda la materia orgánica que hay en la sala.
- 2. Aplicación de espuma detergente para que la limpieza posterior se haga en profundidad (no dejar más de 1 hora porque entonces se seca y la espuma cristaliza).
- 3. Limpieza a presión de las paredes siguiendo la línea de arriba abajo, para que no caiga suciedad, y seguidamente, el suelo con especial atención a las placas de calefacción y debajo del comedero de la cerda.
- 4. Desinfección tras el secado de la nave.
- 5. Monitorización con esponjas de todo nuestro protocolo. Determinar la cantidad de patógenos que al final nos persisten en la sala nos indicará si lo estamos haciendo correctamente.
Foto 1 y 2: Aplicación de espuma en pariderasLas pérdidas que se producen en maternidad suelen tener un carácter multifactorial, y disponer de una lista de chequeo, nos ayuda a comprobar todos los factores que pueden incidir en el desarrollo productivo en esta fase. De esta forma, será más sencillo intentar corregir aquellos que afectan negativamente a dicha productividad.
Para que los lechones puedan expresar su potencial genético en las siguientes fases y, además trabajar en sistemas de uso mínimo de antibióticos, debemos destetar animales con la edad y peso adecuado. En relación a este último factor, no solo es importante el peso medio del destete sino la variabilidad de pesos que presentan los animales de ese destete.
El abordaje será distinto dependiendo del diagnóstico que hayamos establecido, pero es innegable que se produce, por un lado, una pérdida de condición corporal de los lechones debido al proceso entérico y, por otra, una pérdida de la succión y del vaciado de la glándula mamaria que se traduce en una pérdida de la producción de leche de la cerda, que hará que se incremente aún más esta dispersión de los pesos de los lechones al destete.
El destete a 28 días, nos aporta un beneficio extra en cuanto a la madurez de los lechones para la retirada del zinc. Por un lado, nos permite reducir el uso de tratamientos antibióticos (gráfico 2). Es muy significativo que, en lechones destetados con más de 24 días, el consumo de antibióticos se reduce a la mitad que en el grupo de los lechones destetados con 21 días.
Y, en segundo lugar, se reducen las pérdidas de peso que sufren los lechones tras el destete (gráfica 3). En todos los destetes hay un porcentaje de lechones que pierden peso. Esto es debido al cambio de las instalaciones y de alimentación. Esto es un problema y suele dar lugar a un porcentaje de inadaptados al destete.