¿Prevenir para prevenir?

¿PREVENIR PARA PREVENIR?

Ante los casos presentados en Europa y China de la Peste Porcina Africana (PPA) surge una pregunta acerca de la prevención al contagio al agente causal de dicha enfermedad y a muchas otras que se puedan presentar en todo el mundo, ya que el riesgo que la enfermedad salte de una región a otra, de un país a otro o de un continente a otro es muy claro e inminente si no nos preparamos para atajar o evitar que esto suceda y es debido a razones como que la comercialización que maneja hoy el mundo implica movimiento constante de mercancías, insumos y personal que participa en esas negociaciones.

Lo anterior me lleva a decir que el otro lado del mundo está precisamente a mis pies; o sea que ya no hay nada tan lejos como lo estaba hace cuarenta o cincuenta años, ya no hay fronteras que impidan el ingreso de enfermedades o de agentes infecciosos como lo es el de PPA y puede que ya esté a sólo unos metros de nuestras explotaciones porcícolas y que a cualquier momento revienta y nos coloniza en tiempo real.

La pregunta que me obliga hacer es si tenemos que prevenir para prevenir el ingreso de este peligroso agente? Y aquí tengo que definir los términos de la pregunta: Prevenir se refiere a la acción de preparar con antelación lo necesario para lograr un fin o anticiparse a una dificultad de tal forma que el riesgo se evite o se minimice. Al respecto puedo asegurar que prevenir es la forma más barata de evitar que el agente infeccioso penetre a nuestras explotaciones porcinas a producir los estragos sanitarios y económicos que genera.

Cuando hablo de prevenir para prevenir, me refiero a que tenemos que estar expectantes y conocer a fondo el problema que se avecina; tenemos que saber el tipo de agente que circula, su hábitat, su forma de reproducción, su tiempo de virulencia, su forma de propagación, etc.

Si nosotros conocemos a nuestro enemigo y sabemos todo o casi todo sobre él, es mucho más fácil realizar su control cuando éste quiera invadirnos; como ejemplo traigo a colación el caso de un ladrón de apartamentos que está rondando el nuestro y se sabe que ya atacó y robó en varios apartamentos vecinos, en este caso tenemos que prevenirnos para prevenir un eventual ataque y lo que hacemos es averiguar por ese ladrón para conocer su modus operandi y comenzar por aumentar la seguridad del apartamento y la de los que lo habitamos; reforzamos puertas y ventanas, despejamos los sitios donde creemos que el caco puede esconderse y luego atacar; debemos además ser muy cuidadosos al ingresar a la residencia y hasta resguardarnos temprano para evitar que la oscuridad y soledad del exterior se conviertan en su aliado, etc. y todas las prevenciones anteriores las hacemos para evitar o prevenir el ingreso de este individuo a nuestro hogar para hacernos daño.

En las explotaciones porcícolas si manejamos medidas estrictas de bioseguridad como: evitar la entrada de personal extraño a los predios de las granjas, evitar el ingreso de otros animales, hacer cuarentena a los animales nuevos que ingresan como reemplazo a la granja, adopción de uso de indumentaria adecuada y apropiada para las visitas, hacer uso de los descansos sanitarios obligados y apropiados, el control permanente de plagas, etc. entonces podremos evitar el ingreso del agente patógeno.

La prevención para prevenir el ingreso de cualquier agente es un tema de mucha actualidad en porcicultura por el surgimiento de enfermedades que no existían antes o se creían controladas y se exacerbaron o por la mutación de muchos agentes como es el caso del virus de la influenza porcina que tantos estragos viene haciendo en la porcicultura mundial. Por lo tanto, es necesario un exhaustivo conocimiento y análisis de la dinámica de estos agentes como primer método preventivo para evitar su incursión en nuestros sistemas productivos.

La porcicultura moderna implica la adopción de medidas tanto de manejo, de genética y sanidad para poder producir un excelente producto final, una excelente calidad de proteína que sea innocua para alimentar a la población humana cada vez más grande y exigente en alimentos sanos; pero esto sólo se logra si y sólo si controlamos previniendo el ingreso de estas enfermedades a las granjas que pueden afectar de forma negativa la productividad económica como la sanitaria de esa granja y por ende la sanidad y el bienestar humano.

Es urgente y necesario tomar medidas preventivas para prevenir que los alimentos de origen animal sean innocuos para la salud humana o que los humanos sirvamos de transportadores de esas patologías como es el de PPA, aunque no afecte la salud humana, pero si la del cerdo que es nuestro productor de alimento.