Fuente:Martha Estévez, Asoc. Colombiana de Porcicultura
A partir del 1 de enero y hasta el 31 de diciembre de 2010, el valor de la Cuota de Fomento Porcícola será de $3.433 por cada cerdo que se sacrifique.
Este valor corresponde al 20% de un salario diario mínimo legal vigente.
La ley 272 de 1996 y sus decretos reglamentarios establecen que los recaudadores de la cuota están obligados a depositarlos dentro de los diez (10) días del mes siguiente al del recaudo, en la cuenta especial denominada Fondo Nacional de la Porcicultura.
Objetivos de la Ley
La investigación en porcicultura, asistencia técnica, transferencia de tecnología y capacitación para mejorar la sanidad e incrementar la productividad de la actividad porcina, así como para obtener un sacrificio en condiciones sanitarias.
Apoyar y fomentar la exportación de cerdos, carne porcina y sus subproductos.
Participar con aportes de capital en empresas de interés colectivo dedicadas a la producción, comercialización e industrialización de insumos y productos del sector porcícola.
La promoción de cooperativas de porcicultores cuyo objeto sea beneficiar a porcicultores y consumidores.
La organización de industrias con sistemas eficientes de comercialización que permita, en ciertos casos, subsidiar los precios de la carne porcina para los consumidores de bajos ingresos.
Programas económicos, sociales y de infraestructura para beneficio de la actividad porcina.
Aquellos programas que previa aprobación de la Junta Directiva del Fondo Nacional de la Porcicultura, procuren el fomento de la porcicultura nacional y la regulación de los precios de sus productos.
Administración
Desde su creación, en 1996, es la Asociación Colombiana de Porcicultores quien asume esa responsabilidad, en virtud del contrato suscrito con el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, el cual contempla no sólo el manejo de los recursos sino la definición y ejecución de los diferentes programas y proyectos a realizar.
Seria muy bueno que esta cuota por cerdo se lograra por todo el país, que todo pequeño y mediano porcicultor integre una asociación o cooperativa, pues falta promover la actividad porcina enforma tecnificada, sobre todo en el pequeño campesino.
Desgraciadamente los funcionarios INVIMA se han vuelto cositeros y han venido clausurando la sección de faenado de cerdos, en las plantas de beneficio lo cual ha aumentado el sacrificio clandestino en los pueblos medianos y pequeños, actividad que se realiza en pésimas condiciones sanitarias.Como consecuencia lógica, no se sabe que ha sido peor, si el remedio o la enfermedad. Se está dejando de recaudar la cuota de fomento por un lado y de otro lado los pequeños cebadores de cerdos se ven sometidos al chantaje de la policia y de los organismos locales de control para evitar que las canales sean decomisadas cuando son transportadas a los expendios desde las veredas o puntos de sacrificio. Es necesario corregir esta situación.